Látigo y chequera: Caputo manejará la caja para negociar con los gobernadores

El ministro de Economía es el encargado de ejecutar el ajuste fiscal que quiere Milei. Se sentará con los gobernadores para negociar partidas clave para las arcas provinciales. Los mandatarios tienen los votos que el Gobierno necesita para reformas estructurales.

11 de diciembre, 2023 | 13.39

En su segundo día como presidente, Javier Milei delegó en su ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, el manejo de fondos discrecionales para las provincias. Se trata de una herramienta que todo gobierno utiliza para negociar con los gobernadores leyes clave y es una de las "cajas políticas" por las que podrían pasar la tijera y recortar gasto en pos del fuerte ajuste fiscal que promete el libertario. Es una de las decisiones que se seguirán conociendo en las próximas horas cuando sea el propio Caputo el encargado de comunicarlas. 

Entre los 13 decretos que firmó Milei y que fueron publicados en el Boletín Oficial, el 8/2023 fue el que incorporó modificaciones a la Ley de Ministerios. En la norma se formalizó el recorte de cantidad de ministerios, los cuales pasarán a ser nueve desde ahora y allí también se expresan las misiones que estas carteras y la Jefatura de Gabinete tendrán. En la letra de esas 76 competencias que tendrá Caputo se destacan, por ejemplo, la de “intervenir en la instrumentación y seguimiento de políticas fiscales, económicas y financieras entre el gobierno nacional y los gobiernos provinciales” como también "participar en las negociaciones y modificaciones de los contratos de obras y servicios públicos, en el ámbito de su competencia" y "entender en lo referente a la contabilidad pública y en la fiscalización de todo gasto e inversión que se ordene sobre el Tesoro de la Nación". Además, la cartera económica sigue detentando el manejo de las autorizaciones para que las provincias o los municipios accedan al crédito externo.

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En relación a las provincias, entre esas transferencias de atribuciones se destaca que Economía pasará a tener funciones que refieren al vínculo entre Nación y las provincias. Tal es el caso del Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional y los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y su administración la venía desarrollando la denominada Secretaría de Provincias del Ministerio de Interior al mando de Eduardo "Wado" de Pedro. Son transferencias que hasta acá se hicieron "con criterio político" y ahora si bien no dejarán de tener ese tamiz también deberán pasar por el filtro de una planilla de excel.

En su página oficial, esa división exhibe que su responsabilidad es desarrollar “acciones de fortalecimiento institucional a nivel provincial y regional, orientadas a la promoción del desarrollo económico y social”, así como plantear “medidas de financiamiento, con la cooperación nacional e internacional, para la asistencia a todas las provincias”.

Un informe sobre esta novedad, publicado por el Instituto Consenso Federal que dirige el exdiputado nacional Alejandro "Topo" Rodríguez, apunta que en el proyecto de Presupuesto 2024 presentado en el Congreso y en cuyo debate debate aún no se avanzó la partida destinada para los ATN comprende 104 mil millones de pesos. Mientras que el Fondo Fiduciario de infraestructura para el “financiamiento para obras de infraestructura económica y social” tuvo ingresos proyectados por 17.800 millones de pesos en el Presupuesto 2023. 

Este escenario genera mayor preocupación en los gobernadores, alertados por la situación de sus arcas debido a las promesas de "obra pública cero" y del "recorte de 20.000 millones en el sector público" que anunció Milei. Como contó El Destape, ante la falta de certezas de la nueva administración, los mandatarios e incluso el jefe de gobierno porteño Jorge Macri analizan impulsar el tratamiento de un proyecto para coparticipar el impuesto al cheque y así cubrir el hueco que les generó los cambios en Ganancias y el IVA que promovió Sergio Massa. Para los sueldos y aguinaldos de diciembre ese faltante fue cubierto con la promesa de fondos compuestos por ATN no utilizados en este ejercicio y por el pago de una deuda actualizada del Consenso Fiscal del 2018. Todo a la firma de Milei.

Milei piensa en una serie de reformas estructurales que podrían arribar al Congreso como una "ley ómnibus", aunque todavía restan precisiones ya que el equipo legal del libertario analiza que no haya debilidades jurídicas que detengan los cambios en la Justicia. De todos modos, su aprobación requerirá de la muñeca política del libertario o al menos de dos hombres designados a tal fin como el ministro del Interior, Guillermo Francos, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. 

Con este reperfilamiento de funciones, Francos no cuenta con fondos frescos para aceitar esas relaciones “políticas” ante gobernadores que, tanto sean del peronismo como de Juntos por el Cambio, no se muestran divididos sino más bien hacen de la unidad un lugar de fortaleza desde donde negociar. Para Interior, según el mismo decreto que modifica la Ley de Ministerios, en las misiones primarias no se observan referencias a relaciones fiscales o fondos de infraestructura para las provincias. Sin embargo, por los cambios que decidió Milei, absorbe la Secretaría de Turismo y con ella todo lo vinculado a los recursos y promoción de la actividad.

"No hay plata, no hay plata", repite una y otra vez Milei. Todo lo que tenga que ver con fondos para las provincias pasará por el excel del exJP Morgan y uno de los artífices del préstamos con el FMI. Para cumplir con el mandato del Presidente, es probable que en esos cara a cara que tenga con cada gobernador, el ministro repase las cuentas de sus provincias y requiera de algún tipo de ajuste fiscal para recibir estas transferencias no automáticas, las cuales representan el 1% de los impuestos coparticipables. Como prenda de cambio, los gobernadores tienen votos.