Durante la madrugada de este jueves se llevó a cabo la detención de dos choferes de la Línea 620. Se los acusa de ser los presuntos agresores del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, durante la protesta por el asesinato de uno de sus compañeros en el municipio de La Matanza. "Bajen las armas... Despacito, no soy un malandra, chofer de colectivo soy", pidió uno de ellos cuando era arrestado en su casa en un importante operativo de seguridad.
Tras la orden de la Justicia porteña, a cargo de la jueza Luisa María Escrich -titular del Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas Nº 20- y el posterior procedimiento de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires en conjunto con la DDI de Morón de la bonaerense, fueron detenidos Jorge Oscar Galiano y Jorge Ezequiel Zerda bajo los cargos de atentado contra la autoridad agravado, delito que prevé una pena de entre seis meses a dos años de prisión.
"¡Quédese quieto ahí y levante las manos!", gritaron los efectivos de policía al irrumpir en plena noche al domicilio de uno de ellos. "Despacito, que no soy un malandra, soy chofer de colectivo", le respondió con tranquilidad uno de los detenidos, ya arrodillado en el piso.
Las dos detenciones se llevaron a cabo en las localidades bonaerenses de Merlo y Gregorio de Laferrere; mientras que, al mismo tiempo, se realizaron allanamientos en las empresas de transporte Almafuerte y Nueva Ideal ,donde se efectuó el secuestro del legajo personal de Cristaldo Humberto Elisero -señalado como otro de los agresores- y la documentación de otras 555 personas.
En la causa, caratulada como "NN s/ atentado contra la autoridad agravado por poner las manos en la autoridad" (figura tipificada en el artículo 238 inciso 4 del Código Penal), interviene el fiscal Carlos Fel Rolero Santurian, de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº 31 de CABA. Por su parte, los acusados fueron trasladados a la sede de la Fiscalía ubicada en Av. Paseo Colón 1333 piso 7 del distrito porteño.
Las agresiones contra Berni, ocurridas el lunes al mediodía durante la protesta, en el cruce de Juan Manuel de Rosas y General Paz, le produjeron una fractura en el malar tras recibir golpes de puño en la cabeza. Además, ocho efectivos de la policía porteña fueron atendidos con lesiones por el SAME.