Patricia Bullrich evaluó el papel de la Justicia frente al caso del jubilado que asesinó a un ladrón e hizo una insólita defensa de su accionar. En diálogo con La Nación Más afirmó que perseguir a un ladrón que ya estaba herido, pegarle y además pegarle seis tiros "fue una manera de protegerse".
Férrea defensora de la mano dura, no sorprendió al defender al hombre que le pegó seis disparos a otro, después de que entrara a robar a su casa. Para ello, aseguró que "hay que entender cuál es el contexto, es el de un jubilado que vivía solo que fue atacado en tres oportunidades en la misma noche".
Después de reconocer que el apoyo de estas conductas fue una política impulsada durante el macrismo, aclaró con total liviandad que "esta persona frente a una situación de no saber dónde estaban los delincuentes, sale a la calle como una manera de protegerse, encuentra a uno y termina tirándole a uno".
En ese sentido, describió a Adolfo Ríos como "una persona sola, grande, golpeada, con miedo en un estado de emoción" que en defensa propia "generó una situación". "Creo que la justicia argentina y los codigos deben ser más estrictos y claros en la defensa de las personas que deben defenderse porque el Estado no estaba. El se protegió solo", argumentó de forma insólita.
"Estos son temas en los que no podemos convertir a las víctimas en victimarios, no podemos convertir a una persona que dejaron herida en un homicida. La Argentina tiene que volver al sentido común, que no sea el mundo del revés", manifestó.
Finalmente, defendió las políticas de Seguridad llevadas adelante durante la gestión de Mauricio Macri, que entre otras cosas incluyó la doctrina Chocobar -matar a sangre fría por la espalda- y del uso de armas Taser, cuya utilización fue cuestionada por decenas de organizaciones de Derechos Humanos de todo el mundo por promover el abuso policial.