Existen algunos quesos que ayudan a mejorar la memoria, prevenir el Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas, además de fortalecer los huesos. No todos los quesos aportan el mismo nivel de proteínas, grasas y otros nutrientes esenciales, y por esta razón, es fundamental conocer cuáles son los que tienen mayores beneficios para el organismo que otros, de acuerdo con las recomendaciones de los expertos.
El queso es un tipo de lácteo que se obtiene por la maduración de la cuajada de leche, luego de eliminar el suero. Además, es rico el vitaminas como el calcio, que ayuda a mantener los huesos fuertes. Este alimento puede ser muy nutritivo, pero no todos los quesos son iguales. Algunos quesos son más ultra procesados que otros y contienen más grasas y menos nutrientes que el cerebro necesita para funcionar bien.
El neurólogo y neurocirujano Mill Etienne explicó en una entrevista con el medio Aol que se deben elegir quesos bajos en grasas saturadas, ya que con el correr de los años, estas aumentan el riesgo de sufrir demencia. De acuerdo con el experto, para mejorar la salud del cerebro se necesitan quesos bajos en lactosa, como el suizo, el parmesano, el cheddar y el queso feta elaborado con leche de cabra o de oveja.
Según el médico, los quesos saborizados y procesados son los más dañinos. "Los quesos procesados, los quesos envueltos individualmente y los quesos para untar pueden contener la enzima diacetilo. Esta enzima se utiliza para dar sabor y puede provocar deterioro de la memoria, así como enfermedades cerebrovasculares", precisó. Además, agregó que es importante prestarle atención al cuerpo, ya que si la lactosa te cae mal, esto repercutirá en tu cerebro.
El queso cheddar es ideal, ya que además de ser bajo en lactosa, es bajo en grasas saturadas y rico en dos aminoácidos esenciales, el triptófano y la tirosina. El primero es un precursor de la serotonina, un neurotransmisor clave en la regulación del estado de ánimo, mientras que la tirosina promueve la producción de dopamina, que está asociada con la sensación de placer.
Cuál es el detalle que hay que ver antes de comprar un queso
Además de la fecha de vencimiento, existe un detalle que hay que tener en cuenta cada vez que se compra un queso. Es sabido que los lácteos son un tipo de alimento muy delicado, ya que si pierden la cadena de frío, pueden causar intoxicaciones alimentarias muy severas. Por esta razón, los expertos en bromatología aconsejan prestarle atención a una cosa en particular.
La fecha de vencimiento es lo primero que debe verse, además de la lista de ingredientes, a la hora de ir al mercado a comprar cualquier producto. Sin embargo, con los quesos, leches y demás lácteos se debe prestar especial atención a un detalle en concreto. Este consejo en particular está orientado a los quesos cremosos, también llamados quesos frescos, pero aplica a todos los quesos.
Para chequear que el queso que compres no esté en mal estado, hay que fijarse en su textura. La nutricionista Isabela Ramos compartió en sus redes sociales que al comprar un queso, hay que fijarse si el envase está hinchado, ya que esto significa que adentro hay una bacteria liberando gas. “Es una señal de peligro”, señaló. Por esta razón, siempre que compres un queso, el envase tiene que estar totalmente pegado al mismo.
Otras señales de que el queso cremoso está en mal estado
-
Cambios en el olor: si huele ácido, rancio o agrio, no lo consumas, ya que probablemente tiene bacterias vivas.
-
Mucho líquido amarillento separándose: si está acuoso o contiene mucho líquido separado, probablemente esté en mal estado.
-
Sabor agrio, ácido o amargo: esta es la señal por excelencia de que está en mal estado.
-
Textura granulosa, seca o extraña: si notás una textura fuera de lo común, no lo consumas, ya que probablemente esté en mal estado.