En plena sesión en el Senado, la presidenta de la cámara baja, Cristina Kirchner, se cruzó con el senador opositor Martín Lousteau por el tiempo que reclamaba la oposición para hablar en el recinto, algo que ya había sido aclarado por la vicepresidenta, pero que el legislador al parecer no comprendía.
“¿Qué quieren hacer? Le pregunto porque hubo muchas vueltas, primero pidieron una sesión especial, después no la querían. Le pido que nos expliquen qué quieren hacer”, le preguntó Kirchner al senador de Juntos por el Cambio. A lo cual, Lousteau respondió: “Con respecto a las sesiones especiales pedidas, la convocatoria estaba mal hecha o tenía un error o una trampa. Pediremos otra, en el momento oportuno”.
Acto seguido, prosiguió: “Con respecto del uso de la palabra, el dp8 y dp12, dice que el tiempo se asignará proporcionalmente y cada bloque distribuirá internamente cómo se utiliza. Vamos a utilizar el tiempo proporcional. Y hay otras cuestiones que en el reglamento no se están cumpliendo como el tiempo de la palabra en general”.
“Es exactamente lo que acabo de decir. Hay un problema cuando uno está pensando en lo que va a decir y no escucha”, arremetió Kirchner y subrayó: “El secretario dijo que se iban a retirar después de esto, por eso, pregunto si van a pedir autorización para ampliar, distribuimos los tiempos por bloque. tenemos que tratar varios temas de después”.
El bloque de Juntos por el Cambio contaba con 130 minutos para exponer en el recinto. Mientras la presidenta del Senado contaba el tiempo que tenía cada bloque, Lousteau reiteró: “Vamos a usar el tiempo que nos corresponde”. “¿Cuánto quiere? ¿10? ¿20?”, le preguntó el secretario al senador. Ante la aclaración de Lousteau de que iba a hablar menos de 20 minutos, Cristina disparó: “Esto es un delivery, usted lo quiere, usted lo pide, usted lo tiene”.