La jueza Marta Cirulli envió exhortos a Austria y Alemania para pedir información sobre el Meinl Bank, el principal acreedor privado de Correo Argentino, que prestó conformidad a la propuesta de pago que hizo la familia Macri pese a que está en bancarrota. Lo hizo a partir de un pedido de la fiscala Gabriela Boquin, que reclamó que se investigue el acuerdo entre los Macri y el Meinl Bank.
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La fiscala Boquin llamó varias veces la atención sobre el caso del Meinl Bank. Este banco de origen austríaco adquirió en 2007 las acreencias que tenían el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Corporación Financiera Internacional (CFI) con los Macri. En el caso del BID eran 62 millones de dólares, en el de la CFI casi 58 millones de dólares. Lo insólito es que el Meinl Bank adquirió deudas en dólares pero aceptó fijarlas al tipo de cambio del 31 de diciembre de 2013, cuando el dólares estaba a 6,5 pesos. Eso dio una deuda de los Macri con el Meinl Bank de 765 millones de pesos.
El Meinl Bank luego dio su conformidad a las distintas propuestas de pago que hicieron los Macri, que implicaban quitas superiores al 90%, la última del 98,82% hecha durante el gobierno de Mauricio Macri. Aún con la deuda anclada en 2013 era el principal acreedor privado de Correo: representan el 38% de la categoría C de acreedores.
¿Qué negocio hacía el Meinl Bank al comprar deudas en dólares, pasarla a pesos y luego aceptar quitas abusivas? El corolario de esta maniobra turbia es que el Meinl Bank está en quiebra y, por ende, ni siquiera tenía la potestad de aceptar las propuestas de los Macri. Eso es lo que ahora investiga la Justicia argentina y por lo que la jueza Cirulli envió los exhortos.
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A esto se suma que el diario La Nación publicó una operatoria por la cuál Franco Macri creó la sociedad Mervet Establishment en Liechtenstein desde la cuál “firmó un acuerdo con el Meinl Bank (…) que estableció que el banco adquiría las demandas de varios acreedores del Correo Argentino”. O sea que el Meinl Bank compró deudas de los Macri en acuerdo con los Macri y luego aceptaba propuestas de pago que eran abusivas, lo que perjudicaba además a los demás acreedores.
“Ha sido cuestionada la validez del voto favorable dado por Meinl Bank Aktiengesellschaft (hoy Anglo Austrian AAB Bank AF, actualmente en situación de quiebra), en calidad de cesionario de los créditos verificados en favor del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y de la Corporación Financiera Internacional (CFI)”, escribió la jueza Cirulli cuando decretó la quiebra de Correo Argentino (quiebra que ella misma luego suspendió). Agregó que “dicha acreencia, originariamente expresada en dólares estadounidenses, y constitutiva del mayor de los créditos verificados con rango quirografario, resultó convertida en moneda de curso legal al tipo de cambio vigente al 31.12.2013, llegando a la suma de $ 765.348.560, todo lo cual derivaría de un supuesto acuerdo transaccional celebrado entre el Banco extranjero y la concursada” pero que “no existe constancia en la causa del acuerdo invocado por la concursada”.
En el exhorto enviado a Alemania la jueza Cirulli pide al Banco Central Europeo que le envíe “los antecedentes del retiro de la licencia al Meinl Bank”. “El objeto de la medida es determinar la legitimidad de la conformidad dada por el Banco de referencia, a una de las propuestas de acuerdo preventivo ofrecidas por Correo Argentino SA, en tanto la Fiscal General de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial pidió la investigación de una presunta maniobra delictiva tendiente a burlar los derechos de los restantes acreedores”, dice el exhorto en relación a la investigación de la fiscala Boquin. Agrega que se investiga si el Meinl Bank y los Macri “podrían haber celebrado un acuerdo carente de validez y constitutivo de delito”.
En el exhorto a Austria la jueza le pide al Tribunal de Comercio de Viena, a la Autoridad del Mercado Financiero y a varios abogados que manejan fideicomisos vinculados al Meinl Bank que le envíen también los antecedentes del retiro de la licencia del banco.