El juez federal Martín Bava le anunció a las partes que este viernes irá a la audiencia en la que la Cámara Federal de Mar del Plata empezará a definir su futuro en el caso del espionaje ilegal a los familiares de la tripulación del ARA San Juan. El tribunal revisor tratará la recusación del magistrado que planteó la defensa de Mauricio Macri. El expresidente busca apartarlo de la causa. Si tras la audiencia la cámara lo corre, todo lo que dispuso el juez desde que fue recusado podrá ser declarado nulo. Si lo respalda, será un duro revés para Macri, que acusa a Bava de parcial y prejuzgar.
“Iré a ejercer mi derecho a defensa”, le dijo el juez Bava a las partes al despedirse este jueves tras la última declaración testimonial que se realizó durante esta jornada en el juzgado federal de Dolores. La noticia sorprendió al abogado defensor de Macri, Pablo Lanusse, según aseguraron quienes estuvieron presentes cuando el magistrado informó su decisión de estar presente en la audiencia. Es que la presencia de un juez en este tipo de actos no es habitual.
Además de Lanusse, en la audiencia ante la Cámara Federal de Mar del Plata de este viernes también estarán los abogados que representan a las dos querellas del caso, Valeria Carreras y Luis Tagliapietra.
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¿Qué debe tratar el tribunal revisor? La segunda recusación de Bava que planteó el abogado de Macri. Lanusse cuestionó el accionar del juez en el tercer llamado a indagatoria del expresidente, el 28 de octubre pasado. Aquella indagatoria se terminó suspendiendo apenas se inició luego de que el letrado defensor pidiera que se releve del secreto al exjefe de Estado, algo que no había sido ordenado previamente por Bava. Lanusse lo acusa de parcialidad y prejuzgar y sostiene que el juez mintió en el acta que dio cuenta de aquella audiencia. En ese marco, la Cámara pidió la grabación de esa indagatoria.
A la hora de rechazar la recusación, Bava explicó que se lo estaba queriendo correr del caso por hacer lugar a lo que pedía la defensa y el fiscal del caso, Juan Pablo Curi.
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De hecho, apenas concluyó aquella fallida indagatoria, el juez Bava le pidió al presidente Alberto Fernández “que, de ser necesario, releve al imputado del deber de confidencialidad obrante en la ley 25.520”. El juez indicó que hacía su requerimiento “atento lo solicitado por la defensa del imputado Ing. Mauricio Macri y por el Sr. Fiscal Federal en el marco de la audiencia indagatoria del nombrado, la que debió suspenderse durante el curso de la misma a fin de no afectar el derecho de defensa y evitar futuros planteos nulificantes”. El jefe de Estado levantó el secreto de Estado de Macri a las pocas horas y Bava volvió a convocar al exmandatario para el 3 de noviembre. Finalmente, en aquella jornada se concretó la indagatoria. Pero Macri se negó a declarar y presentó un escrito en el que no hizo ninguna mención que ameritara un relevamiento del secreto, lo que reveló que todo fue una gran maniobra para ganar tiempo mientras intentaba llevar la causa a Comodoro Py. El exmandatario había realizado una presentación en los tribunales de Retiro el 19 de octubre, un día antes de su segundo llamado a indagatoria y su primera recusación contra Bava que fue rechazada por la cámara. Pretendía que desde Comodoro Py pidieran el caso a la justicia de Dolores.
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Otras dos testimoniales
Este jueves declararon otros dos testigos en la causa en que se investiga el espionaje a los familiares del ARA San Juan: el exjefe de la Casa Militar, José Luis Yofre, y el exjefe de la custodia presidencial, Alejandro Cecati. Ambos fueron pedidos por la defensa de Macri.
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“A Lanusse le salió mal la defensa. Los testigos de Casa Militar y Seguridad y Custodia fueron contundentes. No tenían la avanzada que referencian Macri y (Silvia) Majdalani”, aseguró la abogada Carreras en diálogo con El Destape.
Según pudo reconstruir este medio, Cecati como Yofre ratificaron que no recibían informes de la AFI del tipo que hay en el expediente, donde constan seguimientos con fotografías, infiltraciones y referencias a lo que familiares le plantearían a Macri en una reunión, por ejemplo.
De acuerdo a fuentes con acceso al expediente, Cecati explicó que recibía un informe de meteorología, de rutas de escape, de hospitales cercanos y eventualmente si había cerca un corte de ruta. Y lo recibía un día antes del evento que tenía el exmandatario. “Esto es diametralmente opuesto a lo sostenido por los imputados de que el trabajo de la AFI era una adelantada de los lugares a donde iba a ir el Presidente”, afirmó la abogada Carreras. “El comisario Cecati negó cualquier tipo de vínculo, informe o papel con la AFI”, añadió la letrada, lo que complica la estrategia defensiva de Macri.
La estrategia de Macri es sostener que las tareas de la AFI fueron en el marco de la estrategia de seguridad Presidencial. De hecho, la exSIDE tenía una dependencia, Avanzada Presidencial, como enlace con la Casa Militar. La razón de esta estrategia es que la prueba respecto al espionaje es contundente y no se puede negar. Por lo tanto, desde la defensa se le busca dar legitimidad.
En este contexto, se realizará la audiencia de este viernes ante la cámara de Mar del Plata. Entre otras cosas, Bava tiene pendiente de resolución la situación procesal del expresidente Macri, quien fue indagado el pasado 3 de noviembre, y de los exjefes de Contrainteligencia de la AFI, Diego Dalmau Pereyra y Martín Coste. La incógnita es si el juez tomará definiciones antes de que la Cámara se expida sobre futuro o esperará la resolución de la instancia revisora.
Apenas terminada la audiencia de este viernes, la cámara estará en condiciones de definir si mantiene a Bava en el caso o lo desplaza de la causa.