La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) detuvo a un hombre por una falsa amenaza de bomba en un avión en el Aeropuerto Internacional Ingeniero Ambrosio Taravella de Córdoba. El pasajero se encontraba en un vuelo que tenía como destino Lima, Perú, que debió ser cancelado.
Los efectivos activaron el protocolo antiexplosivos en el Aeropuerto provincial al ser notificados por la empresa Latam de la posible existencia de un explosivo en el vuelo N° 2365 con destino a Lima, Perú, que estaba a punto de partir a la hora 8:05 con 90 pasajeros a bordo.
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“Dos de pasajeros habían advertido a personal de la tripulación al ver una actitud sospechosa de otro tripulante, a quien escucharon manifestarse sobre la probable explosión de una bomba en la aeronave. Por tal motivo se dio aviso al juzgado de turno e intervino el Grupo Especial de Control de Explosivos y Armas Especiales (GEDEX) de la PSA y bomberos”, detallaron desde la fuerza policial.
Tras hacer descender a los pasajeros y descargar la bodega, los oficiales revisaron la aeronave e inspeccionaron nuevamente a las personas y el equipaje. Como resultado el procedimiento dio negativo. Finalmente la PSA detuvo al hombre por infracción a los artículos 194 y 211 del Código Penal de la Nación, quien quedó incomunicado y a disposición del Juzgado Federal N° 3 de Córdoba, a cargo de Miguel Hugo Vaca Narvaja.
Detuvieron a una azafata por la falsa amenaza de bomba en Aerolíneas Argentinas
En mayo de este año, detuvieron a una azafata de Aerolíneas Argentinas acusada de ser la autora de una amenaza de bomba en un vuelo de la compañía con destino a Miami. Por el llamado falso, el despegue se demoró más de nueve horas. .
Todo comenzó el pasado domingo 21 de mayo cuando el vuelo AR1304 de Aerolíneas debió ser evacuado en su totalidad cuando estaba por partir rumbo a la ciudad estadounidense de Miami, con 270 pasajeros y 12 tripulantes a las 07.35, al recibir, tanto el comandante del vuelo como personal de tierra, una amenaza asociada al vuelo.
Después de un operativo que demoró la salida del vuelo y generó complicaciones a los pasajeros que viajaban en la aeronave, finalmente, se corroboró que se trataba de una falsa amenaza. El avión despegó a las 16.50, más de nueve horas después de lo previsto.
De acuerdo con fuentes vinculadas con la investigación, la amenaza consistió en un audio que decía: "Decile al capitancito que le pusimos tres bombas en el Miami. Que se deje de joder con la política y chequee el avión porque van a volar en mil pedazos". La voz fue distorsionada, pero los investigadores pudieron establecer, primero que se trataba de una mujer y, luego, determinar el origen de la misma, lo que llevó a la detención de la azafata.
La mujer fue apresada al arribar al país en su último vuelo y está acusada de ser la autora del llamado que recibieron tanto el comandante a bordo en su teléfono personal, como otros integrantes de la empresa, y que pusieron en alerta a la seguridad del aeropuerto. En ese marco, consignaron que los delitos de los que se la acusa son de "intimidación pública y entorpecimiento de los servicios públicos (art. 211 y 194 del Código Penal, respectivamente)" que son faltas graves, por ende, de comprobarse la acusación y el delito, "la empresa sancionará a la persona investigada de forma proporcional a la gravedad del hecho". Aerolíneas Argentinas sufrió una pérdida superior al millón de dólares, entre el operativo de evacuación de los pasajeros y lo que implicó la reprogramación de la partida hacia Miami y las demoras ocasionadas.
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