"Ningún trabajador volverá a pagar Ganancias", celebró anoche el ministro de Economía y candidato a presidente de Unión por la Patria, Sergio Massa, en una sesión presidida por Cristina Kirchner, la aprobación de la eliminación del tributo para la llamada "cuarta categoría", por lo que ahora sólo lo seguirán pagando menos de cien mil personas entre ejecutivos de empresas, altos funcionarios y jubilados de privilegio. La iniciativa le representó a Massa la recuperación de la iniciativa política luego de las PASO mientras que para la oposición de Juntos por el Cambio se transformó en un dolor de cabeza, dado que nunca se pudo acomodar en el nuevo escenario. El candidato encabezará esta tarde una gran movilización que la CGT, la CTA y los movimientos sociales organizaron como modo de festejo a la sanción, junto al reconocimiento a todas las demás medidas de recomposición de los ingresos tomadas en los últimos días para hacer frente al pico inflacionario.
"El salario no es ganancia", fue el eslogan que instaló el oficialismo a lo largo del rápido tratamiento que tuvo el proyecto en el Congreso, de apenas dos semanas. Todo un logro en un Congreso que desde hace tiempo se caracterizó por la falta de acuerdos. "Hola, ¿qué tal? Tanto tiempo", ironizó la vicepresidenta al recibir a los senadores de la oposición que ingresaron al recinto luego de que el oficialismo consiguiera quórum con 38 legisladores. A los 31 de los bloques de Unión por la Patria se sumaron los cuatro peronistas disidentes y tres de fuerzas provinciales. Los mismos 38 que terminarían votando la iniciativa contra 27 de Juntos por el Cambio y la schiarettista Alejandra Vigo.
El argumento repetido por los representantes de la oposición fue que se trataba de una medida electoralista, inflacionaria y que desfinanciará a las provincias, dado que se trataba de un impuesto coparticipable. Otro de los argumentos fue que se trataba de una medida unilateral y que nadie los había consultado acerca de la conveniencia de aplicarla. Pero les resultó muy complicado convencer acerca de porqué algo que habían promovido una y otra vez -incluso fue una de las promesas incumplidas de la campaña de Mauricio Macri en 2015- ahora veían mal.
“Estoy absolutamente orgulloso de que mi amigo el ministro haya tomado esta decisión. No cualquiera toma esta decisión en el momento y las circunstancias que estamos viviendo”, sostuvo el senador y gobernador electo de Río Negro, Alberto Weretilneck, aliado del oficialismo. En el cierre, el jefe de la bancada del oficialismo, el formoseño José Mayans, se encargó de desbaratar los argumentos opositores. Por ejemplo, planteando que ellos se enojaban por no haber sido consultados antes del envío del proyecto cuando Macri tomó una deuda sideral con el FMI por decreto, lo mismo que la que "Messi" (en referencia al ex ministro Luis "Toto" Caputo. bautizado "el messi de las finanzas" por el entonces jefe de gabinete Marcos Peña) tomó a 100 años. Y si hacían todo ese lío por un punto de coparticipación que se perderá sin Ganancias a los trabajadores, no quería pensar qué sucederá cuando Javier Milei la elimine de un plumazo como promete, algo que consideró inconstitucional.
Los sindicalistas Sergio Palazzo, Pablo Moyano, Paco Manrique y Omar Plaini festejaron en los palcos, desde donde surgió la marcha peronista, apenas concluida la votación. "Una victoria histórica de los trabajadores", celebró la CGT en un comunicado. "Esta CGT entiende este triunfo de los trabajadores como un punto de inflexión en nuestro país hacia una mejora real y significativa del poder adquisitivo, y en la misma senda va el proyecto de ley 'Compra sin IVA' que deseamos se apruebe rápidamente", concluyeron. Por tercera vez, la CGT volverá a movilizarse en respaldo a la eliminación de Ganancias. Lo hizo espontáneamente hacia el Ministerio de Economía el día que Massa firmó el decreto y luego acompañaron el tratamiento en la Cámara de Diputados. Hoy, a partir de las 14.30, se reunirán frente al Congreso.
Junto a los gremios de la central se movilizarán los de la CTA y las organizaciones sociales afines al oficialismo como el Movimiento Evita, Somos-Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa, que acompañaron con entusiasmo el proyecto pese a que representan sectores de menores ingresos. En la CGT se hablaba de una convocatoria de alrededor de 100 mil personas, seguramente la más masiva en lo que va de la campaña. Massa será el único orador, por lo que resultará un gran espaldarazo para su candidatura en momentos que los sondeos marcan un estancamiento de Milei y lento ascenso del ministro de Economía, que debe lidiar con variables siempre complicadas. El último índice de pobreza y el nuevo ascenso del dólar blue son nuevas alertas en el comando económico.
Desde hace unas semanas, Massa puso como eje de su mensaje la recuperación de los ingresos de los trabajadores y jubilados, un objetivo que pudo acompañar con medidas. Es lo que buscará mostrar en el acto en Congreso y también trasladarlo al primer debate presidencial que se realizará el domingo en Santiago del Estero. En su entorno marcaban que allí deberá confrontar las ideas de Milei pero sin caer en las críticas personales, con la idea de que sus potenciales votantes tampoco se sientan atacados. Su postura es del diálogo con todos y la conformación de un gobierno de unidad nacional. En su equipo entienden que, por lejos, es el candidato más formado para la presidencia y que eso quedará claro durante la discusión.