La renovación de una instancia clave de Comodoro Py empieza a tomar forma. Este viernes se formalizó la designación de Roberto Boico en la Cámara Federal porteña al publicarse el decreto con su nombramiento en el Boletín Oficial. Integrará la sala II con el reincorporado Eduardo Farah y Martín “Doctrina” Irurzun.
A través del decreto 216/2021, y tras el acuerdo del Senado, el presidente Alberto Fernández designó formalmente a Boico en el tribunal revisor de Comodoro Py. La particularidad del decreto es que la firma del mandatario fue acompañada por la del jefe de gabinete de ministros, Santiago Cafiero, y la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, ya que aún no pudo asumir Martín Soria en Justicia.
Aún no está clara la fecha de asunción de Boico ya que debe jurar para el cargo y antes debe realizar una serie de trámites para su ingreso al Poder Judicial.
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Para llegar a la cámara porteña, Boico concursó y quedó segundo en la orden de mérito. Integró la terna con Diego Amarante y Alejo Ramos Padilla (el juez que impulsó el D’Alessiogate). Como Ramos Padilla fue destinado al juzgado federal de La Plata, Fernández se inclinó por Boico para este cargo estratégico. El 11 de marzo pasado recibió el visto bueno de la Cámara Alta.
Boico es un abogado de amplia trayectoria, profesor universitario (UBA, IUNMA), que demostró un muy buen desempeño en los diversos concursos de los que participó. Fue juez subrogante en la Cámara Federal de Casación Penal -la máxima instancia penal del país- entre 2015 y 2016. Como letrado, defendió a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en la causa del Memorándum con Irán y de la Obra Pública -tema civil-.
Integrará la sala II del tribunal junto a Irurzun y el recientemente reincorporado Eduardo Farah. Macri había eyectado a Farah de Comodoro Py vía un traslado en 2018 luego de que votara a favor de la excarcelación de los empresarios Cristóbal López y Fabián De Sousa. Su regreso en febrero de este año y la llegada de Boico le dan otra impronta a este tribunal clave.
Un ejemplo de la importancia que tiene el ingreso Boico para empezar a dar vuelta la página del Lawfare: recientemente, la sala II de la cámara porteña decidió reabrir la causa conocida como “Operación Puf”, que se basa en escuchas ilegales realizadas por la AFI macrista y se creó para derribar el D’Alessiogate. Uno de los querellantes de este caso es el fiscal Carlos Stornelli quien había apelado el archivo del expediente, algo que finalmente se le concedió. ¿Quiénes le dieron la derecha a Stornelli, el martes pasado? Los jueces Mariano Llorens y Leopoldo Bruglia, ambos designados por Macri en la sala I pero quienes integraron momentáneamente la sala II. Farah quedó en minoría (la votación fue 2-1). Esto sucedió porque Irurzun no intervino y Boico no había sido designado por lo que hubo que completar el tribunal con jueces de la otra sala.
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La llegada de Boico a Comodoro Py es parte del recambio que impulsa el gobierno nacional en los tribunales federales de Retiro.
En la otra sala de la cámara porteña, se encuentran el mentado Llorens –llegó por concurso durante el macrismo-, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi. Estos últimos dos jueces ingresaron a dedo por decisión de Macri. Ambos fueron trasladados de forma irregular y deben abandonar su cargo. Tras un fallo de la Corte Suprema de Justicia que consideró que todo traslado es transitorio, el Consejo de la Magistratura inició un concurso para designar a dos camaristas “efectivos” en los sillones que hoy ocupan Bruglia y Bertuzzi –este último se presentó y compite para intentar quedarse donde está, algo imposible si la terna se eleva al Ejecutivo durante la gestión de Alberto Fernández-.
Cuando esas dos designaciones se hagan efectivas –no está claro cuánto tiempo demorarán-, el tribunal estratégico de Comodoro Py habrá cambiado definitivamente su fisonomía.
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