El presidente Alberto Fernández aclaró que el debate sobre la Corte Suprema de Justicia no se trata sobre el número de miembros sino sobre el funcionamiento interno que termina dando poca agilidad al tratamiento de los casos y denunció que “hoy interviene con una arbitrariedad absoluta”.
“La Corte puede intervenir cuando hay cuestiones de institucionalidad, después empezó a intervenir por el Per Saltum y la verdad que hoy en día la Corte resuelve cuándo interviene con una arbitrariedad absoluta y esto es objeto de cuestionamiento de cualquiera que litigue en Argentina y de todos los tribunales del interior”, aseveró el jefe de Estado en una entrevista con Radio con Vos.
Asimismo, plateó que “¿usted sabe que la Corte más del 80% de las sentencias que dictan son rechazos que pone con una plancha que dicen que por no ser sentencia definitiva no lo trata? ¿Y sabe que además para poner esa plancha el trámite demora entre un año y medio y dos?” y sentenció: “¿Eso funciona bien? No, eso funciona mal”.
“Esas cosas son las que tenemos que ver. No estamos discutiendo cuántos miembros tiene que tener la corte”, remarcó Fernández. Al caso que el mandatario hace referencia es el artículo 280 que le permite rechazar de forma un planeo.
En ese sentido, el Presidente recordó lo planteado por Gustavo Ferreyra “recomienda que haya una suerte de tribunal previo a la Corte, como un tribunal superior, para que analice todos los casos de cuestiones de hecho de las causas y deje a la Corte solo lo constitucional y así volveríamos al sistema original”.