Un histórico frigorífico cerró sus puertas y dejó a más de 200 trabajadores sin su fuente de ingresos producto de la fuerte crisis económica que atraviesa el país por culpa del gobierno de Javier Milei y sus medidas económicas.
Empresarios y gremios advierten sobre el impacto social y económico de esta situación, ya que afecta no sólo a quienes trabajaban en el lugar sino que a muchos otros sectores que dependían del frigorífico.
En las últimas horas se conoció el cierre del frigorífico Sur Trade, de Mar del Plata, dejando al sector pesquero de la zona en un momento crítico. Más de 140 trabajadores fueron despedidos pero la cifra llega a 200 contando las plantas satélites.
La empresa decidió cesar sus actividades argumentando la falta de rentabilidad y comenzó a negociar las indemnizaciones con los obreros de cooperativas tercerizadas. "En las condiciones en que está el sector, que cierre y pague las indemnizaciones es un lujo", expresó uno de los industriales de la región al medio Infogremiales.
En esa línea, otro de los empresarios del sector sostuvo: "Lo que se viene es muy complejo y estamos absolutamente solos. Al gobierno no le interesa la suerte de esta industria ni de ninguna otra".
Además, desde la Cámara de Frigoríficos Exportadores de la Pesca advirtieron: "Estamos llegando a un punto de no retorno y no por nuestra impericia". No solo los trabajadores de la planta se vieron perjudicados por este hecho, sino también las cooperativas que dependían de su producción, como Cabo Corrientes, Rosamar, Costa Galana y Cruz del Sur.
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Una histórica marca de autos se va del país tras 74 años en medio de la crisis
Una histórica marca de autos confirmó el cierre de una fábrica en Argentina, en medio de la crisis económica que se está viviendo en el gobierno de Javier Milei. La noticia provocó sorpresa en la industria automotriz, ya que se trata de una emblemática empresa.
En una operación que marca un antes y un después en la industria automotriz argentina, Mercedes-Benz vendió su histórica planta de Virrey del Pino al Grupo ST, un holding que abarca bancos, aseguradoras y otros negocios. La transacción incluye la continuidad de la producción de las camionetas Sprinter y la incorporación de todo el personal hasta el 2029.
El CEO del Grupo ST, Pablo Peralta, junto a otros inversores, concretaron la adquisición tras varios meses de negociaciones en las que también participó Mirgor, empresa enfocada en los sectores automotriz, tecnología, retail y agroindustria. Los trabajadores de la planta ya fueron informados de que firmarán un nuevo contrato el 25 de febrero.
A partir de esa fecha, los nuevos propietarios deberán buscar producir vehículos que no estén vinculados con la marca Mercedes-Benz. Aunque aún no hay información oficial al respecto, se comenta que la transición podría extenderse hasta mayo. La planta de Virrey del Pino, ubicada en el partido de La Matanza, provincia de Buenos Aires, inició sus operaciones en 1951 y fue una de las instalaciones más importantes de Mercedes-Benz en América Latina, produciendo una variedad de vehículos esenciales para los mercados local e internacional.