Derrumbe en Villa Gesell: Gonzalo, el héroe que salvó a la única sobreviviente de la tragedia

Gonzalo, el bombero voluntario que salvó la vida de María Josefa, rompió el silencio y dio detalles del rescate. Además, contó cómo fue el reencuentro con la mujer de 79 años.

06 de noviembre, 2024 | 15.10

Gonzalo es médico anestesista en el HIGA “Dr. Oscar E. Alende” de Mar del Plata y además, el héroe que por siempre recordará María Josefa, la única sobreviviente –hasta el momento– del derrumbe del Apart Hotel Dubrovnik en Villa Gesell. Al mismo tiempo, es bombero voluntario y trabajó incansablemente, durante la última semana, en el lugar de la tragedia que ya se llevó siete vidas. "Uno, durante todos estos años, se forma y trabaja para el día que pase algo así. No lo vemos como algo cercano, corren los días, lo tomás como entrenamiento o preparación... Estoy agradecido, somos voluntarios, lo hacemos en nuestros ratos libres y cumplimos con nuestras obligaciones", marcó. El rescate y el reencuentro con María.

El bombero, que fue noticia en los últimos días, retornó a "La Feliz" después de ocho días de continuo trabajo en la ciudad balnearia de Gesell. "Seguramente esta tarde, vuelva a cumplir con mi trabajo", marcó en diálogo con C5N. Arribó a Balcarce, y minutos más tarde, al lugar del hecho ese mismo miércoles por la madrugada junto a su brigada de búsqueda y rescate perteneciente a la Federación de Bomberos de la provincia de Buenos Aires. Y recordó que al momento de su arribo, ya había equipos de bomberos de Pinamar, Mar de Ajó y Gesell trabajando y planificando estrategias para rescatar a las personas bajo los escombros.

"Particularmente, el lugar donde colapsan los departamentos y donde estaba María fue uno de los primeros que se identificó. Ahí se escuchó un poco de ruido, se sectorizaron los perros de búsqueda y se comenzó a trabajar para localizar a María Josefa. El ruido que escuchamos es el que realizó María con la piedra. Al empezar la búsqueda se genera un silencio absoluto para identificar llamados, ruidos, gritos... Ese fue el primer indicio que tuvimos", contó. La mujer de 79 años conocía el código internacional de socorro en código Morse, clave para acceder a su ubicación. Seguido de ello, gritó y pidió ayuda. Ese auxilio, que rápidamente llegó.

Gonzalo detalló que comenzaron a trabajar, rápidamente, hasta acceder a la mujer y que "una vez que se empezó a sacar el material que tenía encima, pudimos empezar a hablar". El trabajo para rescatarla, extraerla del lugar y retirarla en ambulancia, se extendió cerca de 9 horas. "Fue mucho tiempo. Cada vez que nos acercábamos, la escuchábamos más. Ella estaba muy lúcida, estuvo todo el tiempo ayudándonos a orientarnos. La gran alegría fue cuando pudimos llegar a ella y controlar sus signos vitales, empezar a cuidarla un poco", manifestó.

Gonzalo, el héroe de María Josefa en el trágico derrumbe de Gesell.

"Me salvaron mis ángeles, los bomberos, las enfermeras, los médicos, el encargado Carlos Cantagliano, que les dijo dónde podíamos estar, y ahora mis parientes que me acompañan. Después, no sé, una fatalidad, creo que una casualidad nos puso ahí. Yo no creía mucho en los milagros, bueno, ahora tendré que creer", expresó María Josefa desde el hospital. Mencionó a Mariano, otro de los bomberos, a quien quiere conocer y a Gonzalo, con quien ya se reencontró.

Tal como señalaron diversos bomberos y rescatistas a lo largo de la semana de búsqueda, el joven manifestó que cada movimiento que se realiza sobre las estructuras que cedieron, "que están indemnes y por seguir colapsando", debe ser con cuidado y tomando todos los recaudos necesarios. "Hay que estabilizar, avanzar y volver a estabilizar. Son cuestiones muy cuidadas para no generar más daño, son muchas toneladas", dijo.

El reencuentro con María Josefa

María Josefa es, actualmente, la única sobreviviente al trágico derrumbe en Gesell. Otras siete personas perdieron la vida bajo los escombros, uno de ellos su marido Federico Ciocchini de 84 años. Desde la sala del Hospital Fossati de Balcarce, la mujer aseguró que los bomberos la encontraron por el golpeteo de la piedra y su pedido de ayuda. Además, realizó diversas técnicas de yoga que le permitieron sobrevivir durante 10 horas bajo los escombros. Gonzalo, recordó ese momento.

"Particularmente, cuando pude sacar a María Josefa sentí una alegría enorme. Es una satisfacción, por el deber cumplido. Pero es un trabajo en equipo, éramos muchas las personas que estábamos ahí, me toca hoy ser la cara visible de este grupo humano pero todas las brigadas estuvieron trabajando arduamente. Estoy muy agradecido por el reconocimiento, la satisfacción es muy grande... Llegar a esto son años de formación, de capacitación y de dejar a nuestras familias, para prepararnos y ayudar a las personas", manifestó.

Gonzalo dio detalles del reencuentro con María, luego de haberla salvado. "Fue una alegría tremenda poder abrazarla, poder verla. Uno muchas veces no llega a tener la recompensa del deber cumplido, en este caso fue una satisfacción muy grande. Pasé por toda la etapa: el rescate, la extracción y verla ahora súper lúcida, en recuperación... Es una satisfacción grande, recompensa todo el trabajo, el tiempo que le robamos a nuestras familias y es una motivación para seguir creciendo como bombero", sentenció.