Como todos los años, el 8M llega una nueva jornada de revisionismo dentro del movimiento feminista, encabezado por las consignas que marcarán las agrupaciones referentes. Hace 8 años que el movimiento se convirtió en una parte inevitable de la agenda social y, con la masividad adquirida a lo largo de los años, supo pisar cada vez más firme por un camino que, si bien naturalmente desplegó ramificaciones, coincidió en su Norte.
Dos años de pandemia implicó privarse de salir a la calle, con todo lo que eso conlleva. Militar las consignas comenzó obligatoriamente a ser una tarea de introspección, de llevar a cabo en lo privado, de repensar y establecer prioridades, en concordancia con el contexto. Lo personal se volvió más político que nunca y consignas como la distribución de las tareas de cuidado, la brecha económica y la violencia doméstica tomaron mayor protagonismo.
El Destape convocó a referentes de distintas generaciones a reflexionar sobre el futuro de estas luchas, los reclamos que embanderan y los pasos a seguir para asegurar la participación plena y efectiva de las mujeres y la igualdad de las oportunidades de liderazgo a todos los niveles decisorios de la vida política, económica, social y pública.
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
Lucía Cámpora, abogada y militante
La diputada de la Ciudad de Buenos Aires del Frente de Todos remarcó la importancia de incluir entre las banderas "la lucha contra la violencia política, como así también la agenda por una distribución más equitativa de las tareas de cuidado y una reforma feminista del Poder Judicial". Sobre esta última, admitió que "es capaz el reclamo que más cuesta bajar en concreto", aunque resaltó que "sin dudas nos interpela". En esa lista incluyó también a la agenda de los colectivos LGBT+.
Lucía Cámpora, abogada y militante feminista, pidió que se ponga también el acento sobre "la descalificación de referentas por su condición de mujer" y en este punto se refirió al atentado que sufrió la vicepresidenta Cristina Kirchner en septiembre. "Hay que llamarlo por su nombre, tiene raíces vinculadas a la violencia política contra las mujeres", enfatizó.
Nelly Minyersky, histórica feminista, una de las fundadoras de la Campaña Nacional de Derecho al Aborto
“Yo creo que hemos aprendido mucho. Tenemos una cantidad de avances que muchas veces se oscurecen porque en nuestra sociedad son tan amplias las problemáticas que nos aquejan a las mujeres, los hombres y a cualquier sea la identidad de una persona que no alcanzamos a percibir cuánto hemos avanzado desde el 2015.
Pensemos que hemos logrado un objetivo que muchos países no tienen. Sí, tenemos mucho todavía por cambiar, pero a veces nos olvidamos que estamos luchando contra cientos de años en los cuales no fuimos reconocidas como seres humanos, como los hombres.
Yo creo que si vemos el cambio que se está dando, que no es suficiente, pero esto es algo que florece todos los días, con literatura por mujeres, literatura que trata el feminismo. Esto antes no existía, lo estamos trabajando todos los días y nos empoderamos en la calle.
Pintamos frente a una realidad muy dura: frente a esta realidad económica y un contexto político difícil, con guerra en otros países. Son situaciones que creímos que ya no existían.
Así y todo, hemos ganado. Nuestra Ley de Aborto creo que es la mejor que existe en el mundo. Porque no refiere únicamente al aborto, también habla de capacitación, de respeto, de dignidad y del consentimiento de las mujeres. Con todas las dificultades que todavía tenemos, pensemos que en otros países tampoco se logró del día a la noche.
Lo que tenemos que hacer cada 8 de marzo es alegrarnos por todo lo que hemos conquistado y seguir luchando por todo aquello que no, seguir conquistado, llegar a otros sectores de la sociedad, a estas mujeres que todavía no conocen sus derechos ni posibilidades.”
Paula Arraigada, activista por los derechos de las personas trans y primera mujer trans en ser candidata a diputada de la Nación por el Frente de Todos
-¿Qué aprendieron los feminismos desde 2015 hacia acá?
-Hubo una ruptura en un feminismo que se planteaba desde lo hegemónico, desde el pensamiento blanco, burgués y académico . Ese proceso culmina en el 2018 y aparece el feminismo popular, mostrando voces que hasta ese momento no aparecían como protagonistas del tema.
Después de 2019, este feminismo popular empezó a opacarse otra vez, reapareciendo el feminismo hegemónico blanco, que desde su visión académica intenta comprender qué es lo que le pasa al resto de las mujeres y decir qué es lo que pensamos.
-¿Considerás que esto se refleja en la adhesión al movimiento en la actualidad?
-Sí, en las últimas marchas cada vez se ven menos compañeras. Tiene que ver con haberles quitado esos símbolos que son importantes para la concreción de un acto místico como es la marcha del 8M.
Nos quita el entusiamo y el deseo de ilusionarnos por un futuro mucho mejor para las mujeres y las humanidades.
A pesar de esta decadencia que vivimos, al final vamos a retomar nuevamente la senda porque al fin y cabo la historia, la historia siempre es de los pueblos.
Hoy ser feminista es como tener un pin más. Antes ser feminista era una bandera de lucha. Hoy la lucha no se sabe a dónde va.
-¿Cuál es la bandera o la consigna que tiene mayor aceptación entre los feminismos en este momento?¿Cuál es la próxima lucha después del aborto legal?
-Entendemos que el 8M va a estar dividido en dos "franjas" a lo largo del día. Primero va a ser la marcha, como todos los años, hablando de la mujer trabajadora y sus necesidades. Luego, se tocará el tema de la proscripción de Cristina Fernández. Y con esto hablamos no solamente del derecho a elegir sobre nuestros cuerpos, sino también el derecho a elegir desde lo personal y desde lo político.
Como principal consigna de las mujeres trabajadoras estará el derecho a trabajar. Todavía no hay un libre acceso al trabajo y en eso las feminidades trans travestis nos igualamos a las cisgénero porque nosotras no tenemos acceso al trabajo. Tampoco acceden las compañeras de los barrios porque son marrones, porque son pobres, porque viven en la villa, porque son gordas, porque son ciegas, porque son sordas, por que no tienen el canon de belleza o por edadismo.
-Tras la pandemia, ¿sentís que la calle sigue siendo el espacio donde representar las luchas?
-Tomar contacto es otra cosa. En las discusiones presenciales no hay miedo. La calle se usa para eso y el lugar para construir la lucha es ese.
-¿Cuál es el espacio donde a lo largo de estos años sentís que la urgencia de igualdad de derechos es cada vez más fuerte? ¿Dónde está la brecha más grande?
-El espacio de desigualdad donde se necesita intervención más urgente es donde viven las mujeres pobres. La desigualdad en el acceso por recursos económicos me parece que también es violenta. La violencia es la misma, pero no a todas las golpea de la misma forma.
Algún día el feminismo popular va a levantar la bandera que empezó a levantar en el 2018 y van a aparecer todas estas corporalidades hermosas que empujaban alzaban su propia voz para decir “Libres y felices estábamos” y “Libres y felices queremos vivir”.
Laura Azcurra, referente de Actrices Argentinas
Laura Azcurra, una de las caras visibles del movimiento que se formó para apoyar la sanción de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo y que luego se consolidó como una colectiva luchadora por los derechos de las mujeres y del gremio, opinó que la clave en estos últimos años pasó por la organización y con poder ponerle voz a muchas cuestiones "que siempre nos hicieron ruido y que no teníamos la habilitación para poder ponerlo en palabras".
En su opinión., "el camino en materia de visibilizar las desigualdades está en ascenso", a pesar de que continúa la resistencia en algunos sectores. "No tenemos la Ley de ESI realmente aplicada y difundida en todo el país, a pesar de que se promulgó en 2006. Hay mucha desinformación en cuanto a la soberanía del cuerpo de cada une, el primer paso para prevenir situaciones de abuso", enfatizó. También reclamó la plena implementación de las capacitaciones de la Ley Micaela y sumó: "necesitamos una reforma judicial feminista".
En cuanto a las consignas de este año, destacó que también se marchará "para pedir justicia para Thelma Fardin y para todas las personas que llevan adelante un juicio por abuso sexual". En ese sentido destacó que desde la organización la abrazan a ella tras el proceso "desgastante" que atravesó porque entienden que así están abrazando también a un montón de personas que atravesaron situaciones similares.
Carolina Fernández, actriz, conductora y también integrante del colectivo Actrices Argentinas, señaló que el mayor desafío que tienen los feminismos es estar alertas para no replicar formatos patriarcales dentro de los movimientos.
A su vez, reconoció que hay un gran cansancio dentro de las colectivas. “La feminización e infantilización de la pobreza hace que las mujeres y diversidades estemos ocupadas en las tareas de cuidado, en tener que salir a laburar, y además militar, sostener y contener a las compañeras”, detalló.
Luisa Paz, militante trans histórica y una de las primeras mujeres trans en obtener el DNI con su nombre
Para Luisa, "no hay que descansar" porque se está observando "que la derecha está avanzando muchísimo", sobre todo en lo que respecta a los discursos de odio. En ese sentido, resaltó que "los feminismos deben pensar nuevas estrategias para que no se instalen". "Uno no puede parar porque del otro lado están los que nos quieren sacar esos derechos", reforzó.
En cuanto a las consignas más significativas, mencionó la necesidad de desarmar las violencias instaladas como la principal, además de la implementación de políticas concretas para las niñeces trans, ante las prácticas antidiscriminatorias y transodiantes que se perpetúan en ámbitos educativos, y las adultas mayores. "Para las compañeras de mi generación, la reparación histórica es algo muy importante, como lo contempla la Ley Integral Trans. Es importante tener en cuenta que no se puede dar a una compañera derechos a cuentagotas", agregó.