El día que el vuelo de las armas llevó vacunas: crónica de una jornada latinoamericana

Es lunes 20 de diciembre y son las 7 de la mañana y en el aeropuerto de El Palomar una comitiva del Ministerio de Salud, Cancillería, Comisión Cascos Blancos junto con un importante grupo de periodistas se prepara para despegar del Hércules C-130 con la donación más importante e histórico de vacunas contra el Covid-19: un total de un millón de dosis de Astrazeneca -con su principal activo realizado en la Argentina- son trasladadas como parte de una política de solidaridad y reciprocidad por parte del Gobierno nacional argentino al Estado Plurinacional de Bolivia.

Es así que pasadas las 7 despegó el avión militar lleno de esperanza y vida, como lo sostuvo la ministra de Salud, Carla Vizzotti, antes de partir de la Argentina al país vecino. "Es la donación más importante que estamos haciendo desde la Argentina al mundo. Argentina ha recibido 7 millones de dosis de donación que le han permitido acelerar su campaña lo que nos permite estar en el punto de avance en el que estamos", remarcó Vizzotti en conferencia de prensa.

Se trató de una donación correspondiente a un trabajo conjunto entre el ministerio de Salud que encabeza, Carla Vizzotti, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto a cargo de Santiago Cafiero y la Comisión Cascos Blancos que preside Sabina Frederic. De esta manera es que fueron donados a Bolivia, un total de un millón de vacunas, concretándose así la mayor donación de dosis entre países de Sudamérica desde que se declaró la pandemia.

Cuando el vuelo de las armas llevó vacunas

El Hércules aterrizó alrededor del mediodía de Bolivia en el Aeropuerto de El Alto, hangar de la Fuerza Aérea Diablos Negros, donde funcionarios del Estado Plurinacional esperaban a la comitiva Argentina en un encuentro muy emotivo y significativo: es que esa misma nave hace exactamente dos años había aterrizado en el mismo lugar con armas y municiones para habrían colaborado en el Golpe de Estado contra Evo Morales que provocó muertes, heridos y una de las mayores represiones que fueron denominadas las masacres de Pedregal, Sacaba y Senkata, en las que fueron asesinados 37 personas del pueblo boliviano. Ese cargamento habría sido avalado por el Gobierno de Mauricio Macri en apoyo al gobierno de facto gestión interina de Jeanine Áñez.

Sin embargo, este lunes 20 de diciembre de 2021 la ministra Carla Vizzotti y su par, el ministro de Salud y deporte del Estado Plurinacional de Bolivia, Jeyson Auza Pinto, se fundían en un abrazo y sellaban la hermandad. "Este avión vino a dividir a nuestros pueblos pero eso quedó atrás y ahora estamos viniendo a traer esperanza, vida, a traer vacunas a la luz del día y con muchísimo orgullo. Para nosotros este vuelo tienen muchísimo significado y es muy especial desde que empezó la pandemia", expresó la ministra.

Tras la entrega protocolar de las vacunas que son parte de las políticas de solidaridad y reciprocidad para enfrentar la pandemia de forma global que lleva adelante Argentina que ya envío vacunas por más de 1,7 millones de dosis a Angola, Kenia, Mozambique, Vietnam, Barbados y a La Organización de Estados del Caribe Oriental, los funcionarios mantuvieron reuniones bilaterales para intercambiar experiencias y estudios de efectividad de las vacunas y buscar nuevas desafíos en conjunto. "Porque ningún país se salva solo", coincidieron. Las dosis donadas por la Argentina a Bolivia serán para refuerzos, confirmaron desde el Ministerio de Salud boliviano.

Tras las reuniones bilaterales, Argentina y Bolivia coordinaron una agenda común en beneficio de la población de nuestra región que irá desde la contención de la pandemia, mitigación de la pandemia, vigilancia epidemiológica y genómica. "El resultado que más se tiene que resaltar es la solidaridad que es el único camino, porque si hay un país que no está solucionado el problema de la pandemia todos estamos estancados, solo con acciones conjuntas podemos dar respuestas globales", enfatizó el ministro boliviano. 

En este marco, Vizzotti volvió a enfatizar el orgullo, emoción, alegría de poder compartir este día. "Es un histórico precedente de una América del Sur unida para tener una respuesta más soberana y de autosuficiencia", destacó.

En esta misma línea, durante otro momento de la jornada, el canciller de Bolivia, Rogelio Mayta, consideró el gesto de la Argentina como un ejemplo de que "entre hermanos compartimos lo que tenemos". "La donación tiene un sentido simbólico: en 2019 llegaba el mismo avión con municiones para consolidar el gobierno inconstitucional (en relación al gobierno de Jeanine Áñez) a través de una operación de terrorismo de Estado; en ese mismo avión, el gobierno de Alberto Fernández nos trae futuro y esperanza", subrayó.

"El mismo avión que hace dos años llegó acá con 70.000 municiones enviadas por (Mauricio) Macri. Aquel avión de hace dos años llegó con un grupo de gendarmes, pertrechos de guerra y alacranes, hoy llega con vacunas y Cascos Blancos", agregó por su parte el embajador argentino en Bolivia, Ariel Basteiro.

Desafío de Argentina y América del Sur

Respecto a los desafíos contra la pandemia, la funcionaria argentina fue consistente en los objetivos planteados de cara al otoño 2022 basándose en el aumento de casos en los países de Europa en lo que para muchos significó la tercera o cuarta ola a causa de la variante Delta o en el caso de Países Sudafricanos con la ómicron.

En este marco, Vizzotti destacó que la región de las Américas es líder de vacunación ya que la población acepta las vacunas por lo que "el objetivo es llegar a nuestro otoño con niños y niñas vacunados porque son los escolares que están transmitiendo el virus, lo que muestra lo que está pasando en el otro hemisferio por lo que estamos avanzando para controlar eso". En el caso de la Argentina ya se superó el 82% de la población argentina con una dosis y el 68% con esquema completo, contando con el stock de dosis necesario para iniciar y completar los esquemas pendientes y vacunar con dosis adicionales y de refuerzo a la totalidad de los habitantes del territorio nacional.

Lo cierto es que este desafío será regional por lo que la Argentina está avanzando con reuniones bilaterales como lo hizo esta jornada con Bolivia y continuará avanzando con otros países vecinos y hermanos para avanzar en una política regional contra el COVID-19. Tenemos saber que los gobiernos unidos somos más fuertes", cerró Vizzotti.