El fiscal Claudio Navas Rial afirmó que la documentación que aportó el Gobierno en su ampliación de la denuncia contra Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Oscar Aguad y otros ex funcionarios por el envío de armas a Bolivia permite “robustecer preliminarmente la hipótesis del casos orginalmente trazada”, es decir, que se trata de un caso de contrabando agravado. Sumó además como imputado al gendarme Héctor Adolfo Caliba. Se trata, tal como informó El Destape, de la persona que recibió el armamento y que reveló que tenía órdenes de Bullrich de colaborar con la dictadura que derrocó a Evo Morales.
El miércoles pasado los ministros de Justicia Martin Soria y de Seguridad Sabina Frederic junto a la titular de la AFIP Mercedes Marcó del Pont ampliaron la denuncia original y aportaron documentación hallada en el ministerio de Defensa que conduce Agustín Rossi. Esos papeles son fundamentales, ya que revelan cómo la Gendarmería agregó 70.000 cartuchos 12/70 AT, 581 granadas y 100 spray de Gas Lacrimógeno forma paralela al equipamiento que llevaba el grupo de elite Alacrán que partió el 12 de noviembre de 2019 rumbo a La Paz para proteger la embajada argentina. También que fue el gendarme Caliba quien los recibió y documentó que se reunió con la Policía Boliviana y les expresó que tenía órdenes de colaborar con la dictadura.
Para el fiscal Navas Rial tanto los papeles que aportó el Gobierno como las medidas de prueba que solicitó permiten profundizar la investigación. El juez Javier López Biscayart deberá definir cuales ordena.
El 16 de julio el fiscal Navas Rial imputó a Macri, Bullrich, Aguad, al ex embajador en Bolivia Normando Álvarez García, al ex director de Gendarmería Gerardo José Otero y a los directores de Logística y Operaciones de esa fuerza, Rubén Yavorski y Carlos Recalde, respectivamente. Ahora, con la nueva información recibida, el fiscal Navas Rial sumó al gendarme Caliba como imputado.
Según informaron desde la fiscalía, imputaron al gendarme Caliba “en razón del rol que este habría desplegado en el aeropuerto del Alto, La Paz, en las tareas de recepción del personal de Gendarmería y de los armamentos y municiones aparentemente enviado” y “que la acción penal que emerge de los hechos descriptos en mi anterior dictamen (la imputación a Macri y otros) abarca a los sucesos que ahora se revelarían con más detalle (y con apoyo en nuevos elementos)”.
La imputación del gendarme Caliba es clave. Tal como informó El Destape, fue quien firmó una nota donde queda en evidencia que la ex ministra Bullrich ordenó colaborar con la dictadura. La nota está fechada el 17 de noviembre de 2019, a una semana del golpe de Estado. El gendarme Caliba informó: “En el día de la fecha, suscripto participó de una reunión convocada por la nueva conducción de la Policía Boliviana; a la misma asistieron la totalidad de los agregados policiales. El motivo de la convocatoria fue planteado por el nuevo Subcomandante General y Jefe de Estado Mayor Policial Cnl. DESP. Claudio Zenobio Espinoza Luna”.
Luego detalló que “el tema a tratar fue la posibilidad de colaborar cada institución con la provisión de agentes químicos contra disturbios, en razón que se les está acabando su stock; o bien orientar sobre mecanismos idóneos para una rápida adquisición”. O sea, la Policía golpista les pedía ayuda para conseguir material represivo.
El siguiente párrafo del gendarme Caliba es clave: “Conforme orientación de la superioridad Institucional, esta instancia, dio a conocer que Gendarmería se encuentra en una etapa de gestión de adquisición de dichos elementos; asimismo se orientó que dicho pedido se plantee al Ministerio de Seguridad con intervención de la Embajada Argentina en Bolivia”. Estas lineas revelan que:
- Existía una “orientación de la superioridad institucional” para colaborar con la dictadura, lineamiento que solo puede emanar de Bullrich.
- Que Caliba informó a los golpistas que la Gendarmería argentina estaba en “etapa de gestión de adquisición” de esas armas.
- Que el mismo gendarme recomendó que hicieran el pedido de armas a Bullrich a través de la Embajada Argentina en Bolivia.
El rol de Caliba
Caliba era agregado de la Gendarmería en la embajada argentina en Bolivia y fue pasado a disponibilidad por la ministra de Seguridad Frederic en el marco de la investigación interna por el envío de armas del gobierno de Macri a los golpistas. Su apareció por primera vez plasmado como responsable del desembarco de las armas en la ampliación de denuncia que hizo el gobierno nacional este miércoles.
Además de la nota dirigida a Otero, un informe elaborado por el Agregado y Jefe de Misión de la Agregaduría de Defensa y Naval a la Embajada Argentina en Bolivia, el capitán Miguel Ángel Alonso, ubica a Caliba como el responsable de la recepción del armamento.
Según Alonso, en horas de la madrugada del 13 de noviembre de 2019, se encontraban presentes en el aeropuerto de La Paz el embajador Álvarez García, secretarios y el comandante Caliba, además de personal de la Embajada y familiares de diplomáticos “que serían evacuados”.
Cuando aterriza el Hércules C-130, “el mismo quedó durante todo el tiempo con los motores en marcha”, señaló Alonso. “Finalizado el desembarco del personal y equipamiento de la Gendarmería Nacional Argentina a cargo del Comandante (GN) Adolfo CALIBA, procedí a acompañar a los familiares (de diplomáticos) para su embarque” en el mismo avión en el que vino el escuadrón Alacrán, añadió el capitán.
Alonso dijo que estuvo con el embajador y secretarios y que tras la partida del avión subió a un "minimicro" con ellos. Aseguró: “En ningún momento tomé intervención en la recepción del personal de Gendarmería (Grupo Alacrán) ni el material ingresado. Dicha maniobra se encontraba a cargo del Comandante de Gendarmería acreditado en la Embajada Argentina en el Estado Plurinacional de Bolivia”, es decir, el Comandante de la Gendarmería Caliba.
En Bolivia también surgió el nombre de Caliba en las investigaciones internas que hay en curso.