La Corte Suprema firmó 2 fallos que favorecen al Grupo Clarín y le permiten mantener sus tarifas de celular, cable e internet fuera de los límites que fija el Estado. Ambos fallos tienen la firma de los 4 cortesanos incluido Carlos Rosenkrantz, algo ilegal ya que el Grupo Clarín fue su cliente. Suma así 58 expedientes que firma por fuera de la ley. Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti avalan esta ilegalidad. Parece que nadie quiere enemistarse con Héctor Magnetto.
El caso de las tarifas del Grupo Clarín esta en la Corte desde junio de 2021, hace más de 16 meses. El propio presidente Alberto Fernández describió este letargo como un “un acto de complicidad judicial con el poder económico real” al referirse a que la Corte no resuelve la medida cautelar que le permite a Magnetto y sus socios no cumplir con el decreto 690 que el presidente rubricó el 21 de agosto de 2020. La Corte sabe: ahora, al rechazar 2 planteos contra esa cautelar, la prorrogó. Mientras el tema de fondo no se resuelva (la validez del decreto presidencial) cobrarán lo que quieran.
¿Qué establece el decreto 690? Que los servicios de telecomunicaciones son un “servicios públicos esenciales y estratégicos en competencia” y que sus precios serán regulados por el Estado. El Grupo Clarín judicializó este decreto. Primero lo hizo en enero de 2021, en plena feria judicial, pero el juez Walter Lara Correa rechazó dictar una cautelar para suspenderlo. La empresa apeló y en abril de 2021 logró un fallo a favor de la Sala II de la Cámara Contencioso Administrativo Federal, firmado por los camaristas Luis María Márquez y José Luis López Castiñeira. El Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) apeló el fallo pero la Cámara no aceptó el recurso extraordinario para que el expediente llegara a la Corte. El Gobierno tuvo que ir en queja al máximo tribunal, el último recurso. Ahora la Corte rechazó esos recursos.
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En concreto, la Corte rechazó 2 recursos de queja. Uno es del Estado Nacional, patrocinado por el procurador del Tesoro Carlos Zannini. El otro del ENACOM, el organismo a cargo de que regular sus tarifas. La fórmula de rechazo fue la misma: los recursos eran contra la medida cautelar gracias a la cual el Grupo Clarín no respeta los límites a las tarifas de telecomunicaciones. El máximo tribunal desestimó los planteos porque no son contra una sentencia definitiva. Lo insólito es que es la Corte no pone límites a la cautelar por la que Clarín continúa con el cobro de sus tarifas mientras no se resuelve la cuestión de fondo. Hoy se conoció la inflación del 6,3% de octubre: en comunicación fue del 12,1%, casi el doble.
Rosatti, auto votado presidente de la Corte, fue en junio pasado a un evento de Clarín y dijo que "conjugar mercado y Estado es muy importante. Después, un Gobierno será más neoliberal, más neointervencionista, pero lo más importante es erradicar algunos temas que se ven como malas palabras", en alusión al progreso (eufemismo de enriquecimiento) y a la teoría del derrame. Se habla mucho de las visitas de Jorge Rendo, canciller del Grupo Clarín, a la oficina de Rosatti en el 4to piso del palacio de Tribunales. Y todo indica que tienen efecto.
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58
Al poner su firma en estos 2 fallos, el cortesano Rosenkrantz alcanzó 58 causas en las que interviene pese a que se trata de ex clientes. El Destape hizo el relevamiento de los expedientes donde Rosenkrantz interviene pese a que la ley se lo prohíbe, avalado por sus colegas de la Corte.
El dato es público. Surge de cruzar los votos de Rosenkrantz que figuran en el archivo público de fallos de la Corte Suprema con el listado de ex clientes que el propio Rosenkrantz entregó al Senado cuando se trató su nominación, luego de que dieran marcha atrás con la designación por decreto por parte de Mauricio Macri. También con la lista de clientes (los que habían autorizado que los mencionaran) que figuraban en la web del estudio de abogados Bouzat, Rosenkrantz y Asociados, rescatada antes de que la borraran.
Más allá de lo que dicen los fallos y de la postura de Rosenkrantz, aún si votó contra su ex cliente, la situación viola el Código Procesal. El artículo 17 establece como causal de recusación “haber sido el juez defensor de alguno de los litigantes” y el artículo 30 dice que “todo juez que se hallare comprendido en alguna de las causas de recusación mencionadas en el artículo 17 deberá excusarse”. Rosenkrantz sabe que lo que hace es ilegal.
El 21 de octubre de 2021, tal como reveló El Destape, Rosenkrantz informó a sus colegas de la Corte que comenzaría a intervenir en causas de su ex clientes, entre los que se cuentan Clarín, La Nación, Mc Donalds, Quilmes, el Grupo De Narváez y el fondo Pegasus, entre otros. Pero en este caso no es cierto que el que avisa no traiciona: no sólo es ilegal el argumento que esgrimió Rosenkrantz (que ya habían pasado 5 años desde que había asumido en la Corte cuando la ley no pone plazos a esa prohibición) sino que ya lo había hecho en 21 expedientes antes de esa fecha donde se inventó una ley a medida. La prohibición de intervenir en casos de ex clientes es de por vida. Y el artículo 32 establece que hacerlo es causal de “mal desempeño”. Por ahora nadie se lo recordó.
Rosatti, Maqueda y Lorenzetti, sus colegas cortesanos, saben de esta ilegalidad constante. Pero decidieron avalarla justo en uno de los expedientes clave en la relación de poder de la Corte con el Gobierno: la regulación de las tarifas de celular, cable e internet del Grupo Clarín. Tal como informó El Destape, el 27 de septiembre pasado los cortesanos rechazaron un planteo que hizo el gobierno el 4 de noviembre de 2021, 11 meses atrás. ¿Qué pedía el Gobierno? Que Rosenkrantz se excusara de intervenir en este caso porque fue abogado de Clarín según el propio Rosenkrantz informó. La Corte rechazó ese planteo para beneficiar al Grupo Clarín. Ahora Rosenkrantz votó en 2 fallos sobre este tema.