La industria metalúrgica vive un durísimo momento por las políticas económicas del gobierno de Javier Milei. La apertura de importaciones, la caída del consumo y la paralización de la obra pública son los principales motivos del declive de este sector. En este contexto de crisis económica una importante metalúrgica despidió trabajadores.
La seccional local de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) se hizo presente en la fábrica y se llevaron adelante distintas medidas de fuerza con cese de actividades para reclamar por esta situación y pedir la reincorporación de los compañeros.
Se trata de la empresa King Agro, ubicada en el parque industrial de Campana, que comunicó la desvinculación de cinco trabajadores forma unilateral y sin ningún tipo de justificación.
"Acompañamos este reclamo decidido en asamblea y votado unánimemente con medidas de fuerza y paro de actividades", expresaron desde la UOM y agregaron: "Realizamos una asamblea con los trabajadores y definimos el cese de actividades y la presentación de una denuncia formal ante el Ministerio de Trabajo".
"En tiempos donde el ajuste por estas empresas, apoyado por las medidas del Gobierno actual, destruye la Industria Nacional, no podemos permitir que se lleve por delante a los trabajadores, sus familias y el plato de comida", sumaron desde el gremio en referencia al contexto nacional y las políticas de Javier Milei.
Histórica marca de papas fritas quebró tras 70 años en el medio de la crisis económica de Milei
Decenas de familias quedaron en la calle luego de que quebrara una histórica fábrica de papa fritas que funcionaba hace más de 70 años. Es otra de las tantas víctimas que se cobró la crisis económica generada por el gobierno de Javier Milei, que en poco más de un año cerró más de 12 mil empresas.
Tras varios meses de pelea por parte de sus empleados, finalmente la Justicia decretó el quiebre de la compañía que era un emblema del lugar, pero que no pudo superar la caída de las ventas en el marco de la crisis de consumo que atraviesa el país.
Se trata de la fábrica de Gonzalo, una de las empresas más reconocidas de Mendoza, que se encargaba de la producción de papas fritas y otros snack y elementos de copetín y que era una de las marcas más conocidas en la provincia y la región. Allí trabajaban 27 empleados, la mayoría con más de 20 años de antigüedad. La comunicación sobre la quiebra del lugar llegó a los trabajadores a través de un audio de WhatsApp por parte del dueño de la empresa a comienzos de diciembre.
De estos empleados, 15 se dedicaban a la producción y mantenimiento, cinco hacían el reparto, tres se ocupaban de tareas administrativas y la atención al público, más otros dos que trabajaban en Neuquén haciendo toda la distribución del Sur y otro en Tunuyán encargado del reparto en la zona del Valle de Uco.
Se estima que la compañía debe 75 millones de pesos solamente con ARCA, que sumada a otras obligaciones, lleva al endeudamiento a una cifra superior a los $100 millones. Los bienes de la empresa, incluyendo maquinarias y propiedades, serán utilizados para cubrir las deudas pendientes. Ahora comenzará para los trabajadores un largo proceso para poder cobrar las liquidaciones correspondientes y se estima que los empleados tendrán el pago correspondiente recién el próximo año.