Tras varios meses sin mostrarse en un mismo acto, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof y el Presidente, Alberto Fernández, realizaron el llamado a licitación para el Canal de Magdalena desde el puerto La Plata, en Ensenada. La obra permitirá la conexión marítima entre los puertos del Río de la Plata y del litoral marítimo de las provincias argentinas.
El acto comenzó pasadas las 13 horas, aunque el mandatario provincial llegó media hora antes y aprovechó la oportunidad para dialogar con los intendentes de Ensenada y Berisso, Mario Secco y Fabián Cagliardi respectivamente, y las autoridades y gremios del puerto local. Los diputados y diputadas provinciales y concejales de La Plata aprovecharon la oportunidad para fotografiarse en el puerto con Kicillof.
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Por su parte, el Presidente llegó luego de la reunión que mantuvo con el ministro de Economía, Sergio Massa en la residencia de Olivos. El Jefe de Estado llegó en helicóptero y optó por no hablar con los medios ni antes ni después de haber finalizado el acto.
“El canal Magdalena es nuestra puerta de acceso a un futuro mejor y a una historia más grande”, afirmó Kicillof durante el acto. “Es un hecho histórico”, remarcó. El gobernador agradeció puntual y particularmente las gestiones realizadas por Sergio Massa y Eduardo “Wado” de Pedro.
La construcción del canal Magdalena demandará obras de dragado, ensanche y profundización. El proyecto prevé un presupuesto total de $40.000 millones a invertir en dos etapas, una de relevamiento y otra de dragado, en tanto que posteriormente se llevarán a cabo tareas de balizamiento.
Las obras son estratégicas para el desarrollo de la provincia de Buenos Aires, ya que incrementarán las cargas transportadas por los puertos bonaerenses; permitirán la salida y entrada directa entre el mar y el litoral fluvial; evitarán que las cargas dependan del paso a través de Montevideo; y reducirán significativamente tiempos y costos logísticos.
“El canal permite resolver un problema central de la República Argentina. Hoy la República Argentina está partida, si un barco carga en un puerto de la provincia de Buenos Aires y se propone dirigirse a otro puerto argentino, hoy la única forma que tiene de hacerlo es desviarse a Montevideo, salir de la jurisdicción nacional, pedir autorización a un país extranjero y recién ahí dirigirse a su destino, por eso digo que está literalmente partido”, explicó Kicillof.
“Este Canal es una deuda que tenemos hace demasiado tiempo”, dijo. Durante su alocución Kicillof mencionó a Héctor Timerman y todas las luchas que llevó adelante por el Canal de Magdalena. Los y las presentes se pararon de manera unánime para aplaudirlo y quienes estaban en la mesa principal también. El último en levantarse fue el Presidente.
Por su parte, el Jefe de Estado se encargó de remarcar que el llamado a licitación del canal “es algo que ocurre por parte del Estado nacional y beneficia a la provincia de Buenos Aires”. En modo electoral y sobre el final de su discurso, pidió “unidad” en el Frente de Todos: “Debemos estar más unidos que nunca, porque la división nuestra solo permite que otra vez se frustra la construcción del Canal de Magdalena”.
“Se aproxima la elección y hay barullo en la política, pero no olvidemos que debemos estar más unidos que nunca. Miremos hacia el futuro para que la derecha maldita no vuelva nunca más a gobernar la Argentina”, cerró.
Las obras
La del canal Magdalena es una obra estratégica de dragado y balizamiento para el desarrollo nacional y provincial -que implica una inversión de $40.000 millones- que le brindará al sur de la provincia de Buenos Aires la posibilidad de exportar su producción de manera más eficiente con una salida directa a aguas profundas.
Los trabajos mejorarán la conectividad fluviomarítima y permitirá ahorrar tiempos de navegación de los buques que transitan por el sistema de navegación troncal. La construcción del Canal Magdalena es un proyecto presentado en julio de 2013 por el Gobierno nacional que busca transformar el cauce natural del lecho del Río de la Plata -que posee una profundidad de 4,50 metros-, y dragarlo hasta los 12 metros, lo que abriría una conexión directa entre los puertos fluviales y el litoral marítimo.
La traza prevista consistirá en un canal rectilíneo a desarrollarse entre la zona denominada El Codillo y el área de profundidades naturales conocida como Zona Beta. La primera etapa será de trabajos de campo del Canal y tendrá una duración de 7 meses, mientras que la segunda será la ejecución del dragado de apertura hasta la profundidad de 11 metros con un tiempo de 21 meses.
El objetivo es facilitar la conectividad del transporte naviero mediante grandes embarcaciones entre los puertos marítimos argentinos con el puerto de la ciudad de Buenos Aires y los restantes puertos fluviales del país en la cuenca del Plata.
Actualmente, dicho cauce se encuentra ubicado al sur del Canal Punta Indio, y su nivel de profundidad impide que los buques lo utilicen como vía de acceso a los puertos del Río de la Plata, el Río Paraná y el Río Uruguay. Esta situación genera que aquellos buques de bandera nacional que parten de un puerto fluvial argentino hacia otro del litoral marítimo deben pasar por aguas de uso común, cuyo tráfico lo administra Uruguay.