El estilo de Javier Milei no deja de sorprender y hace dudar a los gobernadores acerca de qué respuesta deben elegir. El Presidente retornará al país este martes luego de su largo viaje al exterior en el que todos sus gestos estuvieron dirigidos a acrecentar la grieta con los mandatarios provinciales considerados "dialoguistas", que en realidad para Milei son traidores, delincuentes y la mugre de la política. No sólo el diálogo está cortado, sino que desde el Ministerio del Interior que encabeza Guillermo Francos aseguraron que por ahora no tienen previsto ningún encuentro que pueda dar la idea de un acercamiento de posiciones. En esta situación, algunos mandatarios provinciales evalúan la posibilidad de acudir a la Justicia, ya sea para reforzar algunas causas ya iniciadas y que están en manos de la Corte Suprema, o bien presenta una nueva denuncia contra el Ejecutivo nacional.
A esta altura ya es difícil saber qué tanto puede hacer Francos para recomponer el vínculo porque el ministro hace y el Presidente deshace a su antojo, como quedó expuesto durante las frustradas negociaciones por la ley ómnibus. "Los gobernadores están recibiendo todos los fondos que corresponden a la coparticipación de los impuestos que son coparticipables. Después hay otra serie de fondos que se han otorgado sin que sean de fondos coparticipables que están suspendidos porque no hay plata para pagarlos", respondió Francos en Roma en las entrevistas que dio a los periodistas que cubrieron el viaje. Entre esos fondos por fuera de los coparticipables están el Fondo Compensador del Interior y el Fondo de Incentivo Docente, que aportan a las tarifas del transporte público y al salario de los maestros, desprevenidas víctimas de la furia presidencial.
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Para más, de acuerdo a los integrantes del entorno presidencial, Milei salió de la reunión con el papa Francisco convencido de que consiguió luz verde vaticana para su plan económico de ajuste extremo, por lo que tendrá menos reparos todavía para su ofensiva contra los "animalitos de gastar", como calificó a los gobernadores el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala. "El Papa se mostró satisfecho por el programa económico y su contención social", aseguró el Presidente, según Infobae.
Con semejante aval, Milei siente fortalecidas sus espaldas para seguir pisando partidas a las provincias. Ya se jactó de haber reducido en un 98% los fondos discrecionales que se reparten al interior. "Hemos avisado que si no nos daban las herramientas, íbamos a recrudecer los ajustes y que esos ajustes iban a caer sobre las provincia", recordó el Presidente respecto a lo que se discutió previamente al fracaso de la ley Omnibus. "Yo tengo que afrontar un ajuste de 15 puntos del PBI y ellos, todos juntos, no pueden afrontar un ajuste de 1,5 puntos", comparó. Hay una discusión de cara a la opinión pública que Milei aspira a ganar.
Ante este panorama, los gobernadores evalúan cómo responder. Tienen un grupo de Whatsapp compartido, un dato que da cuenta que ante esta ofensiva las diferencias políticas quedaron en segundo plano. Los mandatarios más combativos -con filiación en Unión por la Patria como Axel Kicillof o Ricardo Quintela- promueven una respuesta común, que ponga de nuevo en escena la fragilidad política de un gobierno que insiste en no negociar nada, ni siquiera con quienes podrían considerarse ideológicamente más cercanos. Por el contrario, a los más cercanos son a quienes más ataca por "traidores" y a quienes les aplicó una sanción inmediata con el despido del peronista cordobés Osvaldo Giordano de la Anses y la salteña Flavia Royón de la secretaría de Minería.
Una primera respuesta conjunta, fruto de conversaciones surgida en este chat, fue el documento presentado en el Consejo Federal de Educación, donde los ministros de todo el país expresaron su preocupación por la falta de los fondos que la Nación debe girar a las provincias, que pone en duda el inicio de las clases. Kicillof, Quintela y demás gobernadores explicaron que afrontaron los sueldos de enero enteramente con fondos propios, pero que no podrían sostener esa situación en los próximos meses. En el caso de la provincia de Buenos Aires, se trata de 14.500 millones de pesos que debe girar la Nación, solo en concepto de pago de salarios. Hay otros fondos vinculados a educación -infraestructura, capacitación, tecnología- que tampoco están siendo atendidos.
"Estamos muy preocupados y expectantes que en esta semana se tome una definición que no es solamente financiera o administrativa, es una definición política", sostuvo el ministro de Educación de La Rioja, Ariel Martínez, en diálogo con El Destape Radio. El secretario de Educación, Carlos Torrendell, les mostró a los ministros los papeles que acreditaban que él había pedido los giros, pero que los fondos nunca salieron de Economía. Por eso la definición es política y esperan algún tipo de decisión de parte del Ejecutivo, que no da señales de modificar su posición, todo lo contrario.
También hubo declaraciones de los vicegobernadores y de los intendentes de las principales ciudades del país, que se reunirán este jueves. Los jefes comunales de ciudades como Rosario, Córdoba o Mendoza se sienten damnificados directos por el aumento de la tarifa del transporte urbano. Tanto protestaron para tener algún tipo de fondo compensador que equipare los subsidios del AMBA, para que ahora se lo quitan de un plumazo. Por eso buscarán hacer una demostración de fuerza con la reunión, también más allá de las pertenencias políticas y de las diferencias de otros momentos.
Ante la indiferencia -incluso hostilidad- oficial, hay gobernadores que además evalúan una respuesta judicial. Córdoba y Santa Fe mantienen una controversia por la deuda por las cajas de jubilaciones, que incluso en algún momento especularon podría ser saldada previa a la liquidación del FGS de la Anses previsto en la ley Omnibus. Los equipos judiciales provinciales están estudiando la posibilidad de ampliar las causas que tienen iniciadas contra Nación o, incluso, plantear una nueva cautelar que impida el recorte al fondo compensador para el transporte. La controversia recién empieza y promete generar consecuencias variadas.