Qué hacer en San Antonio de Areco, una escapada ideal para hacer en Buenos Aires

San Antonio de Areco es uno de los mejores destinos de Buenos Aires para hacer una escapada y descansar. Qué actividades se pueden hacer allí.

03 de enero, 2025 | 19.11

La provincia de Buenos Aires ofrece muchísimos lugares increíbles para relajarse y descansar de la rutina, uno de ellos es San Antonio de Areco, ubicado a pocos kilómetros de la Ciudad este destino es perfecto para una escapada de fin de semana. Qué se puede hacer ahí. 

Conocida como la "Capital Nacional de la Tradición", San Antonio de Areco cuenta con una gran infraestructura turística que invita a los amantes de la naturaleza y de la historia a descubrir las tradiciones gauchescas y los mejores rincones históricos. Sus calles, rodeadas de arquitectura colonial transportan a sus visitantes a otra época y que son muestra de lo mejor de la identidad argentina.

Qué hacer en San Antonio de Areco: la escapada ideal en Buenos Aires

San Antonio de Areco es un lugar ideal para descansar y alejarse del bullicio de la ciudad, pero además ofrece diversas actividades para realizar ya sea que vayas solo, en familia o con amigos. Conocé todo lo que podés hacer:

1. Recorrer el casco histórico: 

En lo que es un destino ideal para los amantes de la cultura y de la historia, quienes visiten San Antonio de Areco no pueden dejar de recorrer su casco histórico. La visita puede empezar la plaza principal Ruiz de Arellano, donde se encuentra la parroquia San Antonio de Padua que muestra cómo los primeros conquistadores españoles trajeron materiales nobles desde Europa y empezaron a edificar la ciudad a partir del año 1730. 

En ese recorrido, también se puede conocer la  municipalidad actual, ubicada frente a la parroquia, es un antiguo edificio de estilo colonial que perteneció a la familia Laplacette, una de las más ricas del pueblo, desde su construcción en 1885, hasta su adquisición por la ciudad en 1966. Hoy se puede admirar un amplio patio, un antiguo pozo, azulejos de época y hierros forjados.

2. Visitar museos

  • Museo Draghi: cerca del casco histórico se encuentra el museo y taller de platería de la familia Draghi, abierto desde 1960. La sala de exposición, ubicada debajo de la cúpula del edificio, contiene una colección  de piezas gauchas del siglo XIX  que son 100% de plata, entre los que se encuentran una gran cantidad de facones y tiradores de gauchos, pero también piezas del recado completo del caballo: sillas de montar, frenos, estribos, rebenques. .
  • El museo Las Lilas: este exhibe una selección de obras originales del pintor Florencio Molina Campos (1891-1959), cuyas acuarelas, conocidas al principio por los calendarios que el ilustraba para la marca Alpargatas, representan escenas de la vida del gaucho, el guardián de la Pampa. El museo presenta también diversas muestras de expresión artística desde la época precolombina hasta hoy.

  • Museo Gauchesco Ricardo Güiraldes: al que se puede acceder caminando por la costanera del río Areco, tras cruzar el Puente Viejo, construido en 1857 y emblema de la ciudad. Este museo público honra la figura emblemática del gaucho y el famoso escritor, novelista y poeta argentino Ricardo Güiraldes. Tiene 6 salas y la pulpería La Blanqueada, repletas de obras, objetos y documentos antiguos, los cuales cuentan la vida de Ricardo Güiraldes y grafican los usos y costumbres del gaucho de ayer y de hoy.

3. Recorrer pueblos y estancias de la zona

Dentro del municipio de San Antonio de Areco, hay pintorescos pueblitos como el Vagues, Duggan y Villa Lia que también se pueden visitar para adentrarse en el mundo gauchezco. También están las Estancias de la zona, donde seguramente hay oportunidades para recorrer San Antonio de Areco arriba de un caballo criollo. 

4.Disfrutar de su gastronomía

Qué hacer en San Antonio de Areco, una escapada ideal para hacer en Buenos Aires.

En la costanera del río Areco podés disfrutar de una rica comida en la tradicional pulpería El Palomar, en el sobrio restaurante La Arcadia o de la cálida parrillada La Porfiada (Bolivar 66). Al subir por la calle Zapiola, a tan solo 300 metros del río, se encuentra el Almacén de Ramos Generales (Zapiola 143). Además, los locales les recomiendan el Mestizo (Alsina 219), Rossita (San Martin 326) o Zarza (San Martín 361) con una cocina más moderna.

Para los que buscan comer rodeados de naturaleza, pero sin alejarse demasiado de la ciudad, están La Casa de los Fogoneros, el excelente restaurante de la Estancia La Cinacina (10 minutos caminando desde la plaza Arellano), o Las Dueñas (Ruta 8 Km 115, Camino del Quinton, 10 minutos en auto).

A 100 metros de la plaza Arellano, se encuentra el famoso Boliche de Bessonart (esquina Segundo Sombra y Zapiola) con su arquitectura y su decoración cargada de historia. Mientras que también se puede disfrutar de Los Principios y el bar San Martin, entre otros bares emblemáticos de la ciudad visitados por los paisanos y gauchos para jugar al truco.