En una coalición con tensiones internas frecuentes, el escándalo derivado de la declaración de la ex secretaria de Gerardo Milman acerca de que sus celulares habían sido vaciados por un perito en las oficinas de la entonces presidenta del PRO, Patricia Bullrich, sirvió para mostrar al Frente de Todos cerrando filas detrás de la vicepresidenta Cristina Kirchner. "Que en el despacho de una dirigente como Bullrich se cite a una persona para pedirle el teléfono y borrarle el contenido por temor a que ese contenido pueda verse en la justicia me parece algo vergonzoso. Con todas las letras. En términos institucionales, imperdonable", remarcó el presidente Alberto Fernández. El jefe de Gabinete, Agustín Rossi, consideró "gravísimas" las revelaciones en un diálogo en el que, por otro lado, confirmó los canales de diálogo interno abiertos para consensuar reglas de convivencia y la organización de las PASO.
Alberto viajó a La Rioja para presentar obras junto al ministro Gabriel Katopodis y compartió escenario junto al gobernador Ricardo Quintela, el ganador del peronismo en las elecciones del domingo. Dos veces se refirió durante la conferencia de prensa conjunta al episodio. Con todo, aclaró que "no soy yo quien tiene que hablar mucho de eso, quien tiene que hablar se llama Patricia Bullrich y Milman, que son quienes indujeron a esa empleada a hacer lo que hizo". "Valoro mucho el gesto de esa empleada, que sintiendo que podía correr riesgo, se animó a decir la verdad. Con esa verdad podemos saber como se mueven algunos de los que tenemos que enfrentar", concluyó.
Rossi fue incluso un poco más allá. "Bueno, ahora entendemos porqué la ex presidenta del principal partido de la oposición no condenó el intento de magnicidio contra la vicepresidenta", apuntó. También se pronunció la presidenta de la Cámra de Diputados, Cecilia Moreau, cercana al ministro de Economía, Sergio Massa. "Es muy peligroso que siendo candidata a presidenta en 40 años de democracia sea cómplice de un hecho tan grave como este que rompió el pacto democrático que se había constituido en Argentina", remarcó. También planteó como "sospechoso" que Bullrich nunca hubiera repudiado un hecho tan grave como el ataque a la vice.
Temprano, Cristina había marcado la solidaridad que había recibido de parte del diputado del PT brasileño Alencar Santana, escandalizado por la información aparecida en la tapa del diario Página 12. La vicepresidenta subrayó que eso no lo había expresado "nadie" de Argentina y que le resultaba llamativa la naturalización de la violencia ejercida sobre su persona. "En 8 meses de ¿investigación? la jueza Capuchetti, empleada de Larreta, dejó que se borrara más prueba que la que pudo producir. Por inhabilidad y por encubrir a Caputo y Bullrich, demostró que no puede seguir a cargo de la causa por el intento de magnicidio contra Cristina Fernández de Kirchner", afirmó luego el ministro de Justicia, Martín Soria.
Este alineamiento detrás de la vicepresidenta se dio en una jornada en la que también se habló en público sobre los diálogos internos en marcha en pos de una competencia en las primarias. "Veo en las PASO una buena forma de resolver una discusión interna", sostuvo el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, quien además se presenta como posible postulante presidencial por el lado del kirchnerismo. En diálogo con El Destape Radio planteó un modelo de toma de decisiones en favor de los que menos tienen, inspirado en lo realizado durante las presidencias de Néstor y Cristina Kirchner. "Es un modelo que funciona", sostuvo Wado, ya posicionándose como candidato. Hasta hace poco, en el kirchnerismo sostenían que las candidaturas las debía resolver la vice, dado el liderazgo político que mantiene en el Frente.
Unos minutos después, también en El Destape Radio, Agustín Rossi reconoció diálogos tendientes a delinear lo que denomina un "código de convivencia" para atravesar con éxito la competencia, sin golpes bajo ni descalificaciones personales. "Si no hay un candidato que sintetice todo, que surja el que sea más votado en una primaria. Mi tarea es mantener unido al peronismo, garantizar transparencia y respetar lo que la gente diga", aportó Alberto desde La Rioja. Que el candidato del Frente de Todos salga de las PASO es considerado por el Presidente casi un logro personal.
Estas coincidencias recientes respecto a que el candidato debe salir de las PASO hizo pensar a muchos en la posibilidad de un encuentro entre Alberto, Cristina y Massa para terminar de ordenar al oficialismo de cara a las elecciones. Lo planteó días atrás Katopodis y lo reiteraron dirigentes como la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz. “Falta todavía una reunión entre el Presidente y la vicepresidenta, que fueron quienes nos llevaron al triunfo de 2019, para poder establecer las reglas de juego”, sostuvo. Sin embargo, este lunes, el gobernador Axel Kicillof lo desestimó. "No sé si ésa es la reunión que hace falta", respondió ante una consulta. El gobernador es uno de los más insistentes sobre la posibilidad de que Cristina sea finalmente la candidata del Frente de Todos. De lo contrario, reconoció ayer, mantiene latente la posibilidad de desdoblar la elección en la Provincia. "Estamos hablándolo con todos los sectores", comentó.