Santa Fe, la provincia del gobernador Maximiliano Pullaro, se vio nuevamente asediada por hechos de violencia. Ocurrieron en Villa Gobernador Gálvez, una ciudad ubicada en las afueras de Rosario, al sur de Santa Fe. Hubo balaceras y dejaron mensajes mafiosos: “Las deudas se pagan” y “la mafia no se traiciona”. En uno de los casos, se trata de la tercera vez que atentan contra la fachada del inmueble. El otro suceso causó conmoción. Es que un club del barrio Villa Diego recibió más de 20 tiros, muy cerca de una comisaría.
En ambos ataques a tiros el denominador común parece ser el reclamo de sumas de dinero, según indicaron fuentes policiales a Rosario 3.
Uno fue el atentado contra el club Sociedad Recreativa e Instructiva (SRI) Villa Diego, de Garay al 2255, un inmueble donde también funciona un gimnasio. A la medianoche desconocidos dispararon más de 20 balazos y dejaron un papel con un mensaje: “Las deudas se pagan”. El hecho generó impacto, sobre todo por la cercanía de la Comisaría 29ª, ubicada a 50 metros del lugar.
A unas 15 cuadras, en el barrio Parque Alegre, hubo otro ataque a tiros. En esa ocasión, contra un domicilio de Chubut al 1300. Según reportó la propia víctima al mismo medio, no es la primera vez que recibe este tipo de mensaje mafioso. Ya había sufrido una situación similar el pasado 15 de octubre.
Los testigos contaron que un atacante bajó de un vehículo y gatilló contra el inmueble. Los manuscritos que acompañan los balazos son claros: “La mafia no se traiciona, pasanos el millón que debés”.
En ambos casos los destinatarios de los ataques estaban mencionados en las notas manuscritas, un dato que los investigadores tienen en cuenta para intentar dar con los autores.
Esta misma semana, un joven de 19 años fue detenido por la policía tras un hecho similar: el miércoles una gomería ubicada en la misma ciudad fue atacada a balazos. De acuerdo a las informaciones difundidas por Rosario Nuestro, el ataque fue realizado por dos hombres desde la vereda de enfrente al local. Uno de ellos se movía a pie, mientras que el otro lo hacía en bicicleta.
La policía constató 7 impactos de bala y 1 orificio, en las paredes y frente de la gomería. Además, se secuestraron ocho vainas servidas calibre 9mm y tres cartuchos intactos calibre 9mm. El detenido fue trasladado a la comisaría Subcomisaría 26ta donde se le realizó un dermotest y se le abrió una causa por abuso de arma de fuego.