La Ciudad de Buenos Aires habilitó la actividad física de 20 a 8 de la mañana y el primer día de la medida ya generó mucha polémica y rechazo. Es que los bosques de Palermo, entre otros parques en el territorio porteño, se llenaron de "runners" y se perdió la distancia social.
Después de dos meses y medio sin poder hacer ejercicio al aire libre, una multitud decidió aprovechar la iniciativa porteña y salió a las calles. No desperdiciaron ni un segundo para agarrar las zapatillas o los patines e ir a practicar deportes.
Según confirmó el Gobierno porteño, no hace falta utilizar barbijo durante el ejercicio pero sí es necesario mantener la distancia social y la higiene personal para evitar contagios.
La distancia social es, justamente, lo que generó mucho rechazo porque las imágenes demuestran que los bosques de Palermo se llenaron de gente y la pregunta unánime fue "¿todos viven a cinco cuadras?". Es que no pueden salir a correr donde quieren, deben hacerlo en plazas o parques de cercanía.
La molestia se reflejó en las redes sociales que se lamentaron por posible un futuro estancamiento de la Ciudad en la fase de aislamiento, sin evolucionar al distanciamiento social producto del descuido de la gente.