Desde sectores oficialistas de Argentina, recientemente, se difundió una nota que el diario británico The Guardian hizo sobre la pandemia en nuestro país, y en la que se indicó que hubo una “politización” de la pandemia, que llevó a opositores al Gobierno a obstaculizar las estrategias sanitarias, atento a las elecciones de medio término de este año y las presidenciales del 2023. El accionar descripto, en ese sentido, también se vio en Formosa.
¿Qué diría The Guardian si supiera del accionar que hubo en Formosa?, es una pregunta que podría responderse a partir de conjeturas basadas en la realidad reciente.
En Formosa se pudo ver que, a pesar de los contagios escasos, los cuestionamientos de opositores de Juntos por el Cambio (JxC) fueron parte de una “politización” que lejos de intentar perfeccionar la estrategia sanitaria se dedicaron a intentar cambiarla, como sucedió a nivel nacional, y esto provocó un aumento de contagios y muertos.
La Corte Suprema emitió fallos que obligaron a cambiar la estrategia que dio buenos resultados a la provincia.
La estrategia que adoptó Formosa fue modificada en un lapso de tres meses, en los que se acusó a la provincia de atentar contra la libertad y los derechos humanos. Estos cuestionamientos calaron en la sociedad (denuncias mediáticas de por medio), por un lado, y por otro se interpusieron presentaciones que terminaron en fallos de la Corte Suprema, que obligaron a modificar toda la estrategia.
De un ingreso planificado y por turnos que se hacían en centros gubernamentales y hoteles, por un fallo de la Corte Suprema que vino luego de denuncias mediáticas, se tuvo que cambiar a la entrada simultánea y a un aislamiento domiciliario.
Otro fallo judicial hizo que los centros gubernamentales solo puedan recibir a casos confirmados de COVID-19 y que el aislamiento de casos sospechosos sea domiciliario, lo que provoca que muchos casos positivos salgan a la calle y controlar esta metodología, al no estar centralizada, se dificulta.
El colapso sanitario está cada vez más cerca.
¿Cómo se desarmó la estrategia?
Tras los cambios que el Gobierno Provincial tuvo que hacer en la forma de ingresar a la provincia comenzó la escalada de contagios, lo que como consecuencia llevó al Gobierno a volver a Fase 1 en Formosa y Clorinda, las localidades más afectadas.
Tras ello hubo marchas y al poco tiempo, la referente de Juntos por el Cambio Patricia Bullrich junto a otros representantes partidarios se presentaron en la provincia para promover que el aislamiento sea domiciliario, apelando a la responsabilidad individual, método que para evitar muertes y contagios no sirvió, pero que finalmente se debió aplicar por los fallos judiciales mencionados.
Bullrich y referentes de Juntos por el Cambio en Formosa, violando las restricciones sanitarias.
Mientras ocurrían las marchas en marzo, de noche había jóvenes que se juntaban en pleno centro capitalino a tomar bebidas alcohólicas y romper cualquier medida sanitaria posible. “Les compraban cerveza a los jóvenes para que se ‘rebelen’ contra el ‘dictador’ y que tomen en la calle”, sostuvo el Senador por Formosa, José Mayans en referencia a lo que hizo JxC esas noches.
Además, había un llamado a la desobediencia civil que se podía ver en redes sociales constantemente, junto a un aumento en las violaciones a cuarentenas domiciliarias y fiestas clandestinas.
Pese a que Formosa ya aplicó más de 130 mil dosis de la vacuna contra el COVID-19 y que en Argentina hasta ahora se aplicaron 11 millones, los contagios no se detienen y las muertes menos. Ante este panorama, tal vez antes de preguntar qué opina The Guardian sobre la oposición, sería bueno conocer la opinión de los formoseños y el resto de los argentinos, ante las actitudes y acciones judiciales que ayudaron a sembrar el contagio.
Qué dice la nota de The Guardian
La nota habla de que la situación empeoró en el país ante una “flexibilización de las restricciones sanitarias y que la vacunación es lenta”, lo que hace que aumenten los casos; sumado a ello la situación empeora porque “hay personas que desprecian las restricciones o hasta el uso de barbijos”.
En ese aspecto, la nota ve que la oposición ataca a las restricciones con la intención de ganar rédito político y sostiene que Juntos por el Cambio pretende ganar popularidad buscando obstaculizar, desde lo político y judicial, cualquier restricción sanitaria, como se pudo ver en Formosa.
El ejemplo que el periódico dio sobre ello fue la polémica que Nación y Ciudad de Buenos Aires tuvieron, que se generó a partir del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para que se cierren las escuelas porteñas y bonaerenses y que haya clases virtuales por algunos días.
Recientemente se registraron 15 docentes de CABA fallecidos por COVID-19.
El Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, hizo una presentación ante la Corte Suprema que, falló a favor de la ciudad y ordenó clases presenciales, a pesar de que ya había docentes muertos por COVID-19, número que recientemente se elevó a 15 víctimas en CABA.
La muerte del personal docente y el hecho de que el COVID-19 está afectando a personas cada vez más jóvenes, solo en abril se contabilizaba 180 menores fallecidos, fue minimizado por Larreta y Juntos por el Cambio ante la prensa, ya que sostenían que el foco de contagio era “muy bajo”.
Vale aclarar que The Guardian solo señala la polémica que hubo, para relatar la politización de la pandemia. Lo cierto es que, pese a ser favorecido por la Corte, Larreta no tuvo mayores opciones y hace unos días ordenó el cierre de las escuelas. Al parecer, la polémica solo sirvió para que Larreta gane espacio en los medios.