Tres mails que el Banco Provincia aportó a la Justicia comprometen al gobierno de María Eugenia Vidal en el caso de la reunión de la Gestapo antisindical. De los correos electrónicos se desprende que se dejó una zona liberada para que la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) pueda instalar las cámaras y micrófonos con los que se grabó el encuentro entre funcionarios bonaerenses, empresarios y espías que se realizó en la sede porteña de la entidad bancaria el 15 de junio de 2017. Los detalles de los mails, que forman parte de un sumario interno, exponen el rol que tuvo la dirección del banco en la operación.
“Me acaba de llamar Guillermo Squillari para reservar hoy y mañana el sum de 9 a 13 hs por indicación de Emilia Jaime. Viene gente de la Gobernación”, se lee en uno de los correos que ahora forma parte de la causa judicial en que se investiga una posible asociación ilícita entre funcionarios del gobierno de Vidal, empresarios y espías de la AFI para armarle causas a sindicalistas. Emilia Jaime era la secretaria privada de Juan Curutchet, presidente del Banco Provincia durante el macrismo. Curutchet fue designado por Vidal y había comenzado su gestión en el banco el 1º de enero de 2016. Dejó el cargo con la partida del macrismo del gobierno provincial.
El mail está fechado el 14 de junio de 2017. Es decir, que el banco por decisión de su dirección, estaba reservando para la gobernación la sala de la reunión de la Gestapo un día antes del evento. Con esa decisión se liberó la zona. Todo indica que ese mismo día, dos técnicos de la AFI fueron a ese SUM a instalar cuatro cámaras y un micrófono. El encuentro se realizó el 15 de junio de 2017. No tenía sentido reservar ese espacio el día previo.
Es más, tal como se desprende de los mails, había reservas del SUM para el desayuno y el almuerzo del miércoles que tuvieron que levantarse. Se tuvo que coordinar de apuro una nueva localización para esas reuniones.
En otro correo del mismo 14 de junio, la reserva se extiende: “Estimados, de acuerdo a lo conversado se extiende la reserva el jueves y viernes de 9 a 18 hs. Ambos días son para Emilia Jaime y necesitarán, según lo informado por Guillermo Squillari, agua y café”. El viernes era 16 de junio, y todo indica que ese día nuevamente dos técnicos de la AFI se dirigieron a la sede porteña del Banco Provincia para desinstalar el “cableado” que habían realizado dos días antes para poder grabar la reunión que ahora se investiga en la Justicia.
En otro correo de la secuencia que el Banco Provincia aportó a la investigación se había pedido el SUM por indicación de la asesora de Curcuhet únicamente para el jueves, de 9 a 13, “con servicio de Café para 12 personas”. Pero luego, tal como se desprende de los correos, se agregaron dos días más de reserva. Y finalmente, en el encuentro hubo al menos 15 personas, contando a dos ministros y un viceministro de Vidal, un intendente y un senador provincial de Cambiemos, empresarios y tres espías de la AFI. No hubo registro del ingreso a la entidad, lo que es impensado en un banco donde además tenía sus oficinas la gobernadora bonaerense. Es decir, el ingreso irregular tuvo el aval de autoridades. Lo mismo sucedió con los técnicos de la AFI que instalaron y luego desinstalaron las cámaras y los micrófonos.
Los mails que se aportaron a la Justicia surgieron de una investigación interna del Banco Provincia, tal como se desprende de la presentación que realizó este martes el presidente de la entidad, Juan Cuattromo, ante el juzgado que comanda el magistrado Ernesto Kreplak. El sumario interno está en plena etapa investigativa.
Este mismo martes, el juez Kreplak cursó al Banco Provincia una nota para que se le brinden precisiones sobre los involucrados en la reserva del SUM donde se grabó la reunión del escándalo.