Una nena salteña menor de 13 años quedó embarazada por los reiterados abusos a los que la sometía su padre. En los últimos días, la niña llegó junto a su madre a parir en el Hospital General Mosconi, desde donde radicaron una denuncia contra el padre cuando constataron que los dolores abdominales que estaba sufriendo la paciente respondían a un trabajo de parto.
"Ingresó por la guardia una menor de 12 años acompañada por la madre y se presentó con dolores de panza y al revisarla el médico constató que estaba en trabajo de parto. La madre y la niña lo negaron, no sabían que estaba embarazada", precisó al respecto la gerenta del hospital, Carolina Serrano, en diálogo a Cadena 3.
La fiscal Penal de Violencia Familiar y de Género de Tartagal, María Lorena Martínez, tomó intervención una vez radicada la denuncia e imputó a un hombre por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo en perjuicio de su hija. Además, la fiscal solicitó la inmediata detención del hombre y la toma de muestras de ADN de la bebé para la realización de análisis genéticos. La niña es contenida y asistida por distintos profesionales del ámbito de la Salud y la Justicia.
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“Esta es una situación que se repite. Es una muestra de lo que pasa en el Norte, con un Estado ausente porque nadie se dio cuenta de que esta niña faltaba a la escuela ni se hicieron los sumarios administrativos correspondientes”, le dijo a El Destape Sofía Fernández, integrante de la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y gratuito- articulación nacional regional Salta.
Fernández, quien también integra el colectivo de Fuerzas de las Mujeres de Salta y acompaña constantemente a víctimas de violencia machista en la provincia, advirtió que este accionar del Estado ante estos casos es moneda corriente. “Es tremenda la falta de cuidado a las infancias vulnerables”, sumó.
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Además, apuntó contra el “disciplinamiento de las personas que denuncian este tipo de casos de violencia”. En ese sentido, mencionó el caso de Miranda Ruiz, la médica sobre la que pesa una causa penal por haber realizado un aborto legal en el Hospital de Tartagal. “Miranda es un ejemplo, pero también hay docentes que sufren persecuciones y en el medio estas personas que están vulneradas por el sistema están siendo doblemente victimizadas”, remarcó.
Según pudo saber este medio, la niña volvió a su casa una vez que dio a luz y luego de que su padre fuera detenido por los abusos que cometía, a pesar de que se cree que la madre encubrió toda la situación de violencia que sufría la nena.