El presidente de la Nación, Alberto Fernández, participó este sábado en la basílica de Nuestra Señora de Luján de la denominada "Misa por la paz y la fraternidad de los argentinos" y horas más tarde, dejó un mensaje a través de sus redes sociales luego de semanas complejas para la democracia del país. Llamó a construir "una mejor sociedad" y a abrir el diálogo "sin odio y sin violencia".
Desde su cuenta oficial de Twitter, el máximo mandatario compartió varias fotos y escribió: "Participamos de la 'Misa por la paz y la fraternidad de los argentinos y las argentinas'. Como escuchamos en la homilía: 'Por la patria, por esta casa, esta familia que somos. Difícil, compleja. Pero familia al fin. Somos Argentina'". Y señaló: "Hoy nos hemos reunido para reflexionar".
En la misma línea, Alberto remarcó que "la fraternidad es un don y una tarea" de nuestro pueblo y a partir de esto, remarcó: "Debemos construir una mejor sociedad. En diálogo sin odio y sin violencia. Como expresó el Papa Francisco, nadie se salva solo".
El jefe de Estado siguió la misa desde la primera fila, acompañado por el expresidente Eduardo Duhalde; el ministro del Interior, Eduardo De Pedro; la titular de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau y el intendente de Luján, Leonardo Boto, entre otros. También estuvieron el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el gobernador bonaerense Axel Kicillof; el ministro de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque; el canciller, Santiago Cafiero; los ministros Daniel Filmus, Gabriel Katopodis, Jorge Taiana y Juan Zabaleta; y el senador Oscar Parrilli, entre otros.
La misa estuvo encabezada por el arzobispo de Mercedes-Luján, Jorge Eduardo Scheinig, quien advirtió que el país atraviesa un "tiempo extremadamente delicado" y afirmó que la "paz social está frágil y amenazada". Mientras que Gustavo Carrara, obispo auxiliar de Buenos Aires y vicario episcopal para la Pastoral en Villas de Emergencia, expresó: "Estamos en un tiempo extremadamente delicado. La paz social está frágil y amenazada. Y somos responsables de asegurarla y cuidarla".
En el momento de las intenciones, se pidió por la vida de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner y por el cuidado de la vida de todos las argentinas y los argentinos. "Que nunca más la violencia se instale entre nosotros poniendo en riesgo la convivencia democrática", señalaron. También se rezó por la salud del exsenador de Juntos por el Cambio, Esteban Bullrich, internado por una neumonía.
"Si nos encerramos vamos al choque, al enfrentamiento, a la disolución. Si nos abrimos, podemos encontrarnos, escucharnos, dialogar, trabajar por el Bien Común, fortalecer la democracia y reconstruir con esperanza la Patria herida", cerró el arzobispo Scheinig.