Juntos por el Cambio quiere extender su alcance nacional y pasar, en el mejor de los casos, de gobernar cuatro distritos a hacerlo en medio país a partir de las elecciones 2023. El listado de las provincias "peleables", siempre con distintos niveles de probabilidades, es muy extenso e incluye a Buenos Aires, donde quedaron envalentonados con el resultado electoral del año pasado aunque, por lo bajo, algunos descrean de una victoria en ese territorio. Los candidatos para cada uno de los distritos, algunos ya elegidos y en campaña, no serán puestos por uno u otro bando, sino por las encuestas. El que mejor esté, el que más chances tenga, será el que encabece la lista.
En el listado de provincias a las que apuesta la oposición, además de las actuales Capital Federal, Corrientes, Mendoza y Jujuy, hay diez regiones, tanto en el sur como en el centro, noroeste y noreste del país. En la nómina aparecen la citada Buenos Aires, hoy gobernada por el Frente de Todos; Entre Ríos, donde comanda el PJ; San Luis actualmente por el Frente de Todos al igual que La Pampa. También aspiran a conquistar Córdoba, bajo el mando del Schiarettismo; San Juan que está con el actual oficialismo al igual que Santa Cruz. Finalmente, aparecen Salta, Misiones y Chubut.
La lista no implica, sin embargo, una certeza de victoria. Son distritos a los que la oposición decidió prestarle atención para, apostando fuerte, intentar ganar en algunos. Los comicios del 2021 hicieron crecer las aspiraciones de Juntos por el Cambio, que cree que puede disputar 14 provincias de 24, o sea una más de las ganadas en las legislativas del año pasado. Claramente, no hay posibilidad alguna de comparar una elección de medio término con una del Ejecutiva, pero evidentemente están pensando en un mapa similar.
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A la titularidad en la CABA, que todavía no tiene un candidato definido para suceder a Horacio Rodríguez Larreta, el PRO tiene la intención de sumar tres provincias tan fuertes como difíciles. Buenos Aires está en la lista de lugares complejos pero ganables después del resultado del año pasado. Sin embargo, alguien con conocimiento del conurbano dijo no creer en una imposición cambiemita en el distrito más populoso del país, pero en el armado de campaña la consideran una posibilidad con Diego Santilli a la cabeza.
Resistido por los intendentes que querrán imponer su propio candidato en tierras bonaerenses, el del "colorado" sigue siendo, de momento, el nombre puesto por el PRO para disputar esa provincia. En el bolillero están, además, el ministro de Larreta Jorge Macri, el diputado Cristian Ritondo, una señal de Patricia Bullrich en favor de una postulación local, Martín Tetaz por el radicalismo de Lousteau y una cara a definir por la conducción de la UCR.
El 2023 pareciera perfilar un escenario de elecciones con nombres que disputaron los comicios del año pasado, aunque legislativos. O sea, fueron elegidos en 2021 para ocupar una banca en el Congreso y podrían lanzarse a la carrera por el Ejecutivo pocos meses después. Tal es el caso de Rogelio Frigerio en la provincia de Entre Ríos. El diputado formó parte de un encuentro, que algunos llamaron "anti grieta", junto a Gerardo Morales, Juan Schiaretti, Emilio Monzó, Florencio Randazo, Graciela Camaño, el ex gobernador chaqueño Ángel Rozas y el intendente de Rosario, Pablo Javkin. El espacio, trascendió, es de reflexión, política y diálogo dentro del amplio concepto de la ampliación.
Chubut, en tanto, se encamina a llevar a Ignacio Torres, actual senador del PRO, al frente de la boleta amarilla. Hombre de Larreta, el actual legislador juega para sí mismo y, en plena construcción hacia las urnas, intenta quedar bien con todos. Esto es, Patricia Bullrich, el jefe de Gobierno y María Eugenia Vidal, con quien estuvo hace unas semanas en esa provincia del sur.
En Córdoba, la alianza sondea a Luis Juez como el posible candidato a gobernador en 2023 para desbancar al Schiarettismo. Figura fundamental del Frente Cívico, el acercamiento a él por parte de la dirigencia del PRO molestó a algunos referentes del interior que comenzaron a ver el impulso de un nombre ajeno al partido. Algo así como un abandono del macrismo por parte del macrismo. Ya hubo reuniones varias con Juez y todavía no está cerrada su postulación pero "podría ser".
Claudio Poggi, en tanto, fue el señalado como el candidato para disputar San Luis. Electo diputado en 2021, fue uno de los destacados por Mauricio Macri por el resultado obtenido en esa provincia. A fines del año pasado, después de la amarga victoria de Vidal, el ex presidente se reunió con legisladores del PRO y criticó que todos tendrían que haberse capacitado y mejorado para enfrentar las urnas, algo que entendió que no hizo ninguno, salvo Poggi.
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En San Juan, el diputado Marcelo Orrego también surge como una posible alternativa para disputar la conducción de la provincia. Hace dos semanas y parte de su gira nacional para intentar rearmar su círculo político de confianza, María Eugenia Vidal viajó hacia aquel distrito cuyano. Según el macrismo, en Salta y La Pampa también ganarían ellos por sobre un radicalismo que buscará disputar internas en todos los lugares donde sea posible. Actualmente, la ecuación interna le da negativo al partido amarillo con sólo un distrito bajo su sello frente a tres de la UCR.
Así, una fuente al tanto del armado opositor barajó que el radicalismo podría ampliar su radio de influencia y llegar a Santa Fe, Chubut, Santa Cruz y Misiones. Nuevamente, provincias a las que apuestan pero no necesariamente provincias en las que gane Juntos por el Cambio. Estas posibilidades se sumarían a los actuales distritos rojos, como Jujuy con Gerardo Morales, Corrientes con Gustavo Valdés y Mendoza con Rodolfo Suárez que podría ser reemplazado por Alfredo Cornejo en los comicios, aunque lo desmienten momentáneamente desde el círculo íntimo del senador. Por ahora, pareciera ser un deseo de la conducción partidaria, el otro sector dentro del mundo radical.
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