El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, confirmó este jueves que fue Ricardo Lorenzetti, actual miembro del máximo tribunal, quien le recomendó al presidente Javier Milei que sea el juez Ariel Lijo el que integre la vacante en la Corte Suprema. "Lorenzetti recomendó a Lijo", aseguró en una entrevista televisiva.
"¿El origen es Lorenzetti?", le consultaron durante una entrevista en Todo Noticias, y el ministro contestó: "Exactamente". "Lorenzetti recomendó a Lijo", agregó después. En ese sentido, el ministro negó que el nombre de Lijo haya sido un pedido de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. "No, de ninguna manera, creo que todos saben el origen", indicó al ser consultado sobre esa posibilidad.
Por su parte, también desestimó Manuel García-Mansilla, el segundo nominado para integrar la Corte Suprema, haya sido acercado por el asesor presidencial Santiago Caputo. "No es que lo nombró Caputo ni lo propuso Caputo sino que tuvo una entrevista con Caputo y él dice 'a mí me ofreció el cargo'", planteó Cúneo Libarona.
El papelón a micrófono abierto de Cúneo Libarona en su repudiable ataque a las diversidades
El ministro asistió el martes pasado a la comisión de Mujeres y Diversidades de la Cámara de Diputados, donde tuvo que explicar el desfinanciamiento de subsecretaría de Protección contra la violencia de género y de las políticas públicas en materia de géneros y diversidades. En ese contexto, justificó el cierre de programas contra la violencia de género y renovó sus ataques contra la diversidad sexual, en un discurso cargado de prejuicios biologicistas y agresivos. Pero también tuvo un furcio, sin darse cuenta de que tenía el micrófono prendido, cuando plasmó la política retrógrada en materia de género y diversidades del gobierno de Milei.
Tras una diátriba en la que rechazó la "diversidad sexual", el recinto se debatió entre protestas de la oposición contra Cuneo Libarona y el aplauso de los diputados de LLA. Desde la Unión Cívica Radical, Carla Carrizo le pidió que "está obligado a respetar las leyes del estado" más allá de lo que "opine".
"Esperesé (Sic.) que no terminé", se quejó el ministro, mientras esperaba que se calme el recinto. Luego, hablando con un asistente suyo, se escuchó un comentario a través del micrófono: "No, boludo, esto está textual del discurso de Milei..."
"Se acabó solo el género. Nuestro valor es la familia, es el centro de la sociedad y la educación. ¿Cuáles son los valores familiares tradicionales? El amor, la unión, el trabajo, el estudio, la solidaridad, la igualdad ante la ley y de trato; promover los símbolos y valores patrióticos, respetar y valorar a nuestros próceres. Esto resulta esencial para el bienestar de los individuos y la cohesión social", apuntó.
"Nosotros rechazamos la diversidad e identidades sexuales que no se alinean con la biología. Son inventos subjetivos", señaló, para provocar el repudio de la oposición.