La psiquiatra Agustina Cosachov, una de las principales imputadas en la causa que investiga las circunstancias de la muerte de Diego Armando Maradona, será indagada por los fiscales este viernes. La médica es la sexta citada a declarar y una de las más complicadas, junto al neurocirujano Leopoldo Luque. Ella era la encargada de prescribir la medicación psiquiátrica que tomaba el por entonces DT de Gimnasia y fue una de las que firmó la externación de la Clínica Olivos.
Cosachov fue citada para este viernes a las 12 en la Fiscalía General de San Isidro, en la calle Acassuso 476, donde irá acompañado por su abogado, Vadim Mischanchuk. Según anticipó Télam, presentará un escrito “con un descargo”, pero que al margen de ello “hará algunas aclaraciones y también va a contestar preguntas”.
De qué la acusan a Cosachov
Al igual que el resto de los imputados, Cosachov será indagada por "homicidio simple con dolo eventual", un delito que prevé una pena de entre 8 y 25 años de cárcel, y que podría haber llevado a los fiscales a pedir sus detenciones, pero no sucedió y solo se les prohibió su salida del país.
Para los fiscales, Cosachov era la encargada de prescribir la medicación psiquiátrica que tomaba el por entonces DT de Gimnasia y que, según la junta médica, no era aconsejable para pacientes cardíacos.
"No aseguró la correcta administración de la medicación y psicotrópicos que había indicado a Diego Armando Maradona, desentendiéndose de los efectos adversos y eludiendo los controles y/o estudios apropiados a los fines de su evolución"
Además, fue una de las que firmó la externación de la Clínica Olivos para llevarlo a la supuesta internación domiciliaria en la casa del country de Tigre donde falleció el 25 de noviembre pasado. Para los fiscales, se apartó "del lugar donde se encontraba llevando a cabo la internación domiciliaria, sin adoptar un plan de contingencia y seguimiento adecuados al caso".
Al llamarla a indagatoria, los fiscales destacaron que el día de la muerte de Maradona, Cosachov no reaccionaba y "omitió también encargarse personalmente de la reanimación del paciente".
"La imputada, teniendo la posibilidad real de evitar la situación de peligro objetivo que creaba su comportamiento, ante el resultado que se presentaba como previsible y evitable, permaneciendo indiferente frente a las graves falencias apuntadas que no tendió a revertir, asumió desaprensivamente los riesgos que corría la salud de Maradona, y las consecuencias que ello podía generar".
También se le atribuye un segundo delito y será indagada por "falsedad ideológica" -prevé una pena de 1 a 6 años de cárcel-, ya que la acusan de haber confeccionado en octubre de 2020 un certificado de aptitud mental de Maradona sin ir a visitarlo.