Cansados por la situación actual, trabajadores de una de las granjas más importantes del país salieron a la calle para reclamar en contra de los despidos y por el atraso en los sueldos. La crisis económica generada por Javier Milei hizo que esta situación se vuelva casi cotidiana.
Son 400 los trabajos que corren riesgo y día a día crece la preocupación por el futuro en la empresa. Se sumaron al reclamo diversos actores sociales y sindicales que cuestionaron las medidas del presidente.
Este fin de semana los empleados de Granja Tres Arroyos se movilizaron de manera masiva en el centro de Concepción del Uruguay, provincia de Entre Ríos, para reclamar por la falta de pago de sueldos y los despidos en la empresa.
La compañía ya despidió a 70 operarios y viene teniendo atrasos en los pagos a sus empleados. Además, los trabajadores vienen teniendo un conflicto con la compañía que busca reducir su plantel actual de faena de 800 a 400 empleados.
Fueron parte de la movilización tras agrupaciones en apoyo a los trabajadores cómo el Sindicato de la Alimentación (STIA), la Confederación General del Trabajo (CGT) e incluso el colectivo LGBTQ+ que aprovecharon la movilización para cuestionar decisiones políticas del gobierno nacional de Javier Milei.
Trabajadores de una importante multinacional denuncian despidos arbitrarios
Una importante multinacional despidió a un grupo de trabajadores que aseguran que fueron de manera arbitraria. Los telegramas llegaron mientras los empleados estaban de vacaciones. Se trata de la firma japonesa Pilkington, ubicada en la localidad de Munro y que se dedica a la fabricación de vidrios. Allí, un grupo de trabajadores se presentaron en la puerta de la planta de la avenida Ader, para reclamar la reincorporación de un delegado despedido y otro operario. También señalan otras desvinculaciones.
Además, denunciaron que la empresa envió nuevos telegramas de despidos sin causa alguna, de forma arbitraria, mientras los empleados se encontraban de vacaciones. Los despedidos son el delegado Jorge Alberto González y Rubén Farías, testigo en la causa de despido y ya había sido desvinculado en el año 2011 y reincorporado por sentencia judicial en el año 2018.
"Lejos de cumplir la sentencia, la empresa renueva su apuesta y me despidió a mí. Ya me había despedido por discriminación. Quieren multiplicar sus ganancias en base a despedirnos a nosotros que nos venimos organizando y tomar trabajadores tercerizados para someterlos a sus atropellos. Acá los ritmos de producción no se aguantan: un vidrio se templa a más de 600 grados y hoy Pilkington impone turnos de 12 horas en ese sector. Vamos a enfrentar y a pedir que se respeten los puestos de trabajo y el fallo judicial", expresó Farías al portal QuepasaWeb.
MÁS INFO
En cuanto a los despedidos, agregó: "No se conoce el número total de despedidos porque la empresa envió los telegramas mientras los trabajadores se encontraban gozando de sus vacaciones, pero se dan sin causa alguna". También remarcó que "el grupo japonés NSG, al cual pertenece Pilkington y es el fabricante de vidrio más grande a nivel mundial, publicó en su página web que planean multiplicar sus ganancias de acá a 2027 en base a la precarización de sus trabajadores".
Desde el sector de los trabajadores resaltaron que el acto en la puerta de la planta fue convocado para pedir el cumplimiento de la sentencia dictada por la Sala IX Cámara de Nacional de Apelaciones del Trabajo en el expediente N°25994 que ordena la reinstalación a su puesto laboral de González.
Cerrar sesión