En Argentina existe un navegador web que paga en dólares por visitar páginas y ver anuncios. Llega como una opción diferente a Google Chrome, dado que ofrecer dinero a cambio de la usabilidad no es habitual en softwares de este tipo.
Brave es un navegador web que ganó popularidad en los últimos años, destacándose como una alternativa a Google Chrome, gracias a su enfoque en la privacidad, velocidad y una característica única: paga a los usuarios por ver anuncios y navegar por internet. Desarrollado por Brendan Eich, cofundador de Mozilla y creador de JavaScript, Brave se presenta como una opción revolucionaria en un ecosistema dominado por gigantes como Google, con una propuesta disruptiva que busca cambiar la forma en que los usuarios interactúan con la publicidad en línea.
Un navegador enfocado en la privacidad
A diferencia de Google Chrome, que recopila datos de los usuarios para optimizar la publicidad y personalizar la experiencia, Brave pone en primer lugar la privacidad. El navegador bloquea automáticamente rastreadores, cookies de terceros y anuncios invasivos que ralentizan la carga de páginas y afectan la experiencia del usuario. Este enfoque en la privacidad permite que las páginas carguen más rápido y reduce el consumo de datos, haciéndolo ideal tanto para quienes desean una navegación más fluida como para quienes valoran su privacidad en línea.
Brave incluye una función denominada “Escudos”, que actúa como una protección contra el rastreo y los anuncios intrusivos. Al activar los Escudos, el usuario puede navegar sin ser rastreado por terceros, algo que no ocurre de forma predeterminada en Google Chrome. Además, Brave utiliza HTTPS Everywhere, asegurando que las conexiones a los sitios web sean seguras, encriptadas y protegidas contra ataques malintencionados.
MÁS INFO
Brave Rewards: Gana criptomonedas por navegar
Una de las características más llamativas de Brave es su sistema de recompensas llamado Brave Rewards, que permite a los usuarios ganar criptomonedas simplemente por navegar y ver anuncios. A diferencia de otros navegadores, Brave no bloquea todos los anuncios, sino que ofrece a los usuarios la posibilidad de ver anuncios no invasivos a cambio de obtener ingresos en forma de tokens BAT (Basic Attention Token). Los anuncios que Brave muestra no rastrean a los usuarios, y ellos tienen el control total de la cantidad de anuncios que desean ver, o incluso pueden desactivarlos por completo si así lo prefieren.
Los BAT acumulados pueden ser utilizados de diversas formas: se pueden donar a los creadores de contenido que se encuentren verificados en Brave, intercambiar por otras criptomonedas o incluso transferir a billeteras electrónicas para su uso fuera de la plataforma. Este modelo económico alternativo es un gran atractivo para quienes buscan una forma de monetizar el tiempo que pasan en línea, lo que convierte a Brave en una opción innovadora frente a Chrome, que obtiene ingresos de la publicidad sin compartirlos con los usuarios.
Velocidad y consumo reducido
Gracias a su capacidad para bloquear anuncios y rastreadores, Brave se destaca por ser uno de los navegadores más rápidos del mercado. Esto no solo mejora la experiencia de usuario, sino que también permite un menor consumo de recursos en dispositivos con especificaciones más modestas, como smartphones o laptops de gama media. Al comparar Brave con Google Chrome, muchos usuarios notan que Brave es más eficiente en el uso de la memoria RAM, lo que se traduce en un rendimiento más estable, especialmente cuando se tienen abiertas múltiples pestañas.
Una alternativa a Google Chrome
Si bien Google Chrome es el navegador más utilizado del mundo, Brave ofrece una opción atractiva para aquellos que buscan mayor privacidad, control sobre la publicidad y la oportunidad de ganar dinero mientras navegan. Su enfoque en la transparencia y su sistema de recompensas basado en criptomonedas lo posicionan como una alternativa viable para usuarios cansados del modelo tradicional de internet, donde las grandes empresas de tecnología obtienen beneficios a costa de los datos personales de los usuarios.
En resumen, Brave es un navegador que no solo promete mayor velocidad y seguridad, sino que también permite a los usuarios participar activamente en la economía digital, ganando por su atención.