El dirigente político y excandidato a presidente de Unión por la Patria (UP), Juan Grabois, analizó el presente del país tras un mes y medio del Gobierno de Javier Milei y aseguró, en vísperas del paro y movilización de este miércoles 24 de enero, convocado por la CGT, que será clave ya que "esto lo resuelve la calle o no lo resuelve nadie", en una fuerte crítica contra la clase política de Argentina. "Tenemos que pensar en el coraje, no tener miedo", apuntó de cara a las protestas por los derechos violentados y sostuvo que "la superestructura política no va a resolver esta situación".
En diálogo con Roberto Navarro en El Destape Radio, el dirigente social manifestó que -en este tiempo- "nunca se vio un ataque tan brutal contra los derechos de las mayorías populares en tan poco tiempo" tras la publicación del DNU y la llamada "Ley Ómnibus", que hoy busca su dictamen en un nuevo plenario de comisiones de Diputados. "En relación a las modificaciones que hace a este 'megaley', no entregó ni el 10%. Entregó lo que era obvio que iba a entregar, aspectos superficiales de la legislación. Todo lo que cedieron lo pueden revertir cuando tengan las facultades", marcó. "Quienes quieran considerar eso un triunfo de la fortaleza de 'bloques dialoguistas', o incluso nuestra propia, es una forma de autoconvencerse de que estamos de alguna manera haciendo un digno rol de oposición... Cosa que no pareciera ser hasta ahora como conjunto (movimiento sindical, social y una parte de UP)", opinó.
"Milei tiene un dogma, sigue un dogma, el del mercado absolutizado. El mercado y el capital como 'reyes y señores de la tierra'. La política no debe gobernar, debe gobernar el dinero. Es otorgarle la dignidad heróica al empresario. Es un bolchevismo invertido, la lucha de clases vista de arriba para abajo", analizó Grabois. Y añadió: "Frente a esa 'guerra de clases' que él plantea, tiene que haber una resistencia no-violenta para evitar que se produzca el principal objetivo de este paquete de medidas que es la licuación de los ingresos, los salarios, las jubilaciones y los ahorros del 90% de los argentinos".
"Es una posibilidad que ellos se pongan violentos. Cuáles son los niveles de violencia que están dispuestos a aplicar es una incógnita, cuánto van a jugar al fleje de la democracia es una incógnita. Yo creo que no va a haber una situación represiva generalizada y que es alarde para que la gente tenga miedo y no se movilice", señaló el abogado y líder de Frente Patria Grande. Y agregó: "Tenemos que pensar en el coraje, en no tener miedo. De ninguna manera podemos permitir que este terrorismo psicológico haga enflaquecer una movilización popular".
En esa línea convocó a movilizarse este miércoles en el marco del paro general de la CGT a las 10.30 en Callao y Rivadavia, detrás de la UTEP. "Vamos a tener una columna bien armada, muy segura y están invitados todos los que quieran venir. Vamos a garantizar que no haya infiltrados y que se pueda movilizar en paz", manifestó.
Además, Grabois sostuvo que el actual gobierno de Milei aborda "los conflictos de la sociedad desde una perspectiva bélica, es decir, del enemigo interno" y aseguró que "un día son los mapuches, otro día el terrorismo islámico y otro día los zurdos narcos-colectivistas". Mientras que subrayó que para el oficialismo "el mundo se divide entre orcos y gente de buena voluntad", siendo ésta una narrativa bélica y "no basada en la justicia". Y dio su punto de vista: "Para mí ni unos son orcos ni otros gente de buena voluntad. Todos somos argentinos y argentinas con ideas distintas que tenemos que funcionar en el marco de la democracia, la Constitución, el estado social de derecho, me caigan mejor o peor".
Frente al presente de la clase política, el dirigente llamó a -tras la marcha del 24 de enero y el debate de la ley de bases- una "revisión de cara a la gente" en el peronismo. "Lo que hace a nuestra fuerza no es ni el dinero ni los grandes genios, el oscurantismo de discutir entre 10 o 20 'genios' viene fracasando estrepitosamente", apuntó. Y se mostró muy crítico con el espacio: "En varias discusiones que tuve hay como un tono de joda, de 'me río de Milei', justo pasó lo de Davos. Se ríen de Milei, qué gracioso, qué pelotudo este tipo... Tan pelotudo no es, nos vacunó en las elecciones, nos metió una devaluación del 118%, después un protocolo represivo, después un DNU y por último una megaley. Hizo, en el sentido inverso, lo que nosotros no nos animamos hacer... Yo no creo que haya que reírse demasiado".
"Los debates hay que darlos de cara al pueblo, no en salones cerrados donde a veces -por condescendencia- te dan la razón en alguna cosa pero la conducta sigue siendo siempre la misma. Tenemos el doble desafío de enfrentar una política de deshumanización, del desguace del Estado Nacional que pone la Patria en peligro y en la vitrina del mejor postor, la prioridad número uno; pero esa prioridad no se va a poder llevar adelante si no hay una profunda revisión y un proyecto que ponga por delante un sentido y un propósito", concluyó Grabois.