El Gobierno de Javier Milei ya trabaja para desactivar el paro general anunciado por la CGT. Los principales sindicalistas se reunieron con ministros de esta administración por primera vez el miércoles pasado. "Todavía hay mucho tiempo hasta el 9 de mayo", avisó Guillermo Francos, ministro del Interior.
En la Casa Rosada consideraron que el diálogo del encuentro fue muy positivo y se mostraron sorprendidos por el anuncio posterior. "Los entendemos a los muchachos, pero sabemos que en el medio se mete mucho la política", consideró una fuente del riñón de Milei ante El Destape.
Esta misma fuente anticipó que "vamos a tratar de que el paro no se haga, nosotros nos mostramos abiertos en muchos temas, de hecho hasta avanzamos en solucionar con Hugo Moyano el tema de la homologación de la paritaria de Camioneros".
La llegada de Hugo Moyano a la Rosada sorprendió. Su hijo Pablo estuvo ausente. Y también sus aliados, como Sergio Palazzo (La Bancaria), Mario Manrique (SMATA) u Omar Plaini (Canillitas).
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Pablo Moyano aclaró hoy su ausencia: “Yo no me puedo sentar en una mesa con tipos que se te cagan de risa en la cara cuando cierran Télam o no mandan comida a los comedores, entonces no fui por una cuestión de piel”, expresó.
Por su parte, el ministro que armó la reunión con la CGT rompió el silencio sobre el tema. Francos contó: “Decretar un paro el día posterior a una reunión muy buena que tuvimos nos sorprendió. A mí me sorprendió particularmente. Pero está dentro de las decisiones que puede tomar la CGT, quizás tienen distintas posiciones. Igual está previsto para dentro de un mes, así que seguiremos conversando, no tenemos por qué frenar las conversaciones por esto”, dijo el funcionario.
Francos chatea habitualmente con los líderes de la CGT y es el puente con los sindicalistas que irán por su segundo paro general contra la gestión de Milei. Y se mostró confiado en diálogo con Radio La Red: “Yo creo que hasta mayo tenemos mucho tiempo para seguir conversando. Veremos. Tenemos que analizar bien y analizar con ellos los motivos centrales por los que convocan a un paro”.
Otra fuente que fue parte de la reunión con los gremialistas en la Rosada también se mostró confiada sobre que el paro es "suspendible" pero a su vez aclaró: "Nos gustaría que el paro no se haga, pero si quieren parar que paren, ya está".
En el Gobierno ahora intentan mostrarse abierto al diálogo con la CGT, como no sucedió en estos cuatro meses. De hecho, hasta por lo bajo ya deslizan la posibilidad de abortar el plan de Luis Caputo de que las paritarias no superen a la inflación. "Los problemas de homologación que estamos teniendo no es estrictamente por eso, sino que es por cuestiones laterales sobre normas laborales", aclararon.
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