Tras cerrarse este martes la ronda de testigos, este jueves se espera la audiencia de los alegatos finales en el juicio de la mal llamada "causa de la manada de Chubut”. Este es el mote que se le adjudicó al grupo conformado por Ezequiel Quintana, Leandro Del Villar y Luciano Mallemaci, los "hijos del poder" imputados por la violación grupal cometida en septiembre del 2012 en Playa Unión, en Rawson. A casi 10 años del hecho, se espera que la Justicia esté a la altura.
El tribunal oral compuesto por las juezas Ana Karina Breckle, Marcela Alejandra Pérez y María Laura Martini recibió en los últimos días testimonios en el marco del juicio oral en el que están imputados los jóvenes, acusados por la violación grupal.
Se espera que la sentencia contra los violadores sea dictada de forma inmediata -según el Código Procesal de Chubut- dado que, al presente, ninguno de los imputados fue detenido por el delito. Por su parte, la fiscalía solicita una condena de 10 años por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante por la participación de más de dos personas. Mientras tanto, la querella continúa impedida de hacer declaraciones públicas a pedido de la defensa.
Esta es una deuda que la Justicia de Chubut tiene con la víctima. Su sesgo machista sigue bajo cuestionamiento no sólo por el amparo por género y posición social de los victimarios sino también por el silenciamiento y la revictimización de quienes padecieron la violencia en carne propia.
El caso
Una adolescente estaba festejando la semana de la primavera, en septiembre de 2012, junto a siete amigas en una fiesta que tenía lugar en una casa de Playa Unión. Al poco tiempo de su llegada al lugar, la joven perdió la conciencia. Más tarde, fue encontrada por una de sus amigas tras ser brutalmente violada en grupo por “la manada": Ezequiel Quintana, Leandro Del Villar, Luciano Mallemaci y Robertino Viglione cometieron el acto, mientras que Joaquín Pérez miraba y Tomás Soriano sostenía la puerta para que nadie se enterara de lo que estaba pasando en la habitación.
Es menester recordar que el caso trascendió nacionalmente cuando el fiscal de la causa, Fernando Rivarola, señaló que los imputados violaron a la joven como forma de “desahogo sexual” con el único objetivo de moderar las penas de los llamados “hijos del poder” que pertenecen a familias poderosas de Chubut vinculadas a la política y a los negocios inmobiliarios y de la construcción.
MÁS INFO
La Asociación de Abogados de Buenos Aires reconoce el trabajo de las abogadas querellantes
"Un día la víctima estuvo lista y encontró abogadas con formación y trayectoria penal con perspectiva de género que supieron interpretar su voluntad y contenerla como para ser un soporte de la misma, y avanzar en el juicio contra los violadores que por estos días se está desarrollando", enuncia la misiva de reconocimiento de la Asociación de Abogados de Buenos Aires (AABA) a las abogadas que "le están poniendo mente y cuerpo a este juicio en el que también la estrategia de la defensa ha sido intentar amedrentar y desprestigiar por la prensa a las letradas querellantes", dado que, una vez más, las letradas están impedidas de dar declaraciones públicas en torno al desenvolvimiento del caso que en estos días llegaría a su fin.
"Tenemos el convencimiento de que, ahora sí, la justicia tiene una posibilidad única e irrepetible de hacer valer con toda su fuerza la voz de la víctima, para intentar mitigar, aunque sea mínimamente, el terrible e inconmensurable sufrimiento que le generaron aquellos a quienes hoy se enfrenta", agregaron.