El alto componente espiritual de su viaje -que unió Jerusalén con el Vaticano- no consiguió frenar al espíritu furioso del presidente Javier Milei, que siguió descargando su enojo contra gobernadores y diputados de la oposición dialoguista, acusándolos de las peores cosas luego del sonoro fracaso de la ley Omnibus. "Son la mugre de la política", les dijo el Presidente desde Roma, un día después de pedirle la renuncia a dos funcionarios vinculados a gobernadores. Ubicado por el oficialismo a la cabeza de la lista de "traidores", el cordobés Martín Llaryora sostuvo ayer que no era momento de responder agravios y adelantó que seguirían las tarifas diferenciadas de transporte público para los sectores con beneficios. "Córdoba nunca se arrodilló y tampoco lo hará ahora", lanzó. Los ataques oficiales no sólo sirvieron para unir a los mandatarios provinciales de las distintas fuerzas, sino también a los intendentes de las principales ciudades del interior: se reunirán este jueves para fortalecer su reclamo por el quite de subsidios al transporte y exigir que los atienda el ministro del Interior, Guillermo Francos.
Seguir la actividad de las redes de Milei es agotador porque es un permanente tuit y retuit de cuentas libertarias que practican la adulación presidencial con frenesí. Durante toda esta semana, eso estuvo combinado con un ataque permanente a todo aquel que se haya animado a votar en contra algún inciso de la ley Omnibus, junto con los gobernadores a los que supuestamente responden esos legisladores. De acuerdo a la enrevesada interpretación de Milei, pedir consenso para votar una ley es corrupción, porque eso habilita un "toma y daca". "Eso es 'viva la entrega de cargos a cambio de plata'", sostuvo en la entrevista con radio Mitre. Habló de diputados radicales y de gobernadores como Llaryora y el santafesino Maximiliano Pullaro.
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El primer acto concreto de la vendetta fue la eyección del titular de la Anses, Osvaldo Giordano -un schiarettista cordobés y pareja de la diputada Alejandra Torres-, y de la secretaria de Minería, Flavia Royón, ex funcionaria del gobernador de Salta, Gustavo Sáenz. Ambos mostraron su extrañeza por los motivos de sus despidos, totalmente ajenos a la gestión. "Yo no tengo injerencia con los diputados de Salta y si había un acuerdo con el gobernador, también lo desconozco", sostuvo Royón. Casi en simultáneo a esas salidas, Economía anunció el fin del Fondo Compensador del Interior que subsidiaba a las empresas transportistas de todo el país, una poda que puso a todos los gobernadores en alerta y los unificó en sus críticas a la Rosada. Aún a los del PRO, incluso al jefe de gobierno porteño Jorge Macri.
En la andanada imparable de ataques contra los gobernadores, Milei habló despectivamente hasta de los recitales en los que supuestamente gastan los recursos provinciales. En esa lista sumó el Cosquín Rock, que justamente se celebra este fin de semana en esa localidad cordobesa. Le salió a responder el empresario José Palazzo, que desde hace 24 años el evento es realizado "con entradas y marcas privadas", y que los artistas actuaban allí "en libertad". Desenfrenado, Milei tuiteó y retuiteó 147 mensajes durante su sábado romano.
Una de las particularidades de este conflicto es que Milei está más enojado con los gobernadores que se suponía cercanos y que funcionarían como sus aliados. Uno de los que se declaró sorprendido fue el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, de los primeros radicales luego de las PASO en expresar su apoyo al libertario en caso de un hipotético balotaje con Sergio Massa. Pullaro no podía creer la decisión tomada por Milei, que impacta en especial en las grandes ciudades como Rosario, que ya de por sí arrastra graves problemas de seguridad y sociales. Los gobernadores -que ganaron en sus provincias hace poco- mantienen una alta imagen positiva y entienden que el mayor costo político de esa suba abrupta del transporte lo pagará el Presidente. Milei consiguió porcentajes impactantes en ese interior que ahora tiene en la mira.
También hay gobernadores de fuerzas provinciales que cayeron en la picota pero, sin dudas, el Presidente ubicó a la cabeza de lista de indeseables a Llaryora. El gobernador cordobés decidió salir a responderle explicando que la provincia invertiría recursos propios para mantener las tarifas diferenciadas para estudiantes y docentes, jubilados y obreros. "La grandeza de nuestro país requiere de la mesura y la cordura de sus dirigentes. Me encontrarán siempre dispuesto al diálogo para la construcción de una Argentina democrática, federal y productiva", sostuvo Llaryora. Además, expresó su solidaridad con los reclamos de los demás gobernadores e intendentes. El es uno de los organizadores de la respuesta del interior.
Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo, se jactan de estar cumpliendo la promesa de que si la ley Omnibus no salía no quedaría otra que profundizar el ajuste fiscal y que la peor parte se la llevarían las provincias. "Redujimos el 98% el envío de los fondos", celebró el Presidente. Eso, obviamente, no sólo afecta el transporte sino que también pone en riesgo el normal inicio de las clases.
Esta semana se reunió el Consejo Federal de Educación que reúne a todos los ministros del país, donde emitieron un comunicado expresando su preocupación por la distribución de recursos nacionales. Estaba presente el secretario de Educación, Carlos Torrendell, quien les aseguró haber girado el pedido, pero que se trabó en otro lado de la administración. En el caso de la provincia de Buenos Aires, los recursos que debe enviarle Nación sólo en concepto de salarios es de 14.500 millones de pesos mensuales, explicó el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, en diálogo con El Destape Radio. El gobernador Axel Kicillof dijo que este mes lo había cubierto enteramente con fondos provinciales, pero que eso no podía sostenerse mucho más. Hay muchos otros rubros educativos en los que el Gobierno Nacional debe colaborar, según está estipulado.
A este conflicto que no deja de escalar, esta semana se sumarán los intendentes, que se sienten afectados directos por el fin del subsidio al transporte. "Esta medida no es contra los intendentes, es contra los millones de estudiantes, enfermeros, trabajadores que diariamente utilizan el transporte público para movilizarse", sostuvieron en un duro comunicado. El jueves próximo, a las 10, en la Casa de la Provincia de Córdoba, se reunirá la Red Federal de Intendentes con la idea de generar un hecho político, al que también convocarán legisladores y dirigentes gremiales y sociales. Como sucede con los gobernadores, la ofensiva de Milei borró las diferencias políticas y están todos unidos en el rechazo. No queda claro cómo podría afrontar tanta oposición un gobierno frágil luego de un traspié legislativo como el de esta semana.
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