Alberto Fernández tendrá mañana en Roma su primera reunión con la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, según pudo confirmar El Destape con altas fuentes de la comitiva que acompaña al presidente en su gira por Europa. Aunque falta la confirmación oficial, que llegará cuando puedan coordinar sus agendas, el encuentro posiblemente se concretará en la mañana, antes de que la búlgara protagonice el seminario “Sueño con un mejor reinicio” donde se discutirán nuevas condiciones para el sistema financiero internacional. Desde el organismo también ratificaron la cita.
El cara a cara tendrá lugar en las últimas horas de una gira en la que Fernández obtuvo el apoyo contundente de Portugal, España, Francia e Italia para renegociar las obligaciones argentinas ante los organismos multilaterales de crédito y modificar algunas de las reglas de juego que perjudican a los países de ingresos medios, que concentran más del 60 por ciento de la pobreza mundial. El ministro de Economía, Martín Guzmán, en tanto, tuvo hoy una segunda reunión técnica con la encargada para el Hemisferio Occidental del FMI, Julie Koszak, con quien ya conversó en la noche del miércoles.
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Fernández también obtuvo esta mañana el apoyo del papa Francisco, que lo recibió en una audiencia privada en el aula Paulo VI del Palacio Apostólico, en el Vaticano. El interés del Pontífice por la cuestión de la deuda argentina tiene dos aristas: por un lado, su preocupación por la situación del país en el que nació y vivió la mayor parte de su vida, por el otro porque lo considera un caso testigo y una oportunidad para plantear una nueva arquitectura financiera internacional. “Es lógico que cuando se habla de deuda externa, se hable de Argentina, pero el Papa tiene una mirada global”, explicaban en el gobierno.
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Durante el encuentro también hablaron de la situación política en la Argentina y América Latina y sobre los efectos devastadores de la pandemia y la necesidad de que las vacunas lleguen a todo el mundo, incluyendo los países más pobres. Después de ver a Francisco, Fernández también mantuvo una charla con el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin y su “canciller”, Paul Richard Gallagher, donde “se agradeció las buenas relaciones bilaterales existentes y la intención de seguir desarrollando la colaboración en sectores de interés mutuo”, según informó la Santa Sede.
Hubo también tiempo para los saludos de rigor a la comitiva que acompañó al Presidente y el tradicional intercambio de regalos. Entre otras cosas, Fernández le llevó hostias de la cocina para jóvenes recuperados de las adicciones que Francisco organizó en la villa 31 cuando era Arzobispo de Buenos Aires. El pontífice, le dio una copia de su última encíclica, Fratelli tutti, en la que, como curiosidad, hay argentino citado en la bibliografía: el corresponsal de Telam en Vaticano, Hernan Reyes Alcaide, que en 2017 publicó un libro de entrevistas con el Papa dedicado a América Latina.
Despúes de la cita vaticana, Fernández almorzó con el presidente italiano Sergio Matarella, y luego mantuvo un encuentro de trabajo con el primer ministro Mario Draghi, un técnico que encabeza un gobierno de unidad desde enero de este año y que antes fue titular del Banco Central Europeo. Aunque en esta ocasión no hubo declaraciones públicas de los mandatarios, en la comitiva argentina aseguraron que dieron un apoyo “super categórico” a las posiciones argentinas ante el FMI y el Club de París, como el que ya se había cosechado en Portugal, España e Italia.
Draghi, que será el anfitrión de la próxima cumbre del G20, en noviembre en esta ciudad, no solamente comprometió su apoyo en esas negociaciones sino que también le ofreció a Fernández llevar a ese foro los cambios en las reglas de juego de los organismos internacionales que viene propulsando el argentino: eliminación de las sobretasas a países con alto nivel de deuda, distribución de los nuevos fondos de la cartera hacia los países más afectados por la pandemia e incluso la extensión de los plazos de devolución de la deuda más allá de los diez años en un acuerdo con el FMI.
En la tarde romana, Fernández finalmente agregó una cita a la ajetreada agenda: se trata del director gerente de operaciones (virtual número dos) del Banco Mundial, Axel van Trotsenburg, que también se encuentra en la ciudad para participar del seminario vaticano y solicitó una cita con el presidente argentino. Van Trotsenburg ocupa el cargo que tenía Georgieva antes de asumir en el FMI, es el principal responsable de los créditos que otorga el BM.
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