El despegue en los números de contagios y los picos registrados en la letalidad por coronavirus obligaron a la provincia de San Juan a adherirse a rajatabla a lo dispuesto por el gobierno de Alberto Fernández.
Por eso, a pocos minutos de emitirse el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) sobre el confinamiento por 9 días en las zonas de alerta y alto riesgo epidemiológico, San Juan informó su inmediata adherencia, emitiendo una norma provincial con el fin de salvaguardar la salud de la población. “Apelando a la responsabilidad social y la colaboración de los sanjuaninos, las medidas dispuestas por el Ejecutivo provincial entrarán en vigencia a partir de las 00 horas del sábado 22 de mayo de 2021 y se extenderán hasta el domingo 30 de mayo”, manifestó el comunicado.
No pasó mucho tiempo para que comenzaran a articularse reuniones entre el gobernador Sergio Uñac y sus ministros, para determinar acciones que articulen el correcto cumplimiento de estas normas. La restricción de circulación se extendió desde las 18 a las 6 de la mañana, con la excepción de los esenciales. Sólo los comercios de primera necesidad pudieron abrir sus puertas, como las ferreterías, las farmacias, supermercados y negocios de barrios, con un tope en la atención que no podía superar a hora 18.
El nivel de acatamiento de esa norma fue muy alto, según informaron las autoridades provinciales, superando el 90% de la población. Es cierto que hubo centenares de infracciones a transeúntes (más de 400) que no pudieron justificar su traslado fuera de la hora establecida y que no cerraron sus negocios a tiempo, pero fueron excepcionales en los primeros días. “Hubo un altísimo acatamiento en la población. La circulación se redujo en más del 90%”, señaló el secretario de Seguridad de San Juan, Carlos Munisaga, a El Destape.
El primer día de confinamiento, los más reacios a cerrar sus puertas fueron los supermercados, quienes no permitieron la salida de los edificios a los empleados ya que pretendían que cumplieran con su horario establecido, aunque los locales bajaron la persiana. Lo que ocurre es que desde el Sindicato Empleados de Comercios realizaron controles propios en apoyo al gobierno, para garantizar que los locales estuvieran absolutamente cerrados en el horario establecido, y descubrieron que en supermercados, los empresarios pretendían que sus empleados se quedaran trabajando hasta las 23. En estos casos también hubo sanciones.
Hubo más de 1.000 policías abocados a los operativos en las calles, con la finalidad de concientizar a la población de que deben permanecer en sus domicilios. Asimismo, se registraron 1.288 llamadas al 911 denunciando la presunta violación del confinamiento de los vecinos. Por estas llamadas, 48 personas resultaron detenidas.
El comportamiento de la población sanjuanina fue conforme a lo esperado por las autoridades, entendiendo que son los números los que marcan la necesidad de cuidarse. El promedio de casos diarios alcanzó altos números en esta última semana, superando los 600 casos por día. También, las estadísticas que marcan la letalidad en la población reflejaron una suba, lamentando hasta 15 víctimas en un día. A esto se le suma la visibilidad de que la mayor cantidad de casos está en jóvenes de entre 20 y 29 años; seguido por la franja etaria de los 30 a 39 años.
Por su parte, se ha registrado un alto porcentaje de internaciones en jóvenes, al igual que un elevado número de víctimas fatales entre personas de 40 a 50 años. Por estas razones, desde Epidemiología esta semana pasada aseguraron que las nuevas variantes encontradas en San Juan tenían mucho que ver con la situación actual y que ya no se pone foco en la población adulta, únicamente, ya que son los jóvenes los principales agentes del virus SarsCov-2. “Este virus mata en 48 horas”, remarcó la jefa de Epidemiología, Mónica Jofré, como así también remarcó las consecuencias dramáticas que hay con respecto a la saturación del sistema sanitario. Actualmente, San Juan tiene cubierta más de 85% de la ocupación de camas críticas y hay preocupación.