Intento de asesinato de CFK: comienza peritaje clave de celulares y fotografías

Esta semana empiezan a analizarse los celulares de la detenida Agustina Díaz y de los “copitos” Sergio Orozco, Leonardo Volpintesta y Lucas Acevedo. Hasta el momento los chats conocidos surgieron de los aparatos telefónicos de Brenda Uliarte y Gabriel Carrizo. Entre las otras medidas figura el estudio de una fotografía que puede dar cuenta de una tercera arma en poder de de Brenda.

26 de septiembre, 2022 | 21.20

Esta semana empiezan a realizarse peritajes clave para el devenir de la causa en que se investiga el intento de asesinato de CFK. Uno de los estudios centrales es el de los celulares de la detenida Agustina Díaz y de los “copitos” Sergio Orozco, Leonardo Volpintesta y Lucas Acevedo. Hasta el momento los chats que comprometieron a los cuatro detenidos que tiene el caso surgieron de los aparatos telefónicos de Brenda Uliarte y Gabriel Carrizo. Hay expectativa por los resultados que pueden arrojar estos análisis y otros sobre una fotografía que puede dar cuenta de una tercera arma en poder de Brenda Uliarte.

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A su vez, se espera que esta semana la Cámara Federal porteña resuelva si la causa en que se investiga a la agrupación Revolución Federal se debe unificar con la del atentado, como consideró el juez Marcelo Martínez de Giorgi, o debe seguir instruyéndose de forma autónoma como postuló la magistrada María Eugenia Capuchetti. Lo que resuelva la instancia revisora de Comodoro Py también marcará los próximos pasos de la investigación. Por lo pronto, esta pesquisa que hace foco en esa organización violenta y de claro perfil antiperonista continúa en el juzgado federal Nº 8, con secreto de sumario, a la espera de que se concreten una serie de medidas que requirió el fiscal Gerardo Pollicita.

La misma Cámara porteña realizará este martes una audiencia para discutir la excarcelación de Carrizo. Se espera que sean parte del encuentro, pautado para las 15, los abogados de la querella, Marcos Aldazábal y José Ubeira, y de la defensa, Gastón Marano, ex asesor de un senador PRO en la Comisión Bicameral de Inteligencia. Tras escuchar a las partes, los camaristas Mariano Llorens, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi –los tres nombrados por Macri, los últimos dos a dedo- deberán resolver. Difícilmente el jefe de los “copitos” sea excarcelado. Se encontraron muchos mensajes comprometedores en su celular.

Peritaje de 4 celulares clave

Según indicaron fuentes con acceso al expediente a El Destape, este lunes comenzaron a peritarse cuatro teléfonos celulares: el de la detenida Agustina Díaz y el de tres copitos, Orozco, Acevedo y Volpintesta. A la luz de lo determinante que fueron hasta ahora los chats que surgieron de los únicos dos aparatos telefónicos peritados, los de Brenda Uriarte y Gabriel Carrizo, hay mucha expectativa en torno a lo que pueda surgir del nuevo estudio. El peritaje de esos dos celulares provocó dos nuevas detenciones en la causa: la de Agustina Díaz y la del propio Carrizo, quien había declarado en a la causa como testigo. Ambos fueron indagados y esperan una definición de su situación procesal.

¿Por qué es importante el análisis de esos teléfonos? Orozco, Acevedo y Volpintesta son tres integrantes del supuesto emprendimiento de venta de copos de azúcar que comandaba Carrizo. Por ahora los tres jóvenes declararon como testigos en la causa. Los tres acompañaron a Brenda y Carrizo a la entrevista que dieron en Telefé el 2 de septiembre, al día siguiente del atentado contra CFK (también estaba Miguel Ángel Castro Riglos en el reportaje). Uno de los interrogantes que aún no se logró responder con precisión en la pesquisa es qué rol tuvieron en este caso el grupo de los “copitos”.

El rol de “Checho” Orozco, por ejemplo, puede ser de interés para la investigación. El joven aparece en uno de los móviles de Crónica en los que salieron Brenda y Sabag Montiel para criticar al Gobierno y fue el anfitrión de un encuentro que se hizo entre Brenda y los copitos pocas horas después del intento de magnicidio. A su vez, mantuvo un intercambio de mensajes tras el atentado con el ahora detenido Carrizo que acapararon la atención de los investigadores. Inmediatamente después del atentado, Carrizo difundió a través de su estado de Whatsapp una serie de chats con Orozco, donde se puede leer que “Checho” le cuenta que alguien lo va a estar vigilando. 

“Me va a tener vigilado”, le escribió Orozco. Todo indica que un tal “Marcelo” es quien lo estará mirando. También le contó que lo paró alguien cuando llegó a su casa. “Dice ser policía, es tipo encubierto y buscaba a alguien”, le añadió. Carrizo buscó tranquilizarlo: “No te hagas problema. Vos actuá normal”. Y le envía dos audios. Checho entonces lo consulta “cuánto tiempo más vamos a estar así. Yo ya me siento re arruinado”. En el mismo estado de Whastapp, Carrizo había escrito tres horas después del ataque: “¡Seguro el próximo sos vos Alberto! ¡Tené cuidado!”.

El teléfono de Díaz también puede sumar elementos de prueba al expediente. Brenda la tenía agendada como “Amor de mi vida”. Uliarte intercambió con su amiga diversos mensajes en los que le adelantó que iba a intentar matar a Cristina. Si bien Díaz intenta despegarse del caso, su defensa choca con parte de los mensajes que mantuvo con Brenda. “¿Por qué falló el tiro?”, “¿Cómo mandaste a este tarado?” y “Borrá todo”, son algunos de los chats que Agustina le envió a Uliarte. Podrían encuadrar un encubrimiento. Un dato relevante: todos los mensajes que se conocieron hasta ahora no habían sido borrado.

El primer teléfono secuestrado en esta investigación, el de Fernando Sabag Montiel, quedó en el centro de la escena porque el aparato se reseteó al momento en que salió de fábrica cuando estaba siendo manipulado por la Policía Federal. Se hará una pericia para volver a leer el chip y otra sobre la máquina (UFED) con las que se intentó analizar el celular.

¿Una tercera arma?

Entre los peritajes a realizarse se destaca uno sobre una fotografía de Brenda con una pistola que todo indica no es la Bersa calibre 32 que utilizó Sabag Montiel para atacar a CFK el 1 de septiembre pasado ni el 22 corto a la que hizo referencia Carrizo en una serie de chats que lo comprometieron. “Es una tercera pistola”, explicaron fuente allegadas a la investigación. No obstante, la imagen no es de buena calidad y no está claro si podrá determinarse con precisión de qué arma se trata. La imagen surge del teléfono de ella, a quien se puede ver con el arma.

Peritaje psicológico

Además de los análisis de los teléfonos y de la fotografía de Brenda con una posible tercera arma también comienzan las pericias psicológicas de los cuatro imputados. También es un peritaje importante para la pesquisa. Sobre todo, porque tal como quedó de manifiesto en la causa, apenas fue detenido Sabag Montiel hubo un informe médico legal de la Policía Federal que describió que el agresor poseía “asociación de ideas anormal, observándose disgregación del pensamiento moderado que vuelve el discurso confuso y poco inteligible”. “En el pensamiento predominan ideas de tipo delirante”, se resaltaba y presentaba a Sabag Montiel como inimputable. La magistrada avanzó el procesamiento porque un segundo informe médico, realizado por el Cuerpo Médico Forense de la Corte, corrigió esa línea inicial.

El segundo trabajo concluyó que el atacante de CFK “no presenta síntomas ni signos de alteraciones psicopatológicas que configuren un tipo de trastorno mental psicótico, orgánico, ni de déficit cognitivo” y que “desde el punto de vista médico legal y psicojurídico” las facultades mentales de Sabag Montiel “se encuentran conservadas y compensadas encuadrando dentro de las consideraciones del Art. 78 del CPPN con aptitud psíquica para prestar declaración indagatoria”. Por eso, Capuchetti le tomó declaración indagatoria y luego lo procesó.

Estos nuevos peritajes contarán con peritos del Cuerpo Médico Forense pero también con los de parte.

Quién investiga a Revolución Federal

La Cámara Federal porteña debe definir si la investigación en torno al violento grupo antiK Revolución Federal debe darse en la causa del atentado contra CFK o debe seguir por un carril separado. Se trata de una decisión de relevancia para el devenir de la pesquisa.

La controversia surgió porque el juez Marcelo Martínez de Giorgi y el fiscal Gerardo Pollicita que investigan una denuncia puntual contra este grupo liderado por Jonathan Morel y Leonardo Sosa consideraron que puede haber una relación estrecha entre los llamados a asesinar a CFK por parte de los referentes de Revolución Federal y la organización criminal que intentó matarla. Pero la jueza Capcuhetti rechazó esa posición. Le respondió a su colega que “los hechos denunciados se circunscriben a personas totalmente distintas y hasta el momento sin vinculación con aquellas que se encuentran imputadas” en la causa que ella comanda y donde interviene el fiscal Carlos Rívolo. Acto seguido le devolvió el expediente, que al cierre de esta nota seguía tramitando en lo de Martínez de Giorgi y bajo secreto de sumario.

Ante este conflicto de competencia, el camarista porteño Mariano Llorens –presidente de la instancia revisora de Comodoro Py- deberá definir si le da la razón a Capuchetti o a Martínez de Giorgi.

¿Qué se investiga en torno a Revolución Federal? El expediente a cargo del juez De Giorgi se inició por una denuncia que recibió el Departamento de Investigaciones Especiales de la Policía Federal, donde una persona alertó sobre las manifestaciones violentas y de odio y las amenazas que había en las redes sociales de Revolución Federal. La Policía Federal investigó el tema y se centró tanto en Revolución Federal como en Leonardo Sosa, uno de sus referentes.

Ante esto, el juez Martínez De Giorgi le consultó a su par Capuchetti si estaba investigando a Revolución Federal como parte de la organización delictiva que intentó asesinar a CFK. La respuesta fue negativa, pero sí le envió el informe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) donde dio cuenta de una conversación pública en la que Jonathan Morel, el otro líder del grupo, hablaba de asesinar no sólo a CFK sino también al presidente Alberto Fernández y a Máximo Kirchner.

¿Cuál es la relación entre Revolución Federal y el grupo de atacantes de CFK? El Destape la anticipó el 6 de septiembre, cuando publicó que Brenda Uliarte, por entonces investigada y hoy procesada por el intento de asesinato de CFK, estuvo el pasado 18 de agosto en una marcha con antorchas a la puerta de la Casa Rosada con el grupo Revolución Federal bajo la consigna “Van a correr todos”. El Destape accedió a un posteo de su cuenta de Instagram antes de que la borrara donde ella registró su participación.

Pollicita había resaltado en su dictamen la presencia de Uliarte en la marcha del 18A pero también se refirió a “otros sucesos que constituyen una escalada temporo-espacial de violencia desplegada desde la agrupación hacia funcionarios de la actual gestión del Poder Ejecutivo Nacional”. Citó los golpes de Gastón Guerra al auto donde iba Sergio Massa, las consignas “Al kirchnerismo, cárcel o bala” de Revolución Federal en las marchas como la que participó Uliarte, la detención de Sosa con una bomba molotov en las inmediaciones del departamento de CFK y los audios que aportó la AFI.

Para el fiscal Pollicita, se tiene que investigar al grupo Revolución Federal en la misma causa que el intento de asesinato de CFK “en tanto no podría descartarse el aporte de tal agrupación en el intento de homicidio de la actual Vicepresidente de la Nación, sea este la instigación de Brenda ULIARTE, su auxilio, cooperación o financiación”. Si bien de Giorgi coincidió, Capuchetti se mostró en desacuerdo. Por eso la causa sigue tramitándose en el juzgado 8 hasta que se manifieste la cámara porteña.

Entre el material que forma parte de la investigación que hace foco en Revolución Federal se destaca un informe confidencial de la Unidad de Información Financiera (UIF) respecto a un movimiento de dinero sospechoso en favor de Jonathan Morel, cofundador de la organización violenta. Se trata de una transferencia por 1.760.000 pesos de un fideicomiso que estaría vinculado a la familia Caputo.

Morel tiene una carpintería en Boulogne, partido de San Isidro, y aprendió el oficio por YouTube tal como surge de una entrevista. Según le dijo a la periodista Luciana Bertoia, de Pagina12, hizo trabajos de carpintería en un hotel en Neuquén y le facturó ese monto de dinero a un fideicomiso vinculado a la familia Caputo. El cofundador de Revolución Federal le dijo a ese diario haber intercambiado correos con Caputo Hermanos, una firma relacionada a los hermanos del exministro de Finanzas de Macri, Luis “Toto” Caputo.

Si la Cámara porteña considerase que las causas son conexas, ese expediente se acumularía al del atentado a CFK.

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