El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó cómo sigue el clima para este fin de semana del 3 y 4 de febrero. La ola de calor que azotó al país en la última semana se mantendrá durante estos próximos días, con temperaturas que pueden llegar a los 32 grados. Hay alerta roja por calor extremo y amarilla por vientos fuertes.
Este sábado se presenta en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores con cielo parcial a mayormente nublado, con vientos del sector norte rotando al sureste por la noche, una temperatura mínima de 26 grados y una máxima de 36, mientras que sigue el alerta roja por altas temperaturas en el área metropolitana y se agrega una alerta amarilla por vientos fuertes, informó el SMN.
Según se anticipa, por la noche podría haber ráfagas de entre 60 y 69 kilómetros por hora y vientos entre 32 y 41 kilómetros por hora.
A la vez, para mañana domingo también se prevén ráfagas de viento que oscilarán entre los 42 y los 59 kilómetros por hora durante la jornada que presentará cielo parcialmente nublado y una temperatura que se ubicará entre los 22 grados de mínima y 31 de máxima.
En tanto, para el lunes el cielo estará parcial a mayormente nublado mientras que se anticipa una temperatura mínima que se situará en 23 grados y una máxima de 35.
Cuándo llega la lluvia tras la ola de calor
La ola de calor que azota Argentina se mantiene firme en su intensidad, con temperaturas que superan los 35 °C en gran parte del país, desde la Patagonia hasta el norte del territorio nacional. Este fenómeno climático ha llevado a que el Servicio Meteorológico Nacional aumente el nivel de alerta por temperaturas extremas en varias regiones. Sin embargo, si bien el alivio parece estar en el horizonte, no figura de manera inmediata.
Estas condiciones indican que la ola de calor persistirá por los próximos días, sin señales de lluvia significativas que puedan marcar un punto de inflexión hacia un alivio temporal o definitivo de las altas temperaturas que se han registrado. La chance de que haya un leve descenso de la temperatura durante el domingo sigue existiendo, aunque con temperaturas elevadas.
La esperanza de un descenso notable en las temperaturas, junto con precipitaciones, se proyecta más allá del fin de semana, apuntando a un cambio más regional y posiblemente hacia mediados de la siguiente semana.