El presidente Alberto Fernández iniciará este martes su primera visita de Estado desde el inicio de la pandemia cuando viaje a Santiago de Chile para reunirse con Sebastián Piñera y firmar convenios bilaterales. Fernández le dará a la visita de dos días varios toques personales. Por ejemplo, luego del encuentro con Piñera homenajeará Salvador Allende con una recorrida por la sala en la que se lo recuerda en el Palacio de la Moneda, junto a su hija la senadora Isabel Allende. Luego, recibirá en la embajada argentina a un grupo de dirigentes de la oposición chilena y, un poco más tarde, irá a cenar a lo de su amigo Marco Enriquez-Ominami, quien también reunirá a referentes progresistas. Todos gestos que no cayeron simpáticos en el gobierno chileno, pero que fueron aceptados con tal de recibir al presidente argentino en momentos en los que Piñera no goza de alta popularidad precisamente.
La agenda internacional quedó fracturada por la pandemia. Luego de aquel primer viaje a Israel, al que le siguió una rápida gira europea para pedir apoyos para la renegociación de la deuda, Fernández no volvió a salir del país debido a la aparición del virus. Las excepciones fueron fugaces: la ceremonia de asunción de Luis Arce en Bolivia y un asado en Colonia con Luis Lacalle Pou. Esta visita a Chile comenzó a ser bosquejada en octubre entre los embajadores Rafael Bielsa y Nicolás Monckeberg, que terminaron armando una agenda bastante completa. El viaje estaba pautado para dos semanas atrás, pero se pospuso porque Piñera y su mujer debieron aislarse por ser contacto estrecho de un caso de COVID-19.
Desde el aeropuerto, Fernández y su comitiva se trasladarán a La Moneda. Los presidentes mantendrán un encuentro a solas de alrededor de una hora, que luego se extenderá a otro más amplio con funcionarios. Al Presidente lo acompañarán su pareja Fabiola Yañez, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el canciller Felipe Solá, el ministro de Defensa, Agustín Rossi y el de Salud, Ginés González García, ex embajador en Chile, donde dejó muchos amigos. También viajarán la asesora presidencial Cecilia Nicolini, el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, y el vocero Juan Pablo Biondi. Además en la comitiva habrá cuatro gobernadores de provincias limítrofes: Sergio Uñac (San Juan), Raúl Jalil (Catamarca), Ricardo Quintela (La Rioja) y Gustavo Sáenz (Salta). Los convenios que se firmarán abarcarán temas como la provisión de gas, la posibilidad de que Chile utilice los servicios del satélite Arsat y que Argentina se conecte a la red 5G a través del cable transoceánico que unirá Australia con Chile.
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
Antes de salir de La Moneda, Fernández se reunirá con senadora socialista Isabel Allende y su hija, quienes le mostrarán la reconstrucción de la oficina de Salvador Allende en la sede presidencial y el despacho contiguo, que es el lugar donde ocurrió su muerte durante el golpe militar del 11 de septiembre de 1973. Frente a la salida lateral que da a la calle Morandé -tapiada durante años por Augusto Pinochet- hay un monumento que recuerda al ex presidente, donde Fernández dejará una ofrenda floral. Cumplido el homenaje, Fernández visitará el Congreso chileno y la Corte Suprema para reunirse con sus autoridades.
El condimento político vendrá después cuando reciba a dirigentes de la oposición de centroizquierda en la sede de la embajada y, posteriormente, en la cena que ofrecerá Enriquez-Ominami. En una de las reuniones virtuales del Grupo de Puebla de 2020, Fernández le aconsejó a la oposición chilena seguir el ejemplo argentino y unirse para derrotar a la derecha, frase que generó una queja del gobierno de Piñera. Algo parecido sucedió esta vez, porque no querían saber nada con que Fernández mantuviera estos encuentros políticos. "Le dijimos que era absurdo que si vamos a Cuba nos reunimos con las Damas de Blanco y si vamos a Chile no podemos recibir a la oposición. Tuvieron que aceptar", explicaban en el Gobierno.
El miércoles, segundo día de la visita, arrancará con un encuentro con el ex presidente Ricardo Lagos. El tramo final tendrá un carácter eminentemente económico. Fernández se verá con la titular de la Cepal, Alicia Bárcenas, y luego brindará una charla sobre la situación regional. En la residencia del embajador recibirá a los empresarios top de Chile nucleados en la central Sofofa, varios de ellos con inversiones en Argentina. El Presidente buscará despejar dudas sobre las políticas en marcha para reactivar la economía en la pospandemia.