La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó este jueves cambios en ley de estacionamiento. Las nuevas regulaciones, impulsadas por los legisladores que responden a Horacio Rodríguez Larreta, comenzarán a regir en 2023 y abarcará a las 2.100 calles, 150 pasajes y 230 avenidas existentes en la Ciudad.
La nueva reglamentación establece tres ejes: se podrá estacionar de ambas manos de la acera de las calles periféricas, se prohíbe dejar el vehículo en pasajes, calles con Metrobús y con ciclovías y se inhabilita dejar el vehículo de 7 a 21 en cualquiera de los lados de las avenidas.
En tanto, entre las restantes modificaciones contempladas está que las motos sean estacionadas "de culata entre 45 y 90 grados", lo que cambia la normativa vigente que autoriza a los dueños a hacerlo de manera paralela al cordón de la vereda. También habrá cordones pintados de color anaranjado que indicarán los lugares destinados al estacionamiento exclusivo de ciclorodados y motovehículos.
En otro apartado, se alteró la logística de carga y descarga de mercaderías, estableciendo que, siempre dentro de los lugares y horarios permitidos, la permanencia no puede ser mayor a los 30 minutos ya que, una vez excedido ese tiempo, se considerará como estacionamiento y será infracción.
Por otro lado, se formalizó el sistema "Sube y Baja" que se aplica en algunas escuelas públicas" y que busca agilizar la entrada y salida de alumnos de los establecimientos a través de operatoria que prevé una demarcación horizontal y una señalización vertical para los automovilistas.
“Esta ley simplifica las normas que regulan el estacionamiento en la Ciudad, incorpora a la legislación vigente el sistema Sube y Baja de los colegios porque mostró excelentes resultados y establece en media hora el tiempo máximo que un vehículo de transporte puede permanecer en un cajón azul para carga y descarga”, explicó el legislador de Vamos Juntos Matías López, que ofició de miembro informante.
Desde el Gobierno porteño justificaron impulsar la medida a raíz de un análisis realizado desde la Secretaría de Transporte y Obras Públicas, se determinó que más del 56% de las infracciones realizadas en 2022 fueron por estacionar indebidamente en mano izquierda. Esto se puede atribuir, en parte, a que la normativa actual cuenta con diversas variables como tipo de arteria o sentido de circulación, que vuelven la interpretación más compleja.
“La nueva normativa busca dar mayor claridad a los conductores. Además, junto con la disponibilidad del mapa de estacionamiento en su celular los vecinos y vecinas tendrán más herramientas al momento de estacionar. Con esta iniciativa, se generará mayor capacidad de estacionamiento en los barrios alejados de la zona central", afirmó Manuela López Menéndez, secretaria de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad de Buenos Aires.
Sesión y críticas de la oposición
El expediente fue impulsado por el bloque oficialista de Vamos Juntos, que contó con el apoyo de la Unión Cívica Radical, Partido Socialista y Republicanos Unidos, con los que totalizaron 31 votos. En contra, se expresaron 24 legisladores de y 24 del Frente de Todos, La Libertad Avanza y el Frente de Izquierda y los Trabajadores. Con la aprobación, la iniciativa pasó al Ejecutivo que tendrá a cargo la reglamentación de la ley.
Desde el bloque del Frente de Todos, se manifestaron en contra de la iniciativa impulsada por Rodríguez Larreta. El legislador Matías Barroetaveña objetó que con esta modificación, la gestión del Pro "cobrará el uso en 135 mil espacios que hasta ahora eran gratuitos en toda la ciudad.”
“El gobierno de Rodríguez Larreta tiene presupuestado 10 mil millones de pesos de recaudación en multas a los que se sumarán los ingresos por estacionamiento medido, las multas y acarreos que implica el nuevo sistema”, explicó el diputado, y agregó que “es una suma enorme de cantidad de recursos que planea sacarle a los vecinos y vecinas de la ciudad agobiados por las múltiples dificultades económicas y que ahora van a tener que pagar cuando vayan a visitar o cuidar a un familiar, o para trabajar de manera independiente".
Y cerró: “Una vez más están votando meterle la mano en el bolsillo a los porteños, como ya hicieron con la indexación del ABL y con el impuesto a consumos con tarjeta de crédito, en vez de trabajar para resolver los problemas sociales de la ciudad donde la pobreza llegó al 21% y la indigencia en la Zona Sur es de 7.6%, número similar al del conurbano boanerense".
Por su parte, el diputado del Frente de Izquierda Gabriel Solano sostuvo que "lo que se está planteando es un negocio a partir de los lugares adiciones para tener que pagar" y alertó sobre "el impacto ambiental" de la medida porque "prioriza el uso del transporte privado, como es el auto, en detrimento del transporte público".
Con información de Télam