Sergio Massa relanza este viernes y sábado la campaña de Unión por la Patria en Tucumán con los gobernadores, la CGT, legisladores y candidatos del oficialismo, incluyendo a Máximo Kirchner, con el objetivo de asegurarse un lugar en el ballotage. Las últimas encuestas muestran que estaría consiguiendo esa finalidad, con Massa y Javier Milei subiendo unos puntos y Patrricia Bullrich no pudiendo retener a los votantes de Juntos por el Cambio en las PASO. "La idea es poner en marcha la campaña en todo el norte", explicó anoche Massa el plan que apunta a juntar muchos más votos en provincias donde habitualmente gana el peronismo y en las que en agosto Milei consiguió porcentajes llamativos. "Las PASO te entiendo, ahora ponete las pilas", contó el candidato que les dijo a los gobernadores con los que estuvo hablando. "Todos sabemos lo que se juega", cerró.
La primera actividad será por la tarde en la gobernación de Tucumán donde, en su rol de ministro, firmará convenios con los gobernadores del Norte Grande, incluyendo la eliminación de retenciones a productos regionales como el tabaco. Massa anoche estuvo en la TV Pública y contó que el gobernador de Jujuy y presidente de la UCR, Gerardo Morales, lo llamó para felicitarlo por la medida. Los diez gobernadores del Norte Grande, incluyendo los dos radicales que integran el grupo, se reunirán la semana que viene para emitir un documento en rechazo a las propuestas de Milei como, por ejemplo, la eliminación de la coparticipación federal. En muchas de esas provincias ganó el candidato de La Libertad Avanza y los mandatarios provinciales quieren ser explícitos en los perjuicios que podría acarrear su propuesta para sus comprovincianos.
Massa reveló que esta semana tuvieron una larga reunión en el comando de campaña de la que participaron Máximo, el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, y su esposa y titular de Aysa, Malena Galmarini, incorporada al equipo luego de las PASO. "No miremos más para arriba. Hagámonos cargo de lo que hacemos y vamos para adelante", fue lo que concluyeron, en referencia a que no debían esperar a ver si la vicepresidenta Cristina Kirchner participara o no de los actos. Coincidió con aquello que planteó el gobernador Axel Kicillof acerca de la "nueva canción" que debía tocarse, en referencia a que debían hablar más de futuro que del pasado kirchnerista. "Sin nostalgia pero con aprendizaje, hablando del futuro", insistió Massa, que dijo estar seguro de que Unión por la Patria entrará en el ballotage.
Para que ese plan se haga realidad, será indispensable un trabajo más intenso de las estructuras provinciales. El ministro marcó que en aquellos distritos en los que el 13 de agosto estuvieron en juego las autoridades locales -CABA, provincia de Buenos Aires, Catamarca y Entre Ríos- Milei no ganó y obtuvo porcentajes inferiores al del resto de las provincias. La conclusión fue que cuando las estructuras provinciales ponen cosas en juego, militan con otra intensidad y los resultados se notan.
Ahora los gobernadores también tendrán que defender su representación en el Congreso, dado que en octubre se eligen senadores y diputados. El sábado a la mañana, en Tucumán, se reunirá con gobernadores, intendentes, legisladores y candidatos provinciales. Pasado el mediodía será el acto que se espera multitdinario en el Hipódromo tucumano, con el gobernador Juan Manzur como anfitrión. Manzur es otra incorporación del equipo de UP: tendrá a su cargo todo lo referente a la campaña en el norte del país. En esta idea de poner todo, el riojano Ricardo Quintela confirmó su idea de renunciar a la gobernación en caso de que Milei sea electo presidente, dado el ajuste que se vería obligado a llevar adelante.
Un dato político será la reaparición de Máximo, quien no había vuelto a las actividades de campaña luego de que se lo viera el búnker de UP el domingo de las primarias. El faltazo daba pie para que corrieran rumores sobre diferencias internas, pese a que en el entorno de Massa aseguraban que la relación era la misma de siempre y que el díalogo tanto con Cristina como con Máximo era cotidiano. La vuelta a los escenarios del diputado y líder de La Cámpora servirá para disipar esas versiones y mostrar a todos los sectores de Unión por la Patria poniendo el hombro para conseguir el mejor resultado en octubre.
Una encuesta difundida por la consultora Analogías mostró pocas variantes respecto a las primarias, con Milei subiendo dos puntos y Massa uno, posicionándose para competir en el ballotage. El dato más relevante seguramente fue la confirmación que Bullrich no retiene el votante de Horacio Rodríguez Larreta en las PASO, que mayoritariamente se mostró indeciso.
En el desglose del voto por edad, género y nivel educativo, vuelve a resultar significativo el voto del joven masculino a Milei. El candidato libertario es mucho más fuerte entre los electores menores de 44 años mientras que Massa prevalece entre los votantes de 45 años para arriba. Hasta hace unos años, el voto joven era cautivo del kirchnerismo.
Massa volvió a hablar anoche de la necesidad de impulsar un gobierno de unidad nacional, aunque aclaró que no lo piensa en término de acuerdos partidarios, dado que eso entraría en la lógica de "casta" que denuncia Milei. "Tenemos que hablarles a los votantes, los acuerdos de partidos a veces son cosas oscuras", planteó. Aseguró que el agosto que acaba de concluir probablemente haya sido el peor mes de la economía de los últimos 25 años, culpa de la sequía y de las exigencias del acuerdo con el FMI, cuya renegociación le demandó cuatro meses de negociaciones. Seguramente, eso se verificará en el índice de inflación que se conocerá la semana próxima. "El Gobierno está en deuda y tenemos que pedir perdón. Porque si no tenemos la capacidad de pedir perdón, ¿quién nos va a creer para adelante?", remarcó.
Relacionó a Milei con el ex presidente Mauricio Macri, a quien dijo ver ahora jugando para el libertario a partir de las versiones de que algunos empresarios y banqueros de su confianza están recaudando para la campaña de La Libertad Avanza. Por eso dijo que había que extremar los esfuerzos para explicarle a la gente que con el modelo de Milei se volvería a la situación vivida en 2001, que dejó al país sumido en el caos y al borde de la disolución nacional. "Vamos a estar en segunda vuelta seguro y después vamos a ganar el ballotage", concluyó el candidato. A partir de esta noche, larga la campaña para conseguirlo.