La oposición tiene una oportunidad para empezar a marcarle la cancha al gobierno con una agenda poco deseada por el oficialismo. En principio, está garantizado el tratamiento de un nuevo indicador para establecer la movilidad jubilatoria, con opción de avanzar en el debate por el presupuesto universitario y el FONID o encaminar una nueva sesión, pronto, para abordar estos ítem. Este podio de órdenes del día fue establecido, con dos estrategias distintas, por la UCR y Unión por la Patria.
Los radicales se reunieron por Zoom para acordar el “intento” de aprobación de la movilidad jubilatoria y “poner fecha de sesión especial para educación”. No hubo, hasta el momento, acuerdo con UP para avanzar con un único proyecto que garantice un indicador objetivo para los jubilados y hay muchas dudas sobre lo que pueda suceder. La UCR quiere insistir con el dictamen propio que incluye aspectos que UP rechaza. Una opción es avanzar con la propuesta de Unión por la Patria con cambios, según detallaron dos fuentes centenarias. La otra opción es que se rechace y quede todo empantanado.
Los boina blanca quieren incorporar un artículo que permita la venta del Fondo de Garantía de Sustentabilidad para saldar las deudas que la Nación, mediante ANSES, tiene con las cajas provinciales, en un claro guiño a Córdoba. Esto no es aceptado por UP pero, más allá del punto en particular, hay muchas cuestiones en común entre ambas iniciativas. Por eso, la posibilidad de la nueva mayoría podría naufragar con rechazos cruzados, inhabilitando el tratamiento de los proyectos por un año.
“Nosotros vamos a la sesión que convocamos y a defender nuestro dictamen”, sostuvo una fuente centenaria. Se especulaba con que un sector de Hacemos Coalición Federal y Unión por la Patria colaboren con el quórum, el bloque peronista dará ese gesto y algunos boina blanca también estarían presentes para habilitar, tres horas más tarde, el cónclave pedido por UP, de hacerse. “No hay 14 sin 11”, sostuvo un legislador para graficar esta posible reciprocidad.
Si la sesión de las 11 de la mañana llegara a extenderse demasiado (se calculan seis horas), no habría lugar para la de las 14, pero desde UP quedarían habilitados para exponer a la UCR con el debate educativo. En la previa, se propuso ampliar el temario pero los radicales se opusieron e intentarán resolver la situación con un futuro pedido de sesión especial para estos tópicos puntuales.
El debate por las jubilaciones mostrará unida a la UCR, que tuvo diferencias muy fuertes en el último tiempo y que protagoniza un debate caliente en el Senado por la ley Bases. Facundo Manes, del sector más combativo con el gobierno, es uno de los impulsores de la movilidad por lo que se descuenta que van a estar todos presentes, sin fisuras. “Es prioritario el tema jubilaciones”, lanzó una fuente parlamentaria también interesada en la cuestión educativa.
La sesión seguramente esté atravesada por el escándalo protagonizado por la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, acusada de no repartir alimentos a comedores, investigada por sobresueldos y contrataciones irregulares. Si bien desde el bloque radical se sostuvo que no se está hablando sobre algún pedido para obligarla a ir al parlamento, una fuente parlamentaria no descartó que, de mínima, se pueda avanzar con un emplazamiento de comisiones para que tenga que brindar informes o, de máxima, su interpelación.
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Unión por la Patria avanzó, la semana pasada, que se aborden prontamente los proyectos que abordan la delicada situación de los comedores y exigió la presencia de la ministra para “explicar por qué se retienen alimentos que el Estado Nacional adquirió para que sean destinados a los sectores que más lo necesitan”, según detalló la diputada Cecilia Moreau.
En paralelo, un funcionario de Javier Milei le introdujo otro condimento a los idas y vueltas entre sectores de la oposición. Luis Petri sostuvo, en relación a sus vínculos con su coterráneo, el mendocino Alfredo Cornejo, que existe un trabajo para unificar, en una suerte de coalición electora, a La Libertad Avanza, el PRO o parte del PRO y un sector de la UCR. El gobernador de la provincia cuyana tuvo que salir a aclarar estos dichos y, en una conferencia de prensa junto al ministro de Defensa y su par de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguró que no es momento de mirar escenarios electorales futuros para no herir la sensibilidad de gran parte de la ciudadanía.
“Un cambio de régimen económico trae un momento de mucha zozobra, un incremento de la pobreza, pero que quienes apoyamos la orientación general de este gobierno lo hacemos porque sabemos que hay que hacer estos cambios”, sostuvo en conferencia de prensa. Sin embargo, se mostró consciente de que esas transformaciones van a dañar a distintos sectores económicos y sociales, por lo tanto, “estar planteando escenarios electorales, candidaturas con anticipación, es probable que hiera a los gobiernos que tenemos obligación de administrar”.
Si bien es sabido que ciertos sectores de estas tres fuerzas políticas no miran con malos ojos una unificación futura – cada uno con sus propias limitaciones -, por ahora ninguno se atrevió a hablar de reuniones o conversaciones formales para avanzar en esa alianza. “No existen”, dijo una fuente macrista al respecto.
Desde el ala dura del PRO, incluso se postergó en el tiempo la posibilidad de trabajar algo semejante. Se leyó, a diferencia de lo que plantea el gobierno públicamente, que no es momento de pensar algo semejante y que, tal vez, tampoco llegue el año que viene. Por ser elecciones legislativas, las alianzas serán más locales que nacionales por lo que probablemente haya excusas para poder consolidar las cercanías. Para eso, cada espacio político tendrá que definir su propia estrategia de alianzas electorales.
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