En una intensa sesión en el Senado en la que se discute la Ley Bases y el paquete fiscal, el senador de Santa Fe y aliado del gobernador de esa provincia Eduardo Galaretto ratificó su apoyo al mega decreto, a pesar del impacto negativo que podría conllevar para su provincia darle luz verde al proyecto del presidente Javier Milei, que impulsa aún más la destrucción de los derechos de los trabajadores y el vaciamiento del Estado que profundizará la grave situación que sufre el pueblo desde hace seis meses.
El debate en la Cámara Alta se vive bajo un contexto de máxima tensión tanto dentro como fuera del Congreso, donde efectivos de gendarmería y de la Policía reprimen con camiones hidrantes, gases y balas de goma a los manifestantes que se movilizaron en rechazo a una ley que pretende saquear los recursos naturales del territorio nacional.
La postura de Galaretto acompaña a la de la mayoría de la Unión Cívica Radical (UCR), ya que confía en una aprobación en general, pero con modificaciones en algunos artículos. En sintonía con lo planteado por el gobernador Maximiliano Pullaro, quien afirmó que la ley "va a ordenar en términos generales" a la Nación, el legislador pidió otorgarle "herramientas" al Gobierno pero sostuvo que, si "no dan resultados", hay que "plantear sus correcciones en el plano Legislativo inmediatamente".
"Le doy valor a la coherencia política, tan frágil y vulnerable ante determinadas circunstancias", manifestó el reemplazante de Dionisio Scarpin en el Senado. Sin embargo, sus dichos no coinciden con la actitud del mandatario provincial santafesino, quien tuvo idas y vueltas en su relación con el Presidente. Hace algunos días, intentó no quedar muy cercano al Ejecutivo a través de una postura crítica cuando sostuvo que a Milei "le cuesta mucho la gestión pública", aunque luego se acercó a la administración libertaria con su profundo apoyo para que "salga" la ley, ya que espera "que en el segundo semestre impacte en los recursos de la provincia".
Por su parte, Galaretto destacó la actuación de su partido en territorio santafesino, en el marco de la amplia coalición que implica Unidos para Cambiar Santa Fe. "Hemos sido oposición responsable y hoy somos gobierno", manifestó el senador, y aseguró que, desde su espacio, quieren "ser responsables como opositores en la Nación. Ni máquinas de impedir, ni cheques en blanco, ni pronosticadores del fracaso o del éxito".
Además del senador sanlorencino, también participan de la sesión Carolina Losada, de Juntos por el Cambio (JxC), y Marcelo Lewandowski, de Unión por la Patria (UP). En JxC prima en su mayoría una postura "dialoguista" y la mayor parte de los legisladores de ese espacio acompañarán el proyecto, mientras que UP busca forzar un rechazo, que le representaría otro gran golpe al Gobierno.
Galaretto busca seguir con "el camino de la austeridad"
El legislador Galaretto cree que es necesario "acompañar" porque espera "seguir el camino del gobernador de la coalición plural, con austeridad y mucha gestión". A la par del recorte del gasto público que establece Nación, Pullaro busca "ordenar las cuentas del Estado" a costa de las familias santafesinas, aunque sostuvo que el país "sale adelante fortaleciendo el sistema productivo y el sistema educativo". En ese sentido, el senador acompañó la postura del mandatario provincial y dijo que a la Argentina "le vendría bien que el marco nacional sea de promoción, de las pymes, de la industria y de las grandes inversiones".
Además, criticó tanto al Legislativo como al Ejecutivo por las demoras en el tratamiento y la gestión de las propuestas que "fueron perjudiciales" para el país e hizo una comparación con la medicina para ilustrar la urgencia de la situación económica, según su concepción. "Es un paciente grave que no admite lesiones, requiere un diagnóstico claro y un tratamiento inmediato".
La radiografía en su provincia es clara: desde la asunción de Milei cayó la actividad económica, se produjeron despidos masivos tanto del sector estatal como del privado, hubo una pulverización de sueldos y se profundizó una crisis que parece no tener fin.
Pullaro recordó que la primera versión del proyecto fue cuestionada por la provincia debido a que presentaba retenciones que afectaban la economía santafesina. Dijo que la Ley Bases "iba en contra de la industria del biodiésel" y que, junto con los integrantes de su Gabinete, fueron los "primeros" que se mostraron en contra de su aprobación, por lo que "no fue una adhesión de sumisión".