El presidente Javier Milei publicó un extenso mensaje en las redes sociales para repudiar el pedido de detención realizado por la Corte Penal Internacional (CPI) contra el Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el ex ministro de Defensa, Yoav Gallant. "Declaración de la República Argentina en defensa de Israel La República Argentina manifiesta su profundo desacuerdo con la reciente decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) de emitir órdenes de arresto contra el Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el exministro de Defensa, Yoav Gallant", escribió.
Poco después, el Gobierno oficializó su posición y "solidarizarse con Israel" a través de un comunicado.
En la carta publicada en X (ex Twitter), el jefe de Estado aseguró que "esta resolución ignora el legítimo derecho de Israel a defenderse frente a ataques constantes por parte de organizaciones terroristas como Hamas y Hezbolá. Israel enfrenta una agresión brutal, una toma de rehenes inhumana, y el lanzamiento indiscriminado de ataques contra su población".
"Criminalizar la defensa legítima de una nación mientras se omiten estas atrocidades es un acto que distorsiona el espíritu de la justicia internacional. La Argentina se solidariza con Israel, reafirma su derecho a proteger a su pueblo y exige la liberación inmediata de todos los rehenes. Hacemos un llamado a la comunidad internacional para condenar las acciones de Hamas y Hezbolá, defender la soberanía de Israel y actuar con justicia e imparcialidad en la búsqueda de una paz duradera en la región", cerró Milei.
Por qué pidieron la detención de Netanyahu
En un comunicado, el tribunal con sede en La Haya, Países Bajos, afirmó que hay "motivos razonables para creer que el Sr. Netanyahu, nacido el 21 de octubre de 1949, Primer Ministro de Israel en el momento de la conducta pertinente, y el Sr. Gallant, nacido el 8 de noviembre de 1958, Ministro de Defensa de Israel en el momento de la conducta presuntamente cometida, son cada uno de ellos responsables penalmente de los siguientes crímenes como coautores por haber cometido los actos conjuntamente con otros: el crimen de guerra de hacer morir de hambre como método de guerra; y los crímenes de lesa humanidad de asesinato, persecución y otros actos inhumanos".
La Corte afirmó que Netanyahu y Gallant "privaron intencionalmente y a sabiendas a la población civil de Gaza de objetos indispensables para su supervivencia, incluidos alimentos, agua, medicamentos y suministros médicos, así como combustible y electricidad, desde al menos el 8 de octubre de 2023 hasta el 20 de mayo de 2024".
El tribunal entendió también que "no se podía identificar ninguna necesidad militar clara ni ninguna otra justificación en virtud del derecho internacional humanitario para las restricciones impuestas al acceso de las operaciones de socorro humanitario", por lo que determinó que el primer ministro y el exministro de Defensa, desplazado de su cargo a inicios de noviembre, "tienen responsabilidad penal por el crimen de guerra de hacer morir de hambre como método de guerra".