El presidente Alberto Fernández adelantó que utilizarán las fuerzas de seguridad para evitar la aglomeración de personas en ciudades para evitar que continúen los contagios y muertes por el coronavirus. El jefe de Estado informó que harán un seguimiento semanal junto al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
"Si el relajamiento sigue, vamos a ver de qué modo las fuerzas de seguridad empiezan a actuar en las calles para disipar a la gente e impedir que esas aglomeraciones ocurran", sostuvo Alberto Fernández. El Presidente criticó que en la Argentina haya un relajamiento en los protocolos de seguridad sanitaria que llevaron a una suba de contagios.
El jefe de Estado sostuvo que no utilizará fuerzas especiales para disipar las reuniones sino aumentar la presencia policial en las calles para persuadir a las personas a que vuelvan a sus domicilios.
Fernández explicó que seguirán de cerca la evolución de los contagios de coronavirus para evaluar cuáles decisiones van a tomar. "El virus viaja en avión, tenemos que estar muy atentos en quién dejamos entrar a la Argentina", manifestó el presidente en una entrevista en Radio 10.
10 millones de vacunados en febrero
El presidente adelantó que la vacunación contra el coronavirus continuará en enero y que en febrero lograran vacunas a 10 millones de argentinos generando anticuerpos en un 25 por ciento de la población y achicando la posibilidad de circulación del virus.
"La producción de AstaZeneca está bastante escalada en la Argentina", explicó Alberto Fernández en referencia a la vacuna que se fabricará en la Argentina y lamentó que se ataque a la Sputnik V.
"Desde Pfizer han puesto tantas prevenciones para limitar su responsabilidad que me terminan exigiendo cosas que ninguna vacuna me ha exigido. Y resulta que esa vacuna es la más segura", afirmó.
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