Por iniciativa del bloque radical que preside Rodrigo de Loredo, este martes habría en la Cámara de Diputados una sesión especial para tratar proyectos referidos a la declaración de la mergencia universitaria y actualizar el financiamiento, un tema que escaló al primer plano con la gran marcha de estudiantes de semanas atrás. La decisión del Ejecutivo de incrementar únicamente el monto destinado a la UBA y dejar de lado las otras 60 universidades nacionales levantó quejas de todos los sectores y obligó al radicalismo a tratar de salir del embrollo con este pedido de sesión en la que proponen debatir varios proyectos, con firmas de distintas bancadas, que no tienen dictamen. El oficialismo buscó debilitar la convocatoria llamando a un plenario de las comisiones de Presupuesto y de Educación para el jueves para debatir la misma problemática. La gravedad de los sucesos en Misiones -que arrancaron con una protesta docente-, motivarán el reclamo de la bancada de Unión por la Patria que pedirá tratar también la restitución del Fondo de Incentivo Docente (Fonid) eliminado por este Gobierno.
En el temario hay proyectos de la UCR, Hacemos, Unión por la Patria, el FIT e Innovación Federal. Si los diputados de estas bancadas bajan a sesionar, el quórum estaría más que garantizado. La cuestión es que se trata de proyectos que no tienen dictamen, por lo que necesitan de una mayoría agravada para conseguir su tratamiento sobre tablas, algo difícil de alcanzar. En verdad, la sesión especial apuntaba a funcionar como caja de resonancia de las iniciativas que el oficialismo trata de demorar a toda costa, evitando reunir las comisiones que deben tratarlo. Por eso, la decisión conocida ayer por la tarde del presidente de la Cámara, Martín Menem, de ahora citar a las comisiones para el jueves a la tarde buscó quitarle sentido a la convocatoria del martes.
La movilización del mes pasado, de las más grandes de los últimos años, puso el tema al tope de la agenda. Al otro día de la marcha, Unión por la Patria convocó a una sesión especial de la que sólo participaron 14 diputados radicales y por cuatro no se llegó al quórum. El Gobierno prometió discutir la situación, pero apostó a dormirla en un largo tratamiento. El sorpresivo anuncio de una recomposición exclusiva para la UBA dejó al radicalismo en el ojo de la tormenta porque quedó flotando la idea de que su titular, el senador Martín Lousteau, y su aliado el vicerrector Emiliano Yacobitti habían negociado un acuerdo para la Universidad de Buenos Aires y dejaron al resto colgados. "Resulta inadmisible y provocador que se reconozca solo para una universidad y no para la totalidad del sistema", respondieron los rectores a través del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).
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Por eso, en el pedido de sesión presentado por el bloque de diputados de la UCR destacó el hecho de que haber otorgado un 270% de aumento a la UBA "implica de parte del Gobierno reconocer la necesidad de una adecuación presupuestaria para garantizar el funcionamiento de las instituciones universitarias", por lo que corresponde extenderlo a las otras 60 casas de altos estudios. "El Gobierno no puede promover un nueva grieta en el país", subrayaron. Las tensiones se vieron reflejadas en la comisión de Educación, que preside el macrista Alejandro Finocchiaro, que tiene como vice a la peronista Blanca Osuna y vice segunda a la radical Danya Tavela.
La bancada de Unión por la Patria quiere sumar al debate de este martes la propuesta de reestablecer el Fonid por ley, cuya eliminación está provocando trastornos cada vez mpas visibles. De hecho, para este jueves los gremios docentes convocaron a un paro nacional reclamando el llamado a paritarias y también la vuelta del Fonid, que en los hechos les significó una poda salarial de entre el 10 y el 20%. Como para ese día ahora llamaron al plenario de las comisiones de Presupuesto y de Educación, los gremios llamaron a marchar al Congreso para exigir tratamiento y dictamen a los proyectos de financiamiento.
La situación de Misiones comenzó con una protesta de los docentes, a los que luego se sumaron el personal de salud y, finalmente, los policías. La política del gobernador Axel Kicillof es otorgar recomposiciones a estatales y docentes en la medida que le permite su presupuesto: la semana pasada acordaron un 7,5% de incremento. Pero muchas otras provincias tenían las discusiones dormidas y el conflicto en Misiones las revivió, como en los casos de Santa Fe, Tucumán y Salta. En Diputados buscarán sumar voces para que el Gobierno ofrezca una respuesta nacional.
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