Uno de los fundadores de la organización de ultraderecha Revolución Federal Leonardo Sosa estuvo en el Congreso de la Nación durante la jornada de este miércoles, cuando comenzó la deliberación de la ley ómnibus. El joven fue denunciado por los abogados de la ex vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, por “actividades delictivas destinadas a dañar” a la ex mandataria; mientras que integrantes de la organización están involucrados en el atentado que sufrió el 1 de septiembre del año pasado. “Entramos por diputados de la Libertad Avanza”, reconoció en una entrevista televisiva.
Fuentes parlamentarias, en tanto, aseguraron a El Destape que la encargada de habilitarle el pase fue la diputada por La Libertad Avanza (LLA), Lilia Lemoine.
“En la mañana me presenté como un militante más, había sido convocado por un pequeño grupo de WhatsApp, que estaban pidiendo gente para hacer el aguante al Gobierno por el tratamiento de la ley”, contó en comunicación con ExtraTV. Según su relato, estuvo desde las 10 de la mañana junto a otras personas militantes, que estuvieron también en el recinto y en los pasillos. Según se pudo ver en las fotos que se difundieron por las redes sociales, llevaba una cinta naranja y roja de invitado que es la que permite acceder a pasillos por los que también circulan las y los diputados, según fuentes parlamentarias estas cintas las entrega sólo la Presidencia de la Cámara.
Desde la oficina de la Presidencia, en tanto, dijeron a este medio que "no tienen registro de que haya ingresado como invitado" y sugirieron una posible explicación: "Truchó el pase".
El escándalo en torno a su presencia fue cerca de las 14 horas, cuando la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, alertó sobre la presencia de Sosa y él la escuchó mientras “comía galletitas en el bar dentro del Congreso” y que se retiró por sus propios medios.
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Tras ser consultado en reiteradas ocasiones sobre cómo consiguió el ingreso al Congreso, el militante detalló que en el grupo de WhatsApp hicieron una invitación general, dijo desconocer a la persona que hizo la convocatoria, que armaban una lista y que en las puertas del Congreso se encontraron unas 25 personas. "Entramos por diputados de La Libertad Avanza", reconoció finalmente.
Antecedentes de Sosa
Sosa estuvo detenido el año pasado por orden del juez Marcelo Martínez de Giorgi, quien sostuvo que el accionar criminal de Revolución Federal debía investigarse conjuntamente con el intento de homicidio de la ex vicepresidenta. Sin embargo, la Cámara Federal no concedió la investigación unificada y liberó a los integrantes de la organización ultraderechista.
Está procesado por incitación a la violencia, por los desmanes que protagonizó afuera del departamento de la CFK el 22 de agosto de 2023, después de que los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola pidieran una condena de doce años de prisión contra la expresidenta y su inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Ese día, Sosa quiso destruir las vallas que protegían el ingreso del departamento de CFK y se trenzó a golpes con un efectivo de la Policía de la Ciudad. Morel, que también estaba en la zona, no fue identificado cometiendo actos violentos en ese momento.
Además, el 28 de agosto pasado, cuatro días antes de que Fernando Sabag Montiel intentara matarla, estuvo en el edificio donde vive la exvicepresidenta. Se sacó una foto desde el balcón con otro miembro de Revolución Federal, Gastón Guerra. Los dos se encontraban en el departamento de la vecina de CFK, Ximena de Tezanos Pinto.
Cuando allanaron la casa en la que Sosa vive con su familia, encontraron una suma que llamó la atención de los investigadores: había 50.000 dólares. Sosa se justificó diciendo que eran los ahorros de toda su vida de su padre, que tiene un taller de chapa y pintura.
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